10 Días en el Infierno [Louis Tomlinson] *1D*

Inútiles

Capitulo #10 – Inútiles

 

 

Louis***

Para que las cosas salgan bien tienes que hacerlas tú mismo, y aquí la prueba de esto: Tom y Larry son los encargados de vigilar la cabaña –cuando yo no estoy– o lo que sea que les pida. Son mi mano derecha, y se supone que para eso les pago.

Desde pequeño eh aprendido de que no se puede confiar en nadie ni en nada, porque en cualquier momento se puede volver contra ti. Pero hay solo una persona que es la excepción a mi metáfora, y ese es Park.

Park era el mejor amigo de papa, ambos estaban ligados con sus empresas, que pensándolo bien no tengo ni idea de que es. El siempre ha insistido en que me incluya en sus negocios, según él; para que vaya aprendiendo y algún día me haga cargo de ella.

Desde la muerte de mi familia me eh valido por mi mismo (bueno, puede que la herencia de mi madre y de mi padre ayudara un poco… y claro la de Park).

Me encuentro en la cocina, dándole instrucciones al idiota de Larry para que haga lo que se debe.

–¿Y qué coño está haciendo Tom? –gruño al teléfono.

–Está en el sótano…

–¿Y tu idiota? –interrumpo con otro gruñido.

–En la cocina…

–¿En la cocina? ¿Y qué mierdas haces en la cocina? ¡Vayan a vigilar imbéciles! Que para eso les pago –espero a que conteste pero lo único que se escuchan son murmullos.

–Louis –dice en un susurro –dice Tom que los polis andan cerca.

–Despístalos hacia otro lugar –grito algo alterado. Trato de pensar por un momento que hacer, pero mi cerebro está bloqueado y digo–: ¿Tengo que hacer las cosas yo para que salgan bien? ¡Joder! –grito más alto en lo último.

Escucho como algo cae al suelo y me vuelvo para encontrar a Stella sentada (o tirada de culo) en el suelo.

–¿Qué haces ahí? –preguntó mientras extiendo la mano para ayudarla a que se ponga de pie. –No importa. Necesito que te vayas. –suelto.

Necesito que se vaya. Con ella aquí no puedo hacer nada, ni siquiera pensar con claridad.

Sus ojos se humedecen y por un momento me maldigo por haber dicho eso, podía haber sido un poco menos intenso o directo. Después de haber concebido lo que quería (que no estuvo nada mal por cierto) podía ser un poco más… ¿Cómo le llaman las chicas? Aja, cariñoso.

–¡Stella! Espera –grito al ver que se encamina hacia la puerta con el bolso en mano. La única respuesta que escucho es el estruendoso ruido de la puerta al azotarse.

La dejo que se marche, ya me encargare después de ella. Ahora tengo asuntos más importantes por arreglar.

Trato de marcar a los inútiles de nuevo; pero nada, me manda directo al buzón de voz.

Busco la llaves en la meza; que se encuentra en medio de la sala. No las encuentro, y empiezo a buscar por los suelos. Están al lado de uno de los sillones, supongo que Stella debió tumbarlas cuadro cayo.

Salgo de la casa a toda prisa, sin siquiera fijarme si se cerró bien la puerta, me subo a la camioneta y arranco disparado hacia las afueras de la ciudad.

Los que debieron haber sido veinte minutos de trayecto, a velocidad normal claro, fueron solo diez.

Bajo la velocidad notablemente cuanto empiezo a entrar en terracería, me estaciono justo delante de la cabaña y bajo de auto. El lugar se ve vacio.  Las luces están apagadas, y el auto de Larry no está… supongo que por fin hicieron lo que les dije y distrajeron al policía.

Paró en seco en el momento que entro al sótano. Larry está en una esquina de la habitación, sangrando y tosiendo mientras que Tom pelea con un tipo.

<<¿De dónde mierdas salió ese?>>

Busco a tientas el interruptor para ver mejor, y al no encontrarlo me dirijo al estante, tratando de hacer el menor ruido, y tomo la primera pistola que encuentro, no le pongo el silenciador ni la cargo porque ya está hecho <<al menos estos inútiles sirven para algo>>

Sin pensármelo dos veces y sin pista de remordimiento disparo hacia la pierna del tipo. No lo mato aun, primero quiero saber quién es.

Mi cuerpo se torna de felicidad en el momento que oigo el grito del dolor de sin nombre.

–¿Quién rayos eres tú? –pregunto mirándolo y apuntando la pistola hacia su cabeza. –¿Quién es este idiota? –repito la pregunta pero esta vez mirando a Tom.

–Stefan –pongo cara de incredulidad. Como si esa respuesta fuera a responder.

¿Quién rayos es él?

–Mi hermanastro –contesta por fin.

–¿Y qué hace el aquí? –mi tono es cada vez mas furioso. ¿Cómo se atrevieron a traer a alguien aquí? Puede descubrirnos y echar todo a perder. –¿Por qué lo has traído?

–El nos has seguido hasta aquí.

–¿Con que fisgoneando? –pregunto mirando a Stefan que está en el suelo, sujetándose la pierna cubierta de sangre. –¿Lo matas tu o lo mato yo?

–No lo mates –interviene Tom al ver que me acerco nuevamente al tipo.

–Bien. Hoy tengo mejores cosas que hacer. Pero te advierto, tú te haces cargo de el, y si llega a pasar algo los mato a los dos, ¿quedo claro?

–Si Louis…

Regreso a la camioneta y me monto en ella para tomar camino hacia casa de Stella.

*Lamento MUCHO la tardanza! Es que e estado con la escuela, examenes, exposiciones y esas cosas, y cuando porfin parecia que todo habia terminado me enferme :/ Y por eso hasta hoy... pero mejor tarde que nunca ;)

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