– Si mamá, podremos ir mañana a la casa, deja de llorar, ya me convenciste. – Alec había caído ante los berrinches fingidos de su madre.
Sobre todo cayó cuando su tierna madre, había dicho que Lilith había hablado con su hijo y lo convenció de ir al instante.
– ¡Yeeei! Aquí los esperamos... A los dos Alec. – Rodando los ojos por quinta vez en 10 minutos, se despidió de su atolondrada madre.
No les había dicho a sus papás de su sexualidad, se sentía seguro pero a la vez nervioso. Pero se le había presentado la oportunidad de hacerlo, cuando festejaran el cumpleaños 21 de Magnus y él.
Los recuerdos donde la mamá de su mejor amigo y la suya, los veían enternecidamente, seguían presentes. Alec sabía que recibiría el apoyo de esas dos mujeres, pero de los padres tenía una pizca de duda.
– ¿Cómo te fue hoy? – Magnus ya estaba acostumbrado que después de las 8, Alec se metía a su cuarto a verlo sin razón alguna.
– Bien, un maestro casi me hizo dormir pero al final logré superarlo. – Contestó con una sincera sonrisa.
Magnus ya sabía del arreglo de sus cumpleaños y se sentía emocionado. Hacía mucho que no los celebraban juntos; ya que, se habían distanciado repentinamente.
– ¿Por qué pones esa triste cara? ¿Estás bien? – Por supuesto que su mejor amigo, le podía leer muy bien cada gesto.
– Sí, es sólo que... Celebraremos nuestro cumple juntos de nuevo. – Trató de hacer una sonrisa pero al final le salió algo mal.
– Oh, si... – Por un momento el menor se había sentido culpable y Magnus lo notó.
– Oye... ¿Quieres ver una película? – Cambió de tema. Había perdonado a su mejor amigo.
No entendía muy bien la razón del porqué de su distanciamiento pero las cosas se estaban acomodando como estaban antes.
Ragnor siempre llegaba muy tarde los viernes y Alec lo sabía, aprovechaba más estos días para estar más con el moreno; ya que, ya tenía unas cuantas semanas que Magnus no hacia fiestas.
Después de acostarse en la cama, con una cierta distancia de por medio, pusieron una película romántica. El menor sabía que a Magnus le encantaban éste tipo de películas.
Pero había sido una mala idea. De alguna forma, se habían empezado a incomodar. El ambiente se empeoró, o tal vez mejoró, cuando pasaron a repentinas escenas sexuales.
– Vo-voy al baño Mags. – Los ¿nervios? Sí, los nervios, le habían dado sed... Mucha sed.
– Claro, todavía tenemos tiempo de ver otra. Pero esta vez escogeré yo. – Gritó levemente a su amigo mientras buscaba otra película.
– ¿Qué escogiste? – Después de refrescarse por unos minutos, salió del baño motivado.
– ¿Ya no te molestan las películas de miedo Alexander? – Preguntó el mayor con burla.
Claro que Magnus no había escogido una película así para estar más cerca de él; ya que, se acordaba que Alec se asustaba cuando eran niños y siempre lo abrazaba; claro que no era por eso.
Solo quería comprobar algo. Se sentía muy heterosexual, bastante, aunque lo juzgaran por su ropa y gustos de moda, él era de mujeres. Pero su mejor amigo... Solo Alexander, le estaba haciendo dudar.
Maldita sea con esas películas, les tenía trauma por su niñez, pero lo que no sabía su Magnus, era que las había superado gracias a los abrazos y mimos que le daba.
ESTÁS LEYENDO
UNA VIDA JUNTOS
Fanfiction[COMPLETA] Se conocieron, se odiaron, se gustaron y se quisieron. Sin saber que desde siempre, se han amado. Porque no hay nada ni nadie que pueda separar un cariño tan potente como el de ellos. Ese día, fue el primer día que marcó por completo su...