Linaje ✓ ©

Capitulo IV

Estos dos últimos días han sido normales, bueno, no tan normales. Primero, Natasha esta más feliz que nunca y tiene un genio increíblemente amable con todos. Segundo, Gabriel sigue teniendo el mismo sueño desde esa noche que lo encontré en la cocina y eso me preocupa. Y por último se trata de Shep, hace dos días tuve un encuentro con él en la parada del autobús y fue algo intenso, no solo por como lo trate, si no como llego, también se fue.

Hace dos días atrás...

- Hola - dice Shep detrás de mí. Eso hace que me sobresalte - lo siento, no pensé en asustarte.

- Tranquilo, no te sentí llegar. - le digo quitándome varios mechones de la cara - No sabía que tenias clases hoy en la tarde.

- Que curioso - hace un gesto pensativo - yo si sabía que tenías clases. De hecho, te vi en los pasillos del Lycée con tus auriculares puestos.

- Entiendo... - esa es la unica palabra que sale de mi boca, por su confección - yo no.

- Si - me da una sonrisa completa, metiendo sus manos en los bolsillos de su abrigo - ¿Puedo tener tu número? - pregunta de repente.

Yo solo lo miro con el ceño fruncido más no le contesto. Esto hace que Shep desvía la mirada hacia abajo - lo incomode, de seguro - puede llegar hacer muy penoso en ciertas ocasiones.

- ¿Para que lo quieres? Tú y yo solo tenemos una sola clase juntos y por lo que tengo entendido, tú eres bueno. No es necesario que tengas mi número.

- Si lo se, pero... quiero tenerlo. - contesta encogiéndose de hombros - me gustaría conocerte mejor y esas cosas - dice con total naturalidad.

No, no es para nada penoso.

- No lo creo - digo algo cortante.

- ¿Por qué? - dice frunciendo el ceño

- Yo no quiero conocerte - le digo sin mas. Shep solo me mira y no dice nada.

¡Bueno Chris! ¿Qué pasa contigo? Dile que no quieres conocerlo, pero sin ser tan brusca. Shep tiene sentimientos.

- No... Quise

- Esta bien - lo corto - no me gusta estar dando mi número celular a cualquiera.

- Esta bien - dice serio - tendré que buscarlo por otro medio. Tal vez Sharon me lo de. - me da una sonrisa de lado y muy picara para mi gusto.

Me quedo mirándolo por lo que acabe de decir.

- ¿Que?

- Lo que escuchaste – me guiña un ojo – por lo que tengo entendido, no estas saliendo con nadie, así que no hay problema alguno.

Se escucha una bocina detrás de mí, al voltear es el autobús que tengo que tomar. Miro nuevamente a donde esta Shep para despedirme, pero, no esta.

Así como llego, también se fue...

Lo que me parece más raro, fue que hoy, al mediodía Sharon lo llamo para que comiera con nosotras y nos evito completamente. Reacción muy contraria de la de hace 2 días atrás.

Ya estando un viernes por la noche, se podría decir, que queda mucho por ver de lo que queda de semana.
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Sonando el despertador a las 8 en punto, me ciento al borde de la cama, frotando mis ojos y bostezando, me levanto tomando mi toalla para ir al baño. La puerta de este esta cerrada del otro lado.