Capitulo 41: Biblius Sideswaipus

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En el castillo de Rocotron, el tirano no se mostraba ante nadie en su gran habitación, esperando deseoso por ver el desenlace final en las batallas.

Gracias a la poderosa piel de Umbrella V, ni Tormintor o Umbrella IX podían pasar por la gran puerta del castillo. Ali se encontraba un poco alejada, pensando en algo, pero sin ninguna idea clara, más de que ya llegó el momento de combatir al notar que Umbrella IX cada vez se vuelve más lento por el veneno corriendo por sus venas.

Aunque pocos lo sabían realmente, el veneno de Umbrella VIII no se trataba de algo que mataba o dejaba inconsciente a quien se lo trasmitía, sino que le robaba todas sus fuerzas, hasta que este quedara sin nada.

Por esto, hay una forma de sobrevivir al veneno, la más común es lograr drenarlo completamente(o dejar muy, pero muy poco), o recuperar energía constantemente, para que el efecto simplemente necesitara más tiempo. Está más que claro que ninguna de las 2 soluciones podían desarrollarse ahí. No tenían una forma de drenar el veneno o de darle más energía a Umbrella IX.

Umbrella V empezó a correr con sus 4 piernas, envistiendo a Tormintor y a Umbrella IX sin que ellos pudieran hacer nada.

La velocidad de Umbrella V escalaba mientras más piernas usara, por lo que usando las 4, estaba lo más veloz posible. Su resistencia tampoco bajó en ningún momento, y ni se inmutaba hacía cualquier ataque, viniera de donde viniera y llegara a donde llegara, simplemente no sentía nada.

Increíblemente, Ali tuvo más tiempo para pensar ya que Tormintor y Umbrella IX lo estaban de a poco, alejando de ella, significando que no tenía que preocuparse por nada en la batalla, y solo necesitaba buscar una grieta en la piel de su enemigo.

Pensándolo mejor, Ali recordó algo de hace varios años atrás, sacando su ordenador que lo tenía bien guardado, y así empezar a intentar hackear algo, que por su mirada, parecía importante y muy difícil de realizar.

Algo similar parecía en un salón de la sala este, donde Digamer y Allen se ponían a prueba de Umbrella VI, que demostraba en cada instante volver más y más suerte sin sentido alguno.

Repleto de ira y emoción, Umbrella VI arremete contra ambos sin pensar en ninguna estrategia, ya no era un soldado de élite Umbrella, para pasar a ser un simple animal de combate sin estrategias o nada complicado, solo combatir con lo que su instinto le decía.

Sus ataques no estaban calculados y sus movimientos eran bruscos pero rápidos, difícilmente alguien podría leer tales movimientos.

Por unos golpes más su herida en la cabeza que aunque se había cerrado un poco, todavía se encontraba perdiendo un poco de sangre de ella, es que pensó que se estaba quedando loco, al notar una fuerte energía provenir de sus espaldas, una energía enorme y ya conocida, muy familiar de hecho.

Umbrella VI empuja a Digamer con todo su cuerpo y luego va hacía Allen para darle una patada en el estómago y mandarlo a volar hacía una pared, quedando medio incrustado, pero cayéndose por su peso directo al suelo, quedando completamente inconsciente y debilitado.

Digamer se enfada y sin pensarlo, se convierte en un animal atacando sin pensar a Umbrella VI, fallando ya que su enemigo tenía un mayor nivel y experiencia en atacar y actuar sin ningún tipo de pensamiento o raciocinio.

Con una de sus manos, Umbrella VI golpea directamente a Digamer, agarrándolo desprevenido, haciéndolo darse contra una pared lejana.

Al impactar con la pared, Digamer se golpea la cabeza y siente como se vuelve cada vez más loco, escuchando una voz amable que le susurraba: "Te ayudo??".

Desesperado, Digamer intenta moverse, lográndolo con mucho esfuerzo, a la vez que una sombra aparecía desde la grieta por la que antes había llegado Allen.

Black DogsWhere stories live. Discover now