Cap. 1

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Hoy hacía un día especialmente bueno, sobre todo para estar entrando en marzo, pero se agradecía, toda la semana pasada se las había pasado lloviendo.

–Buenos días –Saludo Tora mientras yo me estiraba en la entrada de mi casa.

Le devolví el saludo con la mano y cerré el portal de mi casa mientras él se acercaba a mi.

Toranosuke era un chico de constitución fuerte y alto en comparación a mi, su cabello era castaño claro y lo tenía lo suficientemente largo como para que le llegara a los hombros, pero siempre lo llevaba recogido en un moño flojo y mal hecho que me recordaba al de un samurai, pero siempre había envidiado lo bien que le quedaba ese peinado, el y yo teníamos la misma edad y habíamos sido vecinos y amigos siempre, pero el parecía ser mayor que yo en edad por su físico.

–Ha mejorado el tiempo –Comentó empezando a caminar conmigo hacia clases.

–Si! Y es genial, me anima –Respondí en contraste con su tranquilidad.

Esa era otra cosa en la que no nos parecíamos, yo soy una persona rebosante de energía casi siempre, muy malo tenía que ser mi día para que no fuera así, pero él era más calmado y disfrutaba de la vida a su tiempo. Siempre se me hizo gracioso el analizar nuestras diferencias aún llevándonos tan bien desde siempre.

–Se nota –Comentó con una ligera sonrisa caminando más despacio que yo provocando que caminara de espaldas–, te vas a caer.

–Siempre lo hago y nunca me caigo –Respondí con mi risa habitual mirando hacia el cielo.

Espero que el buen tiempo dure al menos esta semana entera.

–Algún día será la primera vez –Comentó dándose por vencido conmigo.

–Que tal vas con los entrenamientos? –Pregunte cambiando de tema.

–El equipo está bastante animado, al haber ganado el concurso de este fin de semana parecen dispuestos a todo –Respondió orgulloso también del resultado.

Supongo que era para sentirse orgulloso si eres el capitán del equipo de kendo y consigues que nuestro centro vaya de los primeros en las clasificaciones.

–Eso es genial! –Conteste aplaudiendo también como felicitación–. Rápidamente conseguiréis terminar de los primeros otro año más.

–Si, supongo que terminare la preparatoria consiguiendo otra victoria de nuestro equipo, y tú? Que tal con los entrenamientos?

Al contrario que él yo competía para entrar en competiciones a nivel mundial, hacía mucho que había dejado los clubs de instituto y las competiciones entre centros, la gimnasia rítmica invadía mis tardes para hacer frente a las competiciones nacionales que empezaban a finales de este mes.

–Supongo que igual que todos los años –Respondí encogiéndome de hombros sin dejar de sonreír–, si todo va bien este año no tendré problemas con las pruebas de peso de la entrenadora.

–Recuerda tener cuidado con las pruebas de peso –Comentó no gustándole demasiado hablar de eso.

Pero desgraciadamente era habitual para mí tener que pasar por ellas para cada competición y seguir un régimen extremadamente estricto para no engordar nada, sabía que a él eso nunca le había gustado, desde pequeño tengo que controlar de forma obsesiva todo lo que entra en mi cuerpo para no engordar, era algo que estaba al día y él lo había vivido conmigo desde que empecé en gimnasia rítmica.

–Tranquilo, lo tengo todo controlado –Corte dejándolo como un tema menor.

–El año pasado dijiste lo mismo y en mitad de una clase de educación física desfalleciste –Rechistó dándome un toque en la coronilla con los nudillos.

Fin (Yaoi/BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora