-¡Ya estoy, estoy aquí! –Dije entrando rápidamente al despacho de Bob olvidándome de tocar.
-Oh, buenos días, Jacielle.
-¡Buenos días! –Le sonreí ampliamente para luego girarme hacia Bradley. –Buenos días para usted también, señor Levis.
-Buenos días. –Me respondió cortésmente.
-Solo pasé para avisarle que había llegado, señor. Estaré en mi oficina si me necesita.
-Adelante. –Dijo dándome permiso para salir.
Caminé hacia mi oficina cuando una espectacular idea pasó por mi cabeza.
¿Y si...
Retrocedí en mis pasos para dirigirme a aquel despacho que nunca había pisado, pero que sabía dónde se encontraba.
-No me sorprende nada... –Murmuré cerrando la puerta después de comprobar que nadie me había visto entras en un sitio donde no había sido invitada.
Todo en su interior estaba perfectamente colocado y ordenado. Daba miedo tocar algo por si se rompía.
A un lado de la entrada, había un sofá de cuero marrón junto a una mesita de centro con varios libros encima.
Cogí el primero de todos para acostarme sobre el sillón y comenzar a ojearlo sin muchas ganas.
-Anda, Orgullo y prejuicio... –Murmuré comenzando a leer las primeras páginas antes de que la puerta se abriera fuertemente.
-Ya decía yo dónde estabas. –Levanté la cabeza del libro para verlo cruzado de brazos.
-¿Qué?
-Fui a tu oficina y no te encontré. Ya iba a ponerme como loco.
-Sí, ya veo ya... –Se acercó a la puerta poniéndole el pestillo antes de caminar hacia mí.
-No sabía que te gustaba leer. –Dijo quitándome el libro de las manos para ponerlo en su sitio.
-Y yo no sabía que te gustaba este... –Callé en cuanto lo vi inclinarse hacia mí para besarme. –Tipo de libros.
-No sabes muchas cosas todavía de mí. –Asentí de acuerdo con él para volverlo a besarlo.
-¿Estás bien? Me llevé una gran desilusión al no verte por la mañana...
-Sí, simplemente fui a acompañar a Amber al médico.
-¿Está enferma?
-No, probablemente embarazada. –Dije sorprendiéndolo por completo. –Pero no se lo digas a nadie aún, menos a mi padre.
-Sí, claro. –Dijo aún sorprendido. –Estabas queriéndole poner hermanos a Matt y al final vas a hacer tú quien tenga uno.
-Sí, pero a mí no me importaría tenerlo. Además, aún no es de seguro. –Rodó los ojos poniéndose de pie para irse a sentar junto al escritorio encendiendo el ordenador. –¿Vas a pasar de mi para trabajar?
-Hay trabajo por hacer.
-Ay, la gala benéfica... –Dije poniéndome de pie también.
-Sí, pero no te preocupes por ella. Solo queda la confirmación de algunos invitados y alguna que otra cosa tonta.
-Así da gusto... –Murmuré sonriendo para rodear la mesa e irme a sentar sobre sus piernas.
Sorprendentemente, se dejó.
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For You
De TodoJacielle McLister, una chica joven, imprudente, malcriada a la que nunca le había faltado nada materialista en la vida. Su belleza e inteligencia la habían convertido en la mujer que era ahora, lo que ella no sabía, era en cómo se vería involucrada...