15~ [El pasado del presente] parte 2

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... ... ...

-¿ Cómo fue tu primer día en la academia?- ambos estaban en casa y Sans estaba preparando la cena y aún que había visto una heridas en el cuerpo de su hermanito, no le dio mucha importancia ya que el creía que los niños eran brutos y que él estuviera así era una señal de que había estado jugando con otro niños. Grave error.
- Bien- contesto el menor en un tono cortante, no quería levantar sospechas.
- mmm? Okeey...- ambos se sentaron en la mesa y no se dijeron nada más, tal vez ese fue otro error grave, el no decir nada y callarlo todo, si tan solo hubiera pedido ayuda con lo que sucedió no terminaría todo a como es ahora.

Los días pasaron y era la misma rutina para Papyrus, todos los días lo tomaban como el juguete sexual de aquel endemoniado niño y ya estaba harto de aquel trato hacia su persona. Los seguidoras podían ver con pena aquellos tratos pero no hacían nada, tal vez porque su líder también los trataba así y para que no fuera tan duro como con Papyrus con ellos solo le siguieron el juego.
- y?, Alphys ya está?- preguntaba el menor cansado de esperar.
- Sii, ya la termine y según las instrucciones del libro, debes tomar solo una píldora por semana ¿Entendiste?- le extendía un frasco pequeño con unas píldoras rojas en su interior.
-Si, gracias-.

Al pasar los meses, Papyrus se volvía cada vez mas frío y mas cortante con sus palabras, la relación que tenían los hermanos iban decayendo, llegaron al punto en que pasaba un día entero sin hablarse. Papyrus había empezado a tomar las pastillas hacia ya cinco meses y cuando por fin logro hacerse fuerte, no tuvo ni una pizca de piedad con aquel niño ya que lo había torturado lenta y dolorosamente, dejando para lo último al mas desgraciado con la muerte. Los seguidores de aquel asqueroso cachorro, se mostraron agradecidos hacia éste y empezaron a seguirlo por todas partes como si el fuese el líder como muestra de agradecimiento y disculpas por no hacer nada en aquellos horribles actos. Pero lo que nadie sabia era que aquellas pastillas tenían un efecto secundario y ese era el incremento de la ira en el individuo. Papyrus estaba cegado de poder por lo que al acabarse aquellas pastillas fue a reclamarle mas a Alphys, pero esta le había dicho que aquellas píldoras llevaban un tipo de flor que ya se yacía extinta y que ella no noto que la que había tomado era la última de esa especie [Alphys destructora de especies, okno]. En un arrebató de ira Papyrus golpeó a su compañera, lo cual al volver en sí se intento disculpar pero una amiga de ésta apareció empujando a Papyrus al ver que éste la había golpeado.
- Alejate de ella, bastardo- la fuerza y altura de la chica podía con Papyrus a pesar de haber tomado aquellas pastillas.
- Undyne, no espera, no fue su culpa- la chica pez miraba a su compañera y luego al esqueleto alto, quien tenía la cabeza agacha y un semblante serio pero a la vez triste.
- Bien, si te veo tocarla otra vez te mato- amenazó Undyne.
- Lo... Siento...- Papyrus había agachado la cabeza aun más, se sentía miserable y un idiota total, unas lágrimas lo habían traicionado bajando por sus mejillas y Undyne se había percatado de esto por lo que solo le hizo un gesto con la mano para que lo dejara.

...

Los años pasaron y Papyrus por fin se convirtió en el segundo al mando de la guardia real, había superado varias metas, como el que todos le temieran o lo respetaran, convertirse en uno de los guardias mas fuertes y ganarse la muy buena fama de ser el gran y temido Papyrus... Aún que no se aplicaba de la misma manera con su único familiar, su hermano Sans. Ahora, gracias a su "nuevo" poder y a la ira, Sans paso de ser el hermano responsable y cariñoso a la perra de la casa.
Esto paso cuando el guardia real un día tuvo una cita con la popular estrella de la televisión, Metatton. Papyrus tenía una especie de atracción, aún que no estaba seguro de que se tratara de amor, éste le calentaba con sus movimientos sexuales para provocarlo, ¿Por qué? Bueno digamos que estaba aburrido y si bien estar con el guardia real mas famoso del Undergraund le garantizaba aun más popularidad, no quería decir que de verdad le gustara estar con él. Papyrus se había enterado de esto luego de que Metatton había salido a buscar anda a saber que cosa.
- si sabes que a él no le importas una mierda, ¿no?- Alphys se encontraba subiendo las escaleras mecánicas con un montón de papeles en la mano- q-quiero decir...- se había percatado de como le había hablado a éste otro por lo que intento explicárselo - é-el solo te esta u-utilizando para obtener m-mas fama... A demás de que a él le gusta... En realidad ama a su primo- Alphys había susurrado esto pero el otro logro captar enseguida lo que dijo.
Papyrus no era ningún tonto, tenía sus sospechas pero que ahora se lo confirmaban era mucho peor, salió del laboratorio y se dirigió a su casa con la ira que rebosaba sus cuencas, no iba a dejar que aquella chatarra se saliera con la suya. Sabía que Sans estaría allí limpiando lo que él le había ordenado ¿Cuándo su hermano se volvió tan sumiso?, la repuesta es simple y es que él mayor amaba a su hermano por lo que cada golpe, insulto o humillación que recibía lo dejaba pasar, pero las cosas se intensificaron y ahora cada maltrato era un peor que antes. Dejando a un Sans con el alma resquebrajada.

Sans creía que su hermano no llegaría esa noche por lo que se relajó para calmar sus nervios, se había puesto un delantal rojo para no ensuciar su ropa, él llevaba puesto su camisa con mangas cortas y unos shorts, ambos color negros y iba sin sus calzados, comenzó a limpiar y a hacer la comida lista para mañana. Su jefe no llegaría hoy pero quería tener todo listo para mañana así ese día lo tendría libre, empezó a barrer mientras que al tararear una melodía bailaba al son de la música. Habían pasado varios minutos y él no se había percatado de la presencia de su hermano por lo que Papyrus pudo ver en los movimientos de su hermanos mientras tarareaba que nunca lo vio de esa manera, tan... Sexi?, los movimiento del otro lo había excitado y ahora no veía a su hermano, veía otra cosa. Lo siguiente que paso fue culpa de Metatton, la calentura que le provocó anteriormente éste no se quitaba y ver así a su hermano lo había encendido mas, estaba claro, cerró de un portazo la puerta haciéndose notar a lo que el otro esqueleto respondió con un salto del susto.
- J-jefe...- el mayor cambió totalmente su animo, ahora temblaba y tenía la cabeza agacha.
El menor no dijo nada solo arrinconó al mayor contra la pared y el resto ya es historia contaba.

Escaparme de ti// fontcest// Red xEdgeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora