Tom Hiddleston: Mi Sugar Daddy? (En edición)

16. Celos Incontrolables.

1 mes después.

-Por Dios Hayes.- solté una carcajada tapando mi boca seguidamente.

-¡Lo juro! Y yo no sabía que hacer adí que solo deje la comida allí y me fui.- rió viendome.

-Hubiera querido ver eso, en serio..- negué aun riendo y el sonrió acercandose a mi.

-Pero.. al menos estamos aquí ahora..- sonrió y me besó.

Habíamos estado discutiendo sobre el incidente -muy gracioso- en un restaurante al que fue en su viaje a España.

Tuvo que irse por 2 semanas por un viaje de trabajo de sus padres y llegó ayer y solo hemos estado hablando acerca de cómo le fue, y no he parado de reírme desde entonces.

Mi relacion con el va cada vez mejor, nos entendemos muy bien, y Hayes es muy atento y detallista conmigo, cosa que me encanta. Es muy sincero y segun él soy "su querido diario". Me cuenta cualquier mínima cosa, lo cual no me disgusta en lo absoluto. Me da gusto saber que me tiene tanta confianza.

Yo al principio no era muy abierta con él. Habían cosas que aún no le decía. Como que trabajaba con Tom en la empresa de papá. Pero debido a que me di cuenta que el merecía saberlo, por el hecho de que es mi novio, y debo tenerle la mayor de las confianzas.

Terminé diciendole y el lo entendió y lo tomó muy bien. Aunque admitió que le daba un poco de celos y "mala espina" que trabajara con Tom, a solas.

Habían algunos asuntos sumamente confidenciales, que solo lo sabíamos y tratábamos Tom y yo. Yo le contaba a Hayes, más no le decía cuales asuntos eran. Pero a la final debe aceptarlo.

Yo mejoré mucho en mi labor, y puedo decir que me voy acostumbrando y que me gusta. Ya no me siento tan inexperta, ni en el espacio cuando estoy en una junta. Lo cual debo agradecerle a Tom. Me ha ayudado tantísimo.

Nos hemos vuelto hasta amigos podría decirlo. Al empezar, peleabamos por cualquier cosa, aún lo hacemos pero ya no tan seguido. Y tampoco tan gravemente.

El tiene una mentalidad, que yo estoy aprendiendo a entender y a seguirle el carril.

Así que hemos estado avanzado, y mis padres, Tom y yo, no podríamos estar más felices.

Ellos aún no piensan volver de viaje, dicen que quieren quedarse allá aún mas. Y que, si yo quería quedarme en serio en la empresa, mi padre podría dejarme ésta sede a mi y a Tom. Y el trabajar en la sede de Alemania.

Tom me dijo que no tomara una decision aún, que solo iba a abrumarme y dejarlo todo. Asi que le hice caso, y decidí dejar que el tiempo decida por mi.

Volviendo a la realidad, Hayes y yo.

El comenzó a desvestirse, y yo tambien lo hice.

-Déjate llevar..- susurró y fuimos a mi habitación.

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Me senté en la cama tapando mi cuerpo desnudo con mi sábana.

-Hayes, debes irte ya.. -lo miré mientras desechaba el condón que habíamos usado y me pasaba una cajita de pastillas.

Y sí, habiamos comenzado a tener relaciones sexuales, pero Hayes era tan responsable que me hacía querer hacerle mil hijos a él.

-Ay amor.. ya he dorm..-el sonido del timbre lo interrumpió.

Suspiré y me puse mis bragas y me puse la sudadera de Hayes bajando rapidamente a ver quién era.

Camine por el salon y vi la ropa regada por los sofás, estaba apunto de regresar a recogerlas pero el timbre sonó de nuevo.

-Ya voy!! -exclamé y caminé rapidamente la puerta y abrí.

Tom.

Oh joder.

-Hol...-su voz decayó cuando vio mi vestimenta -o la falta de ésta- y yo me sonrojé fuertemente.

-Tom.. ¿q..que haces aq..quí a esta..ss horas?- pregunté.

-Son las 7pm, no es tan tarde. Estabas durmiendo? Mírate el cabello. -me señala y yo trago saliva.

-Pues ya me estaba acomodando..- miento.

-oh, bueno, mira.

-Amor, me llamó mi mamá y debo irme. Pero no sabes las ganas que tengo de quedarme y repetir lo de hac.. -cuando Hayes terminó de recoger la ropa y miró hacia nosotros.

-Que hace el aquí!? Y por qué está sin ropa? -soltó Tom.

-El.. hmm.. -me mordi el labio muerta de verguenza.

-Soy su novio. ¿qué esperabas? -Hayes se termina de vestirse y nos mira.- Adios amor -me besa cortamente y mira a tom.- Adios.

Se aleja y yo miro a los ojos que quieren aniquilarme.

-¿¡QUE DEMONIOS HICISTE CON EL HANNAH!? -gritó y me encogí.

-Cálmate Tom, yo...-

-Tú te acostaste con ese idiota. Y además  dice que es tu novio. Eres una cualquiera!

De repente fruncí el ceño. ¿que se creia?

-¿Que acabas de decir? ¡No soy una cualquiera! NO ES DE TU INCUMBENCIA LO QUE HAGA O NO.

-El solo quería eso, y ya lo tuvo. Qué facil se la dejaste.

-¡Cállate, no sabes de lo que hablas! sí, es mi novio. Y yo sé lo hago, y si viniste a faltarme el respeto es mejor que te largues.

-No me voy a ir.

-¡Largate! O tendré que llamar a mi papá y decirle todo lo que me has dicho.- me sentí como una niña mimada pero de ninguna manera iba a dejar que me llamara como el quisiera solo por que tuve sexo con mi novio. ¿¡que de raro tiene eso!?

-Oh, ¿y crees que les gustara saber que su hijita mete a hombres aquí y que peor aún, vienen despues a repetir?

Le dí una fuerte cachetada, con todas mis fuerzas dejando su mejilla roja al instante.

-Qué. Te. Vayas. AHORA MISMO. -grité con los ojos cristalizados.

-No me voy a ir!

-No tienes ningun derecho a venir a llamarme zorra y ponerte así por MIS cosas personales. ¡¡¡No te incumbe!!! 

-NADIE PUEDE TOCARTE HANNAH. TU ERES MÍA

Q..que yo qué?