BRING HIM BACK ༄ MARVEL

•CAPÍTULO 20•

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•CAPÍTULO 20•

WANDA HA VUELTO

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El dúo dinámico de América y Logan habían llegado al edificio de los Vengadores. En la puerta, luego de salir del ascensor los esperaba un muy despierto Capitán América, para ser la hora que era, la chica se sorprendió bastante.

¿Por qué él los estaba esperando?

—Buenas noches, ¿qué era tan importante para que se aparezcan a estas horas de la madrugada? —preguntó él.

—La niña sabe cuándo y cómo van a declarar la guerra —respondió de inmediato Logan.

América, quien ahora ya estaba más calmada miró a ambos hombres y asintió. Debió haber supuesto que no podrían esperar mucho para eso.

—Lo harán cuando Donald Trump asuma como presidente —respondió ella—. Lo vi en una visión, Pietro estaba allí.

El Capitán no necesito más que eso para hacerlos entrar. Él los invitó a sentarse en la mesa mientras llamaba a los otros momentos de su equipo. Todos con cara de adormilados se iban presentando de a poco hasta formar la mesa.

Nadie se quejaba, todos sabían que si los llamaban a esas horas debía ser algo con riesgo nacional, y así lo era.

—¿No ha llamado a los de su equipo? —preguntó Clint a Logan haciendo referencia a los X-Men.

—No, creo que lo mejor era venir con ustedes. Son los más diplomáticos con respecto a los humanos —respondió.

América se sentaba aún en silencio mirando a sus manos. Se sentía feliz, por fin había podido hacer algo útil. No como la última vez que había estado en este lugar.

Aunque, aún se sentía algo avergonzada por eso.

—Creo que fue una buena idea, aunque debemos avisarles a ellos. Ustedes sabrán como controlarlos mejor —Steve habló.

Eso era sinónimo de, como ellos sabrían derrotarlos. Mucha sangre correría, sólo se esperaba que no fuera sangre inocente. El estómago de América se revolvía, ya estaba demasiado nerviosa. De todos modos, a ella no la dejarían ir ese día. Ella no sabía cómo defenderse.

Llevarla allí era sólo para que probablemente la mataran.

—¿Lo has visto todo? ¿Sabes dónde estarán ellos? —preguntó Sam.

Todos los ojos se posaron en América, ella asintió.

—Si, vi que M-magneto subía a declarar la guerra al mundo, que Pietro estaba a su lado y otras personas que no conocía a su alrededor —dijo tratando de recordar.

Le causaba un poco de conflicto interno decir el nombre de Magneto, en verdad le tenía bastante miedo.

—¿Qué más? —preguntó Clint.

Debían saber todo lo que más pudieran sobre ese momento. Quizá así podrían neutralizar el problema mucho antes de que sucediera. Así pudieran evitar derramar sangre inocente.

El declarar una guerra en un lugar lleno de personas solo haría que muchos de ellos murieran tratando de defenderse. Nadie quería que las personas allí murieran. Ellos no podían juzgar si lo merecían o no. Pero personas que buscaba destruir al mundo si merecían morir.

Debían ser detenidos y ellos los así lo harían. No permitirían que la tercera guerra mundial comenzará. Menos aun cuando ellos tenían la oportunidad de detenerlos.

América estaba en su mundo mientras las personas a su alrededor le hablaban. Ella no escuchaba. Logan les dijo que seguía en shock por lo que vio. Que simplemente la dejarán en paz, bastante estaba haciendo.

Las voces seguían escuchándose lejos de los oídos de América.

Todo hasta que una voz en especifico hizo que su atención se volviera a la persona que había llegado. Una voz con un acento extranjero del este de Europa. Wanda Maximoff había vuelto.

Todos la miraban sorprendidos, ninguno de ellos estaba listos para atacar.

—He cometido un error al irme, en verdad lo siento. Ahora me di cuenta el grave error que cometí —dijo a todos los presentes allí.

Ninguno dijo nada.

—No los quiero engañar, en verdad. Y-yo estoy muy arrepentida, vi que Pietro, el hombre ese, ellos no son mi familia. Solo buscan destruir al mundo —explicó—, y yo no quiero ser parte de la destrucción de nadie, quiero salvarlos.

Clint fue el primero en levantarse e ir hasta ella. La abrazó, la abrazó como nunca lo había hecho. En verdad le tenía un gran cariño a ella.

—Gracias por volver, Wanda —dijo—. Gracias por en verdad volver —repitió.

Los demás aún desconfiaban un poco de ella. Tenían miedo de que sólo fuera un plan. Plan para destruirlos.

—Ella no estaba el día de la declaración, además la vi pelear con su hermano. Ella de verdad no quiere matar a nadie —dijo.

Todos se miraron entre sí antes de poder confiar plenamente en Wanda, otra vez. Así mismo todos excepto Logan y América se levantaron para saludarla.

—Lo has hecho bien, niña —palmeo la espalda de América, Logan.

—Quiero descansar, Logan —le dijo.

Él asintió y se levantó dispuesto a llevarla a la mansión. Steve se ofreció a dejarlos quedarse allí, llamarían al resto de los X-Men en la mañana para que vinieran hasta ahí. Logan acepto eso, tenía miedo de que América se fuera a desmayar nuevamente.

Wanda reconoció al instante quien era ella, no perdió tiempo y fue a abrazarla.

—Gracias por hacer que ellos confiaran en mi —le agradeció.

—Descuida, sé que siempre fuiste de los buenos. Muy en el fondo incluso tú lo sabías —le dijo a Wanda, quien la miraba contenta, a pesar de todo lo que sucedía.

Por fin ambas luchadoras se volvieron a encontrar. Ahora juntas podrían poner fin a toda la catástrofe que estaría por suceder, ellas, después de todo, serían claves en el futuro de la humanidad.