Just a few days in Busan | Kookmin | EN EDICIÓN

9 : ducha "rápida"

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—¡Jeon!, ¡llevas una hora allá!, ¡apresúrate!, ¡son las ocho en punto!— gritó SeokJin desde la primera planta para avisarle. Se estaba haciendo tarde. Y a pesar de que ya todo estuviera preparado abajo, Jungkook era un desastre andando. Jin había entrado hace unos minutos a la casa del castaño, cuando Namjoon fue por él a apresurarlo, así que, de una ves, a ayudarle a traer los recipientes en donde estaba la comida que había preparado.
Por un momento casi se sale su corazón de su pecho, cuando su novio le juega una broma en la que fingía que la olla con la comida preferida de Jimin se le caía.
Lo habría golpeado sino fuera porque traía más cosas en las manos.

Rápidamente , Kook había salido  casi volando hacia su habitación, esa sería la ducha más rápida que había tomado en su vida. Pues aunque faltaba una hora para que Jimin llegase, tendría que revisar que todo saliera perfecto para el, y para su novio.

Cuando entró a la habitación, sacó y aventó la ropa que se pondría en la cama, bueno, que Jin había escogido para el.
Y esa sería la ducha más rápida que nunca se había dado.

Y mientras abría la llave, y  veía el agua caer, se imaginaba, muchas cosas... enserio  esa noche sería en la que le propondría matrimonio...
Quien lo diría, Jeon Jungkook, casado.

Su madre ahora le estaría reprochando que siempre le había dicho eso, que terminaría perdidamente enamorado.

Y realmente estaba pasando, se había enamorado a más no poder. Sintiendo como si necesitara de Jimin a cada segundo. Como si respirara Jimin.
La vida le estaba dando, lo que ni en ningún momento había pensado hacer.
Siempre se había burlado del amor. Se había reído de sus amigos, porque se veían como tontos babeando por su pareja. Se había negado a ver con otros ojos a cualquier persona.
El máximo cariño que sentiría, sería el que le tendría a sus padres, o a sus mascotas.
Nunca se interesaría por alguien, como para tener una relación seria.

Había  sido una idiotez pensar así...
Pero, es que, no había conocido el amor.

Y lo descubrió cuando, en una pequeña fiesta que había organizado Namjoon dentro de su antiguo apartamento, se encontraba charlando con sus amigos.
Solo bastó mover sus ojos unos milímetros a la derecha, para observar una cabellera, en ese entonces, anaranjada. De espaldas a él. Y es que la contagiosa risa de aquella persona había llamado su atención.
De alguna manera, solo quería ver él rostro de aquella persona. Así que observó por algunos segundos más hasta que aquel, se inclinó hacia delante a escuchar algo que un chico a su lado le decía en secreto; se sonrojó demasiado cuando, un Jimin más joven volteó a verlo y le lanzó una sonrisa que, enseguida se había sentido como un flechazo. Una sonrisa que le había quitado el aliento. La sonrisa que lo tenía enamorado hasta el día de hoy.

Así que le sonrió de vuelta. Y había estado seguro de que había parecido un maldito bobo, dándole una sonrisa grande y viéndolo con los ojos con los que un perrito ve a su dueño después de muchos días.
Había sentido como las comisuras de sus labios se levantaban lentamente, hasta alcanzar su máximo punto.

— Kook, ¿me escuchas?...¿qué estas...? — escuchó en su cabeza, la voz de Namjoon pidiéndole atención. Pero, simplemente no podía quitar los ojos de aquel chico, incluso cuando el de pelo naranja, ya se había volteado de nuevo para seguir platicando con su amigo.
Estaba seguro de que esa imagen se quedaría grabado en su cabeza. Esa sonrisa la tendría clavada en su corazón para siempre — ¡oooh!, ahora veo...espera. ¿A quien observas? ¿a SeokJin?, aaah no hermano, consíguete el tuyo — le dijo Namjoon y eso fue lo que lo había regresado a sus cinco sentidos.

— ¿se llama Jin? — atinó a decir

— ¡si! Y es mío, puedes salir con cualquiera de aquí, excepto el— enseguida, su sonrisa se fue de su rostro, y su característico -desde ese día- gesto de golpear su lengua contra su mejilla apareció en el — mira, si volteas un poco a la derecha...puedes observar a Park Jimin. Quédate con él, es lindo...y soltero. Puedes pintar su cabello los fines de semana y acariciar a su gato— se dejó mover su cabeza por las manos de su amigo, apuntando al chico al que anteriormente estaba observando.

— entonces...¿Park JiMin?—

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La inspiración está regresando a mí.
Se que dejo de escribir de la nada, lo siento. Las palabras no llegaban para escribir en el fic.
¡Pero listo!
Llegue y no me iré...espero.
Bueno, haré lo posible para mantenerme fresca.

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Las 500 vistas me emocionan. 🤩
Espero que les esté gustando.

Ustedes que piensan, ¿la noche de Kook será un éxito?, o un desastre...como siempre.
🐥🐰