—Ha, eso suena divertido.
—No lo volveré a hacer, díselo.
—Bien, no es que me importe, si solo eso ibas a decirme. Adiós.
Le colgaron tras aquello, sin esperar respuesta y no pudo hacer más que resoplar y guardar el celular.
Unas sombras se deslizaron tras el y cuando se dio cuenta, estaba rodeado. Una sonrisa que contenía la ira fue quien habló.
—Charles ¿Por qué no nos acompañas?
Entraron en el primer callejón que encontraron y entre todos ellos, salió Alexander, dirigiendo un puñetazo a su estómago. Se arqueo del dolor, dando un quejido ahogado por culpa de la tos que le dio.
—Q-que.—Pronuncio bajo, le costaba respirar.
—¿Que maldito problema tienes? —La rabia se notaba por cada parte de él.
—Yo no.—Fue callado por otro puñetazo y una cachetada.
—Cierra la puta boca.—Interrumpio Madison, quien estaba a su derecha.—Maldito enfermo, degradar asi a alguien m-mu —Ni siquiera pudo decir la palabra, su rostro se impregnó de dolor y miró a otro lado.
—¿E-enfermo?—Apenas podía hablar, pero se escuchaba ofendido.—El único enfermo es Alexander.
Todos miraron al pelirojo por un momento, algunos de allí le querían pero tenía un poco de razón. Luego volvieron a Charles.
—Me toca.—La voz profunda de Lafayette interrumpió y le tomo del cuello, todos se apartaron un poco.
Lo alzó y estuvo a punto de lanzarle con fuerza contra el piso, pero saco algo la bolsa de su pantalón.
—¡Espera!—Alzó su brazo, con el objeto entre los dedos y todos lo miraron.
Era un relicario dorado, rodeado de ramas y espinas verdes. Cuando lo vio, Alexander corrió a arrancarlo de sus manos, la cadena era lo suficientemente fuerte para resistir el tirón.
Lo admiro, sujetándolo contra su pecho.—¿Qué haces tú con esto?—Se le vio furioso, pero se controló, debía saber la respuesta.
—A decir verdad, Thomas.—Hablo como si de verdad supiera algo, pero, cuando todos estaban concentrados, salió corriendo tan lejos como pudo.
Se perdió, el maldito había logrado escapar.
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[Hamilton] Cuando Vuelvas (Jamilton con Ham histórico y Jefferson Musical)
FanfictionLa desaparición de la pareja de Alexander lo tenía intrigado, preocupado. Pero, cuando averigua porque no ha mandado mensaje ni ha ido a verlo, decide empezar a mandarle mensajes. Esta es la historia de alguien desesperado por respuesta. -- Es Hamil...