Capitulo 25

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Apenas puse un pie dentro de la sala común para irme una voz me detuvo

- ¿A dónde crees que vas así vestida? -pregunto Harry haciéndome girar hacia el

-Hermanito, tengo una cena con alguien-dije abrazándolo

-Contrólalo, que no se te acerque mucho-dijo devolviéndome el abrazo

-Lo tendré en cuenta, nos vemos-dije saliendo en camino hacia mi habitación, ya era de noche y en unos minutos seria la cena en el gran comedor.

Durante el camino hacia mi habitación me encontré con varios alumnos que me miraban haciéndome sentir incomodad. No tarde demasiado en llegar hacia mi lugar de destino. Apenas abrí el retrato vi el lugar, y a Sirius de espalda. Por la ventana abierta se apreciaba una hermosa luna, la sala estaba iluminada por algunas velas, y en la mesa se encontraba nuestra cena ya servida, no paso mucho tiempo hasta que Sirius se dio la vuelta y encontrarse conmigo, quedando con la boca ligeramente abierta. Este iba demasiado guapo, demasiado.

-Sirius te van a entrar moscas en la boca-dije quitándome mi abrigo para que este observara el vestido

-Te vez bellísima-dijo agarrando mi mano para plantar un beso en ella, seguramente en este momento estaré como un tomate, su mirada seguía teniendo ese brillo extraño de la tarde. Este sin perder tiempo me aparto la silla para que me sentara y luego lo tuve adelante mío

-El lugar, esta bellísimo-dije mirando mi sala

-No tanto como tu-dijo mientras tomaba el vino de la mesa y me servía en la copa-Espero que te guste-dijo señalando la comida que parecía ser carne con algún tipo de especia

-Se ve genial, pero ¿cómo la conseguiste? -le pregunte con curiosidad

-Un mago nunca revela sus secretos-dijo para luego ambos comenzar a comer,

De vez en cuando este contaba algún chiste o me adulaba mientras yo me limitaba a reírme, y sonrojarme como un tomate, una vez que terminamos de cenar, por mis oídos entro el sonido de una tenue música, por lo que levante mi mirada encontrándome a Sirius ofreciéndome su mano la cual agarre con gusto, para levantarme de la mesa .Puse mis manos en sus hombros y este en mi cintura pegándome a él, levante un momento la mirada y lo vi, esos hermosos ojos grises que me hicieron derretir por dentro.

Comenzamos a movernos a un ritmo lento, aquel momento pude sentir como mi corazón se aceleraba y sentía mis piernas como gelatina. Éramos solamente nosotros dos, perdidos en la música, aunque en realidad eso era lo único que no tenía mi atención, esta estaba en el hombre al que tenía en frente.

Pero de un momento a otro la música paro, levante mi mirada, Sirius me miraba fue entonces que poco a poco ambos nos íbamos acercando para finalmente fundirnos en un maravilloso beso, junto a este, miles de sensaciones sentía en mi cuerpo, y también la necesidad de que aquello jamás se acabara, porque definitivamente estaba enamorada de Sirius. Sus labios encajaban perfectamente con los míos, aquel no era un beso desesperado, todo lo contrario, era dulce, tierno, y miles de otras cosas. Para mi duramos vario rato así hasta que finalmente él lo termino.

-Realmente quería hacerlo desde hace mucho-dijo viéndome sonriendo

-Yo igual Sirius, creo que desde niña-dije bajando la mirada para el levantármela y besarme nuevamente. Poco a poco este se fue sentando en el sofá de la sala para yo quedar a ahorcadas arriba de el aun besándonos, tocaba su cabello mientras este acariciaba mi espalda.

-Estaremos locos? -le pregunte riendo

-Si cariño, pero locos de amor-dijo sonriendo para esta vez yo darle un beso corto en los labios-muy locos-dijo para comenzar a besar mi cuello, produciendo miles de sensaciones nuevas.

-Sirius, creo que es hora de dormir

-Uh pero estamos cómodos así no-dijo refiriéndose al sofá

-Ya lo sé, pero mañana es el partido y debemos ir-le dije dándole un corto beso para luego levantarme de su regazo acomodando mi vestido

- ¿Debemos?-pregunto confundido

-Se que iras, aunque yo no quiera-le dije entrando a mi habitación

-Tienes razón y sabes que más pasara? -dijo agarrándome de la cintura antes de entrar al armario

-Si dormiremos, nada más-dije dándome vuelta para poner mis brazos detrás de su cuello

-Me conoces demasiado-dijo dándome un pico

-Aja-dije para empujarlo y entrar a mi armario para ponerme mi piyama, al salir lo encontré aun sin ponerse su ropa para dormir

- ¿Me ayudas?-me pregunto señalando su camisa para yo reír para luego comenzar a desabrocharla bajo su atenta mirada, mire su pecho con tatuajes, este hombre era el más atractivo que jamás hubiera visto y jamás me cansaría de decirlo, la camisa callo para luego el tomar mi rostro entre sus manos y besarme con pasión, poco a poco fuimos caminando hacia la cama en la cual termine con el encima.

-Um Sirius-dije separándome del beso, pero este seguía besando mi cuello- debemos dormir-le dije para luego el mirarme

-Pero otro día no te salvas-dijo sonriéndome-y por esto deberás dormir muy cerca mío, así-dijo dejándome en un lado, bien pegada a su cuerpo.

-Buenas noches-dije dándole un beso

-Muy buenas-dijo pasando un brazo por mi cintura para acercarme aún más a él.

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ACTUALIZO TODOS LOS LUNES, MIERCOLES  VIERNES Y TAL VEZ OTROS DIAS...

Caroline DumbledoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora