Capitulo 23

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Una vez que salí de mi habitación me encontré a Sirius en la sala con la mirada perdida por lo que decidí hablarle.

- ¿Te encuentras bien? -le pregunte con preocupación en mi rostro- ¿te duele?-algo le pregunte acercándome a el

-Estoy de lo mejor Caro-dijo mirándome con una sonrisa que me derritió por dentro.

-Ve a la habitación, le pediré el desayuno a un elfo-dije dándole a entender que nadie debía saber que estaba el aquí, sin decir nada se retiró de la sala, y entonces llame a un elfo. Luego de tener el desayuno servido, lo llamé, pero no recibí una contestación

- ¿Sirius? -dije mientras iba hacia mi habitación y lo veía sentado en mi cama con la mirada perdida- ¿te encuentras bien?

-Ya me delataste ¿no? -dijo mirándome dolido

-Claro que no lo hice-le dije acercándome a el

-Si lo hiciste, todos lo harían en tu lugar-dijo mirándome todavía de igual manera como si no confiara en mi

-Lamento decepcionarte al ser tan amable-dije dejándolo solo, pero no lo pensé ni un momento, entonces me fui. Lo deje solo. No podía creer que él no confiara en mi después de todo. En parte me daba lo mismo, pero por otro lado me dolía, demasiado.

Esta semana no tendría clases por el momento hasta que me mejorara del ataque. Pero de igual manera no me quería quedar sin hacer nada, entonces me decidí a hacer algo que no hacía hace bastante tiempo, correr.

Si era cierto lo que la ciencia decía sobre el deporte, que este libera endorfinas y eso produce la felicidad, lo haría para poder conseguir un poco de felicidad, la cual me faltaba hace tiempo. Me detuve en un pasillo desierto para poder cambiarme el piyama, con magia,por ropa más cómoda para el deporte, y no espere a salir de Hogwarts, y empecé a correr ante la atenta mirada de algunos de los alumnos que me cruzaba, estos me miraban raro u otros con una sonrisa, pero no me detuve en ningún momento hasta que estuve por el sauce boxeador, recordé mi ventana daba al mismo, mire para allí y me quede hipnotizada por la mirada de Sirius. Pero algo desvió mi atención alguien se me acercaba por atrás, entonces sin dudarlo ataque con fuerza física a quien sea para tumbarlo en el piso en donde veo a Harry quien me mira sorprendido.

-La próxima vez que te ataquen has eso-dijo mientras lo ayudaba a levantarse y él se sacudía para sacarse todo el pasto de encima.

-Tomare tu consejo-dije mirándolo con una sonrisa para luego abrazarlo, cualquier sentimiento de furia se disipo con aquel abrazo.

- ¿Te sucedió algo?-dijo una vez que nos separamos

-Nada que importe en este momento-dije viendo hacia mi ventana, pero Sirius ya no estaba, haciéndome bajar la mirada

-Luego me cuentas tengo que ir a clase-dijo abrazándome nuevamente para luego irse corriendo nuevamente adentro de Hogwarts.

Seguí corriendo por un rato más, entonces decidí volver a mi habitación ya más tranquila, y con hambre ya que no había desayunado y ya iba a ser la hora del almuerzo. Llegue a mi habitación, pero esta estaba vacía, sin rastro de Sirius por lo que fui al baño y llene la bañera, merecía relajarme después de todo, pero de igual manera cerré la puerta por si Sirius llegaba a la habitación.

Me sumergí en la bañera, el agua esta tan hermosa que daban ganas de dormirse nuevamente. Pero me puse a pensar en porque me afectaba tanto lo que Sirius pensaba de mí. Aunque no lo admitiera Black era mi personaje favorito de la saga, y también estaba enamorada de él, pero esos sentimientos no son correspondidos, el jamás se fijaría en alguien como yo.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por los ruidos de alguien afuera, y de pronto sentí como algo caía

-Mierda-dijo la voz de Sirius al otro lado de la puerta, rodee los ojos y me dedique a volver a relajarme- ¿Caro? -pregunto detrás de la puerta- ¿estas allí? -pregunto- sé que estás ahí. Hablemos-dijo en modo de suplica

-Déjame tranquila Sirius-conteste sin más, para volver a cerrar mis parpados

-Pequeña-dijo haciéndome abrir los ojos-tal vez no lo recuerdes, así te llamaba cuando venias aquí, Caro-dijo haciéndome tener un recuerdo.

Flashback

Veía como yo iba caminando por un pasillo completamente sola, pero al doblar una esquina me encuentro a Sirius con otra chica, este la besaba mientras la aprisionaba contra una pared.

-Black-grito la niña y entonces él se separó de la chica y miro a la pequeña

- ¿Qué haces? Sigamos, la princesa puede esperar-dijo la chica mientras tomaba del cuello a Sirius pero este la rechazaba para luego tomar a la niña y en brazos, dejando sola a aquella chica con cara de indignada.

-Suéltame Black-decía la niña tratando de bajarse hasta que el la miro

-Caro ¿Qué sucede? -dijo este mirándola, pero la niña comenzó a llorar

-Me dejaras sola luego para irte con esa chica maleducada-dice llorando la niña mientras ella abraza

-Eso jamás pasara-dijo secándole las lágrimas-pequeña siempre voy a estar contigo-dijo abrazándola

- ¿Me lo prometes por el meñique?-dijo la niña mostrando su pequeño dedo para juntarlo junto al de Sirius

-Por siempre, nada nos va a separar-dijo para luego irse con la niña en brazos

Caroline DumbledoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora