Londres, Jueves 30 de julio del 2015, 9:22 am.
Despierto por el sonido de la alarma, que me indica que debo empezar mi día. Me levanto de la cama y decido bajar a desayunar. Había tenido un sueño de lo más extraño en el que mi madre me decía que era una Dumbledore y que soy una bruja. Me rio de la imaginación que tengo, aun estando por así decir inconsciente.
Voy bajando por las escaleras cuando siento un ruido en la cocina, esa debería ser mama haciendo el desayuno, pero cuando llego abajo me quedo estática viendo como el desayuno, se está haciendo solo.
Entonces recuerdo que todo eso estaba sucediendo y que soy una bruja. Sonrió para luego entrar en la cocina, aun viendo maravillada como todo se movía por sí solo. Escucho como se abre la puerta de entrada y por allí entra mi madre, con el diario el profeta en mano.
-Buenos días, pequeña-dice mi madre para acariciar mi cabello y luego sentarse al frente mío.
-Buenos días, mama-digo aun observando la magia y como todo se sirve por si solo.
- ¿Sin creerlo aún?-pregunta, me limito a asentir mientras desayuno.
-Pensaba que había sido un sueño, pero al ver todo esto, supe que era real- le cuento mientras ella deja a un lado el periódico
-Te acostumbraras créeme-dice quitándole importancia
-Si lose- acepto mientras tomo el profeta de la mesa y lo observo con adoración.
- ¿Es como lo imaginabas? -pregunta viéndome con una sonrisa en la cara
-Nada se compara con la realidad mama-conteste dejándolo en la mesa, para seguir con mi desayuno.
-Pensaba que harías más preguntas-dijo mi madre levantándose, para dejar su plato ya vacío para lavar.
-En realidad tengo 2 dudas más-dije haciendo que esta se detuviera un momento, me mira para que siga hablando- Puedo cambiar hechos ¿no? - esta asintió- ¿Por qué Lillian sabia de esto antes que yo? -pregunto con curiosidad, esta suspira para luego sentarse al frente mío
-Yo no puedo decírtelo, eso te lo debe contar ella misma-dijo para luego salir, dejándome sola.
Lillian no podía ser una bruja ¿o sí? Una vez que termine de desayunar y que deje mi plato vacío para lavar decidí ir para la casa de al lado. La casa de Lillian. Ella me lo explicaría. Estaba segura.
Toco varias veces el timbre y la puerta, pero nadie contesta. Trato de llamarla, pero me contesta su casilla de mensajes. No conocía a sus padres, ni de vista, por lo que tampoco tengo sus números. Talvez habían salido.
Al ver que nadie me abriría la puerta decido volver a mi casa para empezar a empacar, ya que alguien vendría a buscarme a la noche. Pero no me iría sin antes hablar con Lily.
Abro la puerta encontrándome con mi madre sentada en la sala mirando algo en la tele, esta al escuchar la puerta voltea a verme
- ¿Pudiste hablar con Lily?-pregunta apagando lo que estuviera viendo
-No, parecía no haber nadie en la casa-contesto-por casualidad ¿tú conoces a sus padres?-pregunto
-No jamás los eh visto-contesta dudosa
-Ni yo-contesto con curiosidad- es extraño, ella jamás decía palabra sobre ellos, pero no podía vivir sola ¿no? -pregunto- ella apenas tiene 13 años no es posible-afirmo con preocupación
-No lose cariño, mejor ve a empacar lo necesario. No falta mucho hasta que aparezcan a venir a buscarte-asiento en respuesta y decido encaminarme hacia mi habitación para comenzar a ordenar mis cosas.
Aun no podía creer que esto me estaba pasando a mí. A cualquiera le encantaría cambiar los hechos de la historia, y aunque la oportunidad me la hubieran dado a mí, todavía no me sentía del todo segura de lo que me había hablado mi madre.
No podría aceptar nunca lo que dice aquella profecía. Pero de alguna forma u otra estaba feliz de poder ir a aquel mundo y sobre todo a Hogwarts.
Cuando empecé a leer Harry Potter (que fue cuando cumplí 13 años) recuerdo haberme identificado con Hermione desde ese momento soñaba con ser su amiga hasta ahora (aunque tuviera 16 años). Pensaba en como seria estudiar juntas, claramente, regañaríamos a Ron y Harry cuando hicieran alguna locura, tendríamos muchas aventuras y conocería a los demás fantásticos personajes (como a Sirius quien es uno de mis personajes preferidos). Y yo que pensaba que era ingenua y que eso pasaba solamente en las novelas de wattpad.
Una vez que termino de empacar todo lo necesario, me encamino hacia abajo para salir y poder comprobar si hay alguien en la casa de Lily
Golpeo y toco timbre, pero parece que nadie está en casa, pero decido arriesgarme y compruebo si la puerta está abierta y cosa que me parece demasiado extraña, lo estaba.
No lo pienso demasiado y entro, pero está vacía. Lo cual es bastante raro. Decido ir a la planta alta, en donde supongo, estaría la habitación de Lily pero todo parecía haber desaparecido de igual manera que Lily, todo había desaparecido como por arte de magia.
ESTÁS LEYENDO
Caroline Dumbledore
FanfictionQue pasaria si un dia te levantaras y tu dia girara en torno a lechuzas, cartas y magia. Esto parecia imposible para Caroline una adolescente de 16 años y gran fan de Harry Potter, hasta que su madre le cuenta su verdadera identidad, origen y desti...