Mierda, estar cerca de ella me pone nervioso. Lentamente me siento enfrente y sonrío
-con que la jefa- su sonrisa es mas grande y arrogante
-sabia quien eras, no podía darme el lujo de que me descubrieras. Tratarías de sacarme información ¿O me equivoco?- solo puedo mirarla y asentir. Es obvio. Es lo que intentaría- tiene treinta minutos para lo que quiera preguntar, así que adelante- torpemente saco la libreta. Nervioso miro las preguntas y luego la miro a ella
-¿señorita?- asiente así que continuo- a tan joven edad, convirtiéndose en la empresaria más exitosa y famosa ¿No le hace falta su adolescencia?
-no. Sinceramente nunca extrañe aquellos momentos que "quedan" grabados en tu mente- es precisa, y sincera.
-¿A qué podría atribuirle su éxito?- ella me mira divertida
-tan parecido a cincuenta sombras de Grey- un carcajada resuena en toda la habitación- muy bien, si esa es su pregunta la contestaré. Mi éxito es ser inteligente. Se debe aprovechar cada situación, conocer tu enemigo, su juego y tus opciones. Analiza y piensa ¿Que tienes a tu favor?- se levanta y se dirige lentamente hacia mi. Se ubica detrás mío, mientras sus largas uñas arañan mi cuello y su aliento golpea en mi oído- esta es una oportunidad que se puede aprovechar- se aleja de nuevo, mirando hacia el gran ventanal. Trato de normalizar mi respiración y la pequeña excitación que se forma en mi- ¿Eso es todo?
-que significa el término "mujeriega"- su cara se endurece, al igual que ella. Me mira y se acera de nuevo a mi
-un estilo de vida- susurra contra mis labios. Se aleja de nuevo y no creo que puede resistir mucho tiempo a este juego macabro. En donde mi pantalón sufre las consecuencia- te lo explicaré brevemente. Los hombres son tontos, y no es un sorpresa este comentario por parte mía. Unas bonitas piernas, gran trasero o un bonito físico, y ya están adentro. Si los hombres pueden jugar con nosotras, porque nosotras no con ellos
-pero ¿porque mujeriega?
-es mucho mejor que perra, zorra, cualquier. Tiene más decencia ¿no lo crees?- me sonríe mientras se sienta de nuevo en su escritorio
-tal vez...otro pregunta ¿Has pensado en el matrimonio?
-no me interesan las ligaduras burdas y torpes, que lo único que hacen es arruinarte la diversión
Seguimos hablando sobre muchas cosas completando mi entrevista. Unos golpes en la puerta me alerta al igual que a ella
-pase- lo dice sin quitar la mirada de mi
-señora, tiene una reunión esperándola
-estoy en siete minutos- Raisa me mira para marcharse con una amplia sonrisa
-tienes cinco minutos exactamente para una última pregunta- la miro expectante y dudoso
-¿te volveré a ver?- sonríe mientras se levanta y corre mi asiento para sentarse en mis piernas. Sus manos juegan con los botones de mi camisa, mientras sus labios juegan con mi cuello. El reloj de la pared, junto a mi respiración acelerada es lo único que se escucha en la sala
-ahora yo pregunto. Que gano yo a cambio- muerde mi cuello, sacandome un gemido ronco. Sus caderas se mueven al compás del reloj
-¿Que quieres?- me sonríe mientras acerca su boca a la mía
-un noche, para que seas mío- besa mis mejillas, nariz y barbilla. Llega hasta los labios y respira frente a ellos- sin compromiso
-si- solamente, un leve roce antes de que un ruido la aleje de mi
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Mujeriega
RomanceDiversión. Es el único concepto que Bella conoce muy bien. De hombre en hombre, de cama en cama, es el mayor juego que le gusta jugar Tan traicionera como una serpiente, tan hermosa como una rosa "Perra" "zorra" "prostituta" "fácil" "cualquiera" y...