CAPITULO II. Bernasconi, le dará un recorrido por el colegio a Kopelioff.
¡Oh! ¡¿Es que pensabas que lo haría?!
Todos se callaron al instante en que una rubia de ojos azules miró con aires de superioridad a todo el mundo hasta detener la mirada en Ash, quien rodó los ojos, para luego pasar a mí y escanearme de pies a cabeza.
–Niña nueva ¡Que divertido! –habló sarcástica.
–Con ella no te metas Valentina –me defendió Ashley. La chica que aparentemente se llamaba Valentina rodó los ojos.
– ¿Y tú quién eres, Pokemón? –atacó Valentina y la chica detrás de ella rio junto al resto de las personas que estaban ahí.
–Alguien que no necesita ofender a los demás para sentirse bien consigo misma, a diferencia de ti –dijo Ash, y todos –todos–gritaron cosas como: '¡Oh, eso dolió!'. Amo a Ashley, quiero decir, yo en su lugar ni siquiera miraría fijamente a Valentina. Intimida, de verdad lo hace.
–Agh, como sea –rodó los ojos.
– ¿Cómo te llamas, niña? –hablo refiriéndose a mí una chica de cabello marrón y ojos verdes.
Oh no.
¿Por qué justo aquí?
Quiero decir todo el instituto –o gran parte –estaba ahí afuera observando todo.
–Carolina –hablé sin mirarle a los ojos.
– ¡Oh, Cece! –exclamó Valentina y yo me abstuve de rodar los ojos.
Cece no, por favor.
–Dijo Carolina, no Cece –habló por primera vez Kat y yo alcé la vista, encontrándome con dos chicos –muy bellos –al lado de Valentina.
–Vamos –interrumpió algo irritado, un chico de ojos color miel y cabello castaño con un acento ¿Ítalo-argentino, tal vez?, la guerra de miradas de Kat y Valentina.
–Oh claro, Rugge –sentenció Valentina, aún con la mirada en Kat, luego le dio una mirada rápida a todos y desapareció de nuestra vista entrando al instituto.
–Eso fue... –hablé sin terminar mi frase, ya que no encontraba una palabra adecuada. O sea, que mierda pasó, por lo que comprendí, esa chica Valentina, sí que tiene mal temperamento, oh, y sobre todo, el ego por las nubes.
–Pasa diario, debes acostumbrarte, Caro –me dijo Ash.
–Será difícil –acoté.
–Sí que lo será –se encogió de hombros.
–Whatever –habló Kat restándole importancia –Debes buscar tu horarios, ¿no es así?, honey –me preguntó a mí.
¡Claro! Con ese mini show se me olvidó por completo, así que me dirigí a la oficina del director alegando que las alcanzaría en cuanto saliera.
–Buenos días –hable en un tono bajo adentrándome en la gran oficina. Esto podría ser un salón de clase, si así lo desearan.
–Oh, tú debes ser... Carolina Kopelioff –hablo un señor de unos 50 años tal vez, mirando una hoja, a lo que yo solo asentí agachando la cabeza.
Me explico un par de cosas de las clases, me entrego mi horario –súper agitado, por cierto –la llave de mi casillero, y por último dijo que mandaría a alguien para que me diera un recorrido por el colegio. Yo solo le di las gracias y busque en el horario que me dio la clase que me tocaba. Biología 2P-A2.
Ahora, ¿Dónde quedaba ese salón? Supuse que en el segundo piso, así que subí tan rápido como pude intentando no perderme en ese gigante –en verdad gigante –instituto, aunque igual me perdí, por lo que llegue más tarde de lo previsto a la clase.
–Buenos días –murmuré entrando al salón – ¿Puedo pasar?
–Ya estas dentro –dijo un señor en tono obvio, que supuse, era el profesor –Siéntate al lado de Bernasconi –me señaló el profesor un lugar, al lado del chico que...oh, era uno de los que se había bajado de la camioneta junto a Valentina, si mal no recuerdo.
Solo espero que no sea tan odioso como Valentina.
Me senté a su lado y el chico ni se inmutó, en verdad que ni siquiera notó mi presencia. ¡Qué modales!
La clase transcurrió normal, excluyendo la parte en la que el profesor me hizo presentarme ante todos –que pena –no dirigí alguna palabra con... ¿Bernasconi? Ni sabía muy bien su nombre, hasta que el teléfono del aula sonó, y el profesor Snow atendió.
–Bernasconi –habló capturando la atención de todos y él levanto la mirada –Le dará un recorrido por el colegio a Kopelioff –ordenó el profesor, a lo que el chico rodó los ojos y bufó. Agh, que amable que era.
Toda la clase quedo algo... ¿Sorprendida? No lo sé, pero todos se callaron y al segundo empezaron a murmurar cosas sobre Bernasconi y sobre mí.
–Esperemos que a esta no la trate tan mal –escuché decir a una pelirroja con acento español que estaba a dos puesto de mí. Wow, pero que disimulada.
–Si quieres no lo hagas –dije en un tono bajo para que el profesor no oyera, y el soltó una risa sarcástica.
– ¡Oh! ¡¿Es que pensabas que lo haría?! –exclamó riendo, yo solo bajé la mirada, y por mi propia dignidad, decidí no seguir hablando, hasta que sonó el timbre y salí.
Tenía una hora libre así que le diría a Ashley o Kat que me dieran un recorrido por esta cárcel gigante. Aun me pregunto, ¿Cómo es que no se pierden en un instituto tan grande? Quiero decir, mi antiguo colegio también era gigante, pero, vaya que este era el doble o quizás el triple.
– ¿Sabes dónde está Ashley? –le pregunte tímidamente a Kat, quien se negó con la cabeza y se apresuró a decir.
–Nop, yo también la buscaba, pero vamos, quiero darte un recorrido, en verdad, no sé cómo no te has perdido.
Le di una sonrisa de boca cerrada –Oh, créeme que ya lo hice –río. Comenzaba a caerme muy bien Kat.
–No lo dudo. ¡Oh casi me olvido! ¡TE SENTANTE CON AGUSTIN BERNASCONI! ¿Sabes lo que es eso? –gritó escandalizada, y yo miré para ver si había gente cerca, y, efectivamente, captó la atención de un grupo de personas que estaban ahí.
– ¡Baja la voz, Kat! –exclamé avergonzada.
– ¡Oh, lo siento! –se disculpó.
– ¿Agustín? –Con que así se llamaba el arrogante chico –Hablas de... ¿El descortés y arrogante chico de cabello claro?
– ¡Si, de ese mismo! –rodé los ojos.
¡Cómo podía interesarse en él! Es decir, es un odioso de primera clase, y a pesar de haber intercambiado pocas palabras, así pienso de él.
– ¿Qué le ves? –Pregunté extrañada –Quiero decir, no es feo ni nada, pero es...
Me interrumpió –No lo sé, solo es el más popular de los chicos. Y bueno, supongo que su aire de "bad-boy" intriga a cualquiera. –se encogió de hombros desinteresada.
–Típico cliché, solo es un chico que le gusta llamar la atención, ¿Acaso no lo notas? Así son todos los "bad-boys" –enfaticé haciendo comillas con los dedos.
–Bueno, Caro, whatever, ¡El caso es que te sentaste con él, honey! –le di una mirada cansada.
–Ni siquiera creo que haya notado mi presencia y me dijo algo como ¿De verdad crees que te daré el recorrido? –Ella negó con la cabeza.
– ¡Oh! Ahora entiendo porque lo de descortés –rio negando –Well, a lo que vamos, el recorrido –asentí con la cabeza.
X
GLOSARIO:
Well: Bueno/Entonces.
Honey: Miel, pero en este caso cariño.
Whatever: Como sea.
ESTÁS LEYENDO
INVISIBLE A SUS OJOS {AGUSLINA}.
Hayran KurguCarolina Kopelioff, llega inesperadamente a Los Ángeles siendo una chica tímida a la cual constantemente molestan, todo cambia cuando ella empieza a tener ciertos sentimientos hacia Agustín, pero por el lado de éste nada pasa, para él ella es una ch...