Guardo las cuerdas que compro, y recordó que al ser domingo era probable que Ji Sub se encontrara en la casa y fue a buscarlo, se asomó a la biblioteca y al gran salón... no estaba, se asomó a la cocina, y por último se dirigió al despacho y ahí lo encontró concentrado en su laptop, maravillada Anabeth lo vio tan interesante y hermoso, nunca había visto un hombre que le llamara tanto la atención, hasta ese día. Toco a la puerta despacio.
-pase – levantando la mirada serio, de repente apareció una sonrisa, dos hoyuelos y los ojos se le hicieron dos rayitas.
-¡Anabeth, que sorpresa!
- ¿estás trabajando? -le pregunto mientras se sentaba en una de las sillas.
-sí, aún tengo que revisar algunos correos y escribir otros tantos, cosas aburridas... ¿Qué tal tu domingo?
-bien, he salido a comprar unas cuerdas a la ciudad.
- ¿fuiste sola? – no... Hyun Joong tenía que ir a la ciudad y me llevo.
-ah que bien... ¿Hyun Joong se está portado bien?
-si, a veces ya no es tan molesto -y los dos se rieron, el desvió su mirada de nuevo a la laptop; se dio cuenta que no podía quedarse mucho conversando.
-bueno... ya no te sigo molestando.
-que descanses, niña
-ya no soy una niña Ji Sub -le aclaro inmediatamente
-para mi, tú y Samanta siempre van a ser mis niñas -lo más triste que podría escuchar de los labios de Ji Sub lo acababa de escuchar, no supo cómo responder a esto y salió de ahí con una media sonrisa aguantando las lágrimas, estaba por entrar a su cuarto cuando se encontró con Samanta.
- ¡ tú!... en todo el día te me perdiste... quería ir al lago y... ¿Beth te pasa algo?
-no nada
-estas llorando... ¿Beth que te pasa?
-ya te dije no es nada Sam, estoy cansada, mañana platicamos ¿va? -y se metió a su cuarto cerrando la puerta con llave.
bajó las escaleras rápido y se encontró con Hyun Joong que ya iba a subir.
- ¿tú le hiciste algo a Anabeth?
- ¿yo? No la he visto en la última hora... ¿pasa algo con ella? -le pregunto preocupado
- ¿seguro?
- si... ¿Qué le pasa?
- la encontré llorando y se encerró con llave
- ¿y porque ella estaría llorando?
-no lo sé, tu a veces la molestas... yo tengo que salir un rato... te la encargo, adiós primo.
La acaba de ver y estaba muy bien ¿Qué pudiera haber cambiado en una hora, que le hiciera llorar? tal vez ella necesitaba algo o se sentía mal, decidió ir a tocar a su puerta a la tercera vez de intentarlo recibió una respuesta.
-Estoy bien Sam, mañana hablamos – le grito desde adentro
-Beth soy Hyun ¿en serio estas bien?... me dijo Sam que no te sentías bien.
-¡solo necesito estar sola! -le dijo en medio de un sollozo; Hyun pudo darse cuenta que aun ella seguía llorando.
-Beth, déjame verte hasta entonces me voy a ir, si no me tendrás tocando a tu puerta y no me voy a cansar.
Pudo oír que le quito el seguro, abrió la puerta lentamente y vio que Anabeth se metía en la cama.
- ¿me puedo sentar? -asintió con la cabeza sonándose la nariz, se sentó a un lado de su cama y le toco la frente -en la tarde estabas muy bien y no tienes fiebre, es otra cosa ¿verdad? -no sabía cómo le hacía, pero a veces le parecía adivino.
ESTÁS LEYENDO
Mi Hermosa
FanfictionEl creyó que su amor adolescente era cosa del pasado; hasta que ella regreso a alterar su vida perfecta.