Pasaron los últimos días de vivir en Los Ángeles, había estado nerviosa por las audiciones, tenía un mundo desconocido enfrente, estaba a punto de enfrentarse con sus sueños.
Había dejado atrás el pánico a quedarse en la oscuridad y las horribles pesadillas ya no eran tan frecuentes, aunque igual le daban terror, lo hermoso que estaba dentro de ella, parecía que poco a poco había empezado a borrar todos esos recuerdos dolorosos, pensaba que era un buen comienzo.
Le hizo una llamada a Samanta antes de irse.
-Sam, ya estoy yendo rumbo al aeropuerto, estoy tan nerviosa.
-Beth, te va a ir muy bien, te has preparado mucho
-¿Cómo están todos?
-todo normal, mis papás ya están preparando viaje, me voy a quedar sola... ya que ni Ji Sub vive aquí.
-Samanta, no me gusta oírte decaída...
-Tendré que presionar a Woo Bin, yo no puedo vivir así ya... si se espanta por lo que voy hacer, de una vez que se vaya.
-¿Qué vas hacer?
-¡le voy a pedir matrimonio!
-¿Qué? ¡Samanta!
-si Beth, me ve que vivo prácticamente sola, él vive solo... ¿no se le ocurre que ya podríamos estar casados?... yo no voy a esperar a que a él se le ocurra la gran idea.
-¡ay Samanta!... eres única...
-el atarantado de mi primo... ¿ya dio señales de vida de nuevo?
-desde que se fue a Nueva York no hemos vuelto hablar... ¡pero me manda un mensaje todos los días!
-¿y qué clase de mensaje? –pregunto entusiasmada
-"Te amo"
-¿eso nada más?
-eso nada más, todas las noches... quiero poder confiar al cien por ciento en todos los aspectos... ¡como ya quisiera poder platicarte tantas cosas!...
-¡pues aquí estoy!
-no... aun no
-Beth... ¿Qué te traes? Andas muy misteriosa.
-No te preocupes, pronto lo sabrás... te tengo que colgar ya estoy llegando... Salúdame a todos, diles que los quiero.
-Adiós amiga... mucha suerte, me hablas cuando te instales
-Claro, besos.
El vuelo le pareció muy pesado, ahí la estaba esperando Alex, él era el administrador del edificio de apartamentos y otro edificio que rentaban para oficinas, son los dos negocios que sus tíos le habían heredado en Nueva York.
-Gracias por acompañarme Alex.
-cualquier cosa ... estoy a tus ordenes
-gracias... espero no necesitar nada –volteo de reojo a la puerta de enfrente, que es donde ella quería vivir
-señorita... si quiere podemos cancelar el contrato de la persona que vive ahí, para que usted se instale.
-no, sería muy grosero de mi parte... es difícil encontrar apartamentos en esta área... no.
-ok, como usted diga –aceptó el administrador sonriéndole,
-Alex me gustaría contar con un local disponible, si no es uno de los que me dejaron mis tíos, rentar uno.
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Mi Hermosa
FanfictionEl creyó que su amor adolescente era cosa del pasado; hasta que ella regreso a alterar su vida perfecta.