Imprevisible

Capítulo 8.

Narra Miriam:

Ana se terminó de fumar el cigarro y entramos, ya estaban todos juntos para pedir la pista y jugar.

-¿5 euros por persona? ¿en serio?
-Hombre no, va a ser gratis por tu cara bonita- dijo mireya
-Pues mira...-iba a contestarle a mireya cuando aitana me cortó
-A ver, que yo llevo lo justo
-¿y si jugamos en parejas? Así solo hay que pagar 2,50€ -dijo nerea mirando a aitana

Todos aceptamos, y nos pusimos en parejas.
Inconscientemente me puse al lado de mireya, la costumbre.
Vi que Mireya le estaba dando su parte a Marina, asi que irían juntas. No sé por qué pero me molestó, pero ¿qué esperaba? ¿que se pusiera conmigo?

-Miriam, tú conmigo, que quiero ganar -dijo ricky pasandome el brazo por encima
-Yassss

Narra Mireya:

Adivinad quiénes han ganado.
Efectivamente, yo no.
Miriam y Ricky, daba hasta gusto ver la paliza que le estaban dando a Roi y a Cepeda.
Ambos grupos habíamos terminado ya la partida asi que nos fuimos a la zona del billar, todos menos esos cuatro, que se habian picado un montón y habían pagado una última.

-Me voy a pillar una cervecita, ¿tú quieres algo?
-Otra pa' mi, porfi, luego te la pago

Mientras marina iba a por la cerveza, yo pille la mesa de billar y me puse a colocar las bolas.
Nerea volvía de la barra indignada.
- ¡2,50€ una cocacola! Y encima tiene más hielo que cocacola- Aitana la miraba riéndose
-Por eso mejor pillarse una cerveza, que te timan menos -dijo marina pasandome la mía
-Pero es que no me gusta la cerveza

-Venga, ¿rompes tú o yo? -le dije a marina
-Tú, tú, que yo esto no se ni cogerlo

Marina aqui no mentía, no había conseguido meter ni una, bueno si, la blanca.
Miriam y Ricky vinieron hacia las mesas de billar muy contentos, habían ganado otra vez.
Miriam se fue hacia la barra y Amaia aprovechó para arrastrar a Ricky a jugar al billar también.

Seguimos jugando hasta que el móvil de Marina empezó a sonar.
-Es Bast, voy a salir para hablar con él ¿vale?
Asentí mientras le daba un trago a la cerveza, vi a Marina decirle algo a Miriam y se fue.
Mierda, Miriam estaba viniendo hacia mí.

-¿Tan mal se te da meterla? Lleváis media hora y tenéis casi todas las bolas, amiga
-Meterla se me da bien, ¿o es que no te acuerdas?

Miriam se acercó mucho a mi, la tenía prácticamente pegada y me estaba sonriendo.
Joder, se me ha olvidado hasta como se respira.
Se aparta con esa sonrisa de superioridad, la que le sale cuando te vacila en tu cara, estaba cogiendo el palo que había detrás de mi para jugar, soy gilipollas.

-Estas muy confiada, ¿no? ¿lisas?
-Porque puedo, y si, lisas tú.

Miriam se echa el pelo hacia un lado y se agacha un poco para darle a la bola, no puedo apartar la vista de su escote.
Madre mía, que alguien traiga una fregona y unas bragas nuevas para el estropicio que he liao'.

-Amiga, que estas empanada- dice Raoul
-Que no, que estaba yo pensando en mis cosas
-Hemos venido a ver como te gana Miriam -dice Agoney guiñandole un ojo a miriam
-Pero que dices, si Mireya es una bestia jugando a esto- dijo Raoul
-¿Que te apuestas a que gana miriam? -dice agoney retandole
- Eh eh que yo no quiero tener nada que ver en vuestras apuestas raras -dice miriam antes de que vaya a más
-Eso, ni yo -digo acercandome a miriam para quitarle el palo
-¿Tú no tenías el tuyo?
-Me lo ha quitado Amaia antes -digo encogiendome de hombros y dándole un trago a la cerveza

-Oye, ¿soy el único que cree que entre esas dos hay algo? -dice agoney señalando a los sillones en los que estaban Nerea y Aitana