Eres El Amor De Mi Vida.

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-Dharius, esto es importante, debes escucharme...

-No, no quiero escuchar lo que me quieras decir Rowena..

Aquel día la pareja tuvo su primera discusión, y es que no era nada fácil mantener aquella relación en secreto, pues ella era una bruja de sangre pura y su amado era un mestizo.

Ante la desaprobación a la relación que sabía el padre de Rowena se opondría.

-Entonces debes irte si no vas a escucharme, o mejor dicho, yo soy quien se va.

Dharius intentó detenerla pero la conocía, sabía que no se detendría pues estaba molesta y aunque ella permanecía frío en su forma de hablar no la detendría.

Aún el recordaba el primer día que la conoció, justo en aquel lago donde ella acostumbraba pasear por las tardes y sentarse a leer por largo rato, siempre iba acompañada de una jovencita que la atendía, pero ese día decidió ir sola, se había cansado de actuar como una muggle delante de ellos, si bien su comportamiento dentro y fuera era como la de muggles por los negocios de su padre y las constantes visitas de estos al castillo.

Dharius paseaba a caballo corriendo tras un zorro al que quería darle caza cuando pasó delante Rowena, el zorro corrió por un lado de ella tratando de ocultarse, cuando se levantó de la manta donde reposaba.

-¿Quien se cree usted para perseguir sin sentido este pobre animal?

-Disculpe Mi Lady, pero este animal ha hecho muchos destrozos en la granja de mi familia, por lo que debo cazarlo

-Mire caballero, si es que se le puede llamar caballero a alguien salvaje como usted, los zorros son uno de los símbolos de la inteligencia, no se ha puesto a pensar que este zorro ha acudido hasta su granja ¿Por falta de comida en estos lugares?

Mientras mantenían su plática aquel zorro aprovecho para escapar de ellos.

Ella molesta por ver la forma en que el perseguía uno de los animales que eran símbolo de la inteligencia, se giró y comenzó a levantar sus cosas a lo que Dharius descendió de su caballo y camino hasta ella.

-Lamento mucho haberla incomodado Mi Lady, no fue esa mi intención -Levantó la manta donde Rowena se encontraba sentada y se la ofreció- Solo que ya ha sido bastante tiempo que ese animal ha ocasionado destrozos en la granja, de esa granja Mi Lady, dependen muchas familias.

-Comprendo, pero existen formas, para no dañar los animales -Puso aquellos objetos en la pequeña cesta y comenzó a caminar rumbo a su castillo- La próxima vez... ¿Cómo dijo que se llamaba?

-Weverly, Dharius Weverly -Hizo una reverencia a Rowena y la siguió caminando-

-Sr. Weverly, debe utilizar su ingenio para proteger su granja sin necesidad de herir algún animal.

Dharius sonrió ante aquel recuerdo de como había conocido a su amada, sabía que si estaba molesta era mejor dejarla sola ya encontraría la manera de acercarse a ella de nueva cuenta y ofrecerle una disculpa.

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