I don't know you » Evan Peters

Six days

-¡Tu también me gustas Isabelle!-grité-¡Contéstame!-empecé a forcejar la puerta.No hacía ya que la verdad estaba muy borracho-Yo te quiero Isabelle, me vuelves loco en realidad-seguía empujando la puerta-¡Vamos a escaparnos juntos!-le grité.

Intenté abrirla y toqué muy duro pero no conseguía nada. Busque un pinche en su cuarto y por fin la abrí.

Y vi lo que nunca habría querido ver. Era ella, ya no era ese angel que para ser sincero, me volvía loco.

Estaba allí tirada en un charco de sangre. Pude notar navajas en el piso cerca de su muñeca. Estaba perdiendo demasiada sangre. Mis lagrimas salían y en realidad me dolía que ella haya llegado a tal cosa. La pregunta era ¿Por que diablos? Es claro que tenía que llevarla al hospital. La cogí entre mis brazos y pude notar lo blanca que estaba, estaba muy asustado debo admitirlo. Corrí hacia el coche y la metí a la parte de atrás. Iba de camino al hospital y en realidad no se ni como estaba tan cerca. No veía muy bien ya que la bebida me ponía así, no sabía como controlarme.

De pronto vi todo negro, absolutamente todo.

***

Me levanté poco a poco dejando ver que estaba en un cuarto completamente blanco y empecé tocando mi cabello, mis piernas, estaba completo.

Pero, estaba en un hospital. Toqué uno de los botones que indicaba que habría una enfermera allí. Por ahí entro una enfermera y me sonreía.

-Señor Peters-dijo ella todavía con su sonrisa.

-¿Que a pasado?-dije nervioso.

-Usted a chocado con un auto bus-dijo ella frunciendo el ceño-No lo recuerdas por el impacto.

-¿Como esta Isabelle?-dije preocupado.

¿Como no podía estar preocupado? La chica que me volvía loco estaba casi muriendo la ultima vez que la vi.

-Ella esta en el cuarto de al lado, todavía no despierta-dijo ella mirando el suelo.

-¿Que dices?-dije ya sentando me-¿Cuanto tiempo llevo así?-estaba realmente molesto.

-Unos seis días señor-dijo ella acercándose-Necesita tranquilizarse-Usted se a despertado perfectamente, no se pero es un milagro, en cuanto ella...-dijo mirando el suelo-Ella, perdió mucha sangre y el auto bus la impactó a ella en la cabeza, no se sabe si se quede vegetal por siempre-finalizó mirándome a los ojos.

No pude aguantar las lágrimas, ella no iba a estar, ella se iría para siempre. Después de yo, tirarme al piso por ella y pensar que mi vida tomaría ese giro inesperado.

Llore, y lloraba porque si se quedaba así, iba a irme al demonio. Donde siempre pertenecí.