Why?

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Vi como se quedo mirando cuando Hannah se acerco a besarme. Ella rápidamente empezó a tocar y rascar sus muñecas y a jugar con sus dedos nerviosamente.

La observe una vez más antes de halar a Hannah a hablar de lo que había hecho.

Ella me observo y ya no había más brillo allí, todo se había ido.

Saque a Hannah del cuarto rápidamente y ella se sobresalto y empezó a reír como si no pasara nada.

-¿Olvidas que debemos actuar como si no hubiera llegado hasta ahora?-dije molesto tocando mi rostro.

-¡Por Dios!-exclamo riendo-Ella no sabe nada, podemos actuar como si fuéramos novios-lamió sus labios-Ella no siente nada por ti-me dio un corto beso en los labios y volvió a entrar a el cuarto.

Eso me cayo como un balde de agua fría, bastante fría por cierto. Esa era la verdad, tenía que ser el Evan de antes, por más difícil que fuera. Me estaba tornando tan sensible frente a ella, y ella lo había notado. Inclusive pensó que yo era un angel.

¿Un angel yo? ¿Sabrá ella todas las cosas que le he hecho pasar?

-¿Evan estas ahí?-el viejo me saco de mis pensamientos.

-¿Sucede algo?-dije tratando de sonar como si me importara, en lo absoluto.

-Necesito que le pidas a Hannah y Jacob que Se marchen-dijo el viejo, dándome la mejor noticia.

Era horrible ver a tu... lo que sea que sea Isabelle para mi, besando a un chico de nuevo, y que sea uno diferente es peor. Aunque este chico se veía más simpático que Maxxi no me daba buena espina.

Maxxi vino hoy a visitar a Isabelle pidiendo que le dieran un espacio en su vida, el viejo anda pensando que hará con el.

Por mi, que se vaya al diablo. La primera persona que hablo con Isabelle segundos antes de cortarse, fue el. Posiblemente EL tiene la culpa.

Entre silenciosamente al cierto, preparado emocional mente para tratar a Isabelle como lo que es.

-Hannah, Jacob, Isabelle debe descansar-dije serio y frío-Mañana la vienen a ver más temprano-dije sonriendo un poco de lado.

Estos asintieron y empezaron a despedirse de Isabelle. Que trataba de despedirse con una sonrisa fingida, se que lo es ya que conozco su sonrisa real.

Su sonrisa real se mezcla con una mueca. Sus ojos se achican y casi se pueden notar sus hoyos en los cachetes.

-¿Evan?-dijo Isabelle mirando mis ojos.

-¿Que quieres?-trague saliva, eso salió de mi boca sin pensar, me raspo la garganta saber que le dolería que le hablara así.

-¿Desde hace cuanto sales con Hannah?-dijo Isabelle jugando con sus dedos.

-¿Un par de meses?-dije preguntándome a mi mismo-No lo se-suspire.

Ella asintió y de momento vi como sus ojos volvieron a confundirse.

-Necesito bañarme-dijo levantándose rápidamente.

¿Que? ¿Por que? ¿Debo ayudarla? Mi er da...

-Emm-tartamudee-¿Necesitas ayuda?-dije sonando un tanto coqueto.

La verdad me moría por verla en ropa interior una vez más.

-La verdad si la necesito-dijo sonando tímida.

¿De verdad necesita mi ayuda? ¡No quiero! Me moriría viéndola así sin poder hacer nada. Me darían ganas de violarla sin importar lo enferma o dolida que este.

-Claro-me levanté rápidamente moviendo todos los cables que tenía encima de ella.

Ella me dedico una sonrisa tímida. ¡Deja de ser tan tierna Isabelle!

Llegamos al baño y no encontraba donde prender la luz, esto sería incomodo. No veía nada en lo absoluto. Sentía la respiración de Isabelle muy cerca de mi. Casi en mi cuello y en mi torso. Trate de mover mi cuerpo pero lo que hice fue peor, sentí como sus manos se aferraron a mi cintura agarrando me fuertemente hacia ella.

-Mierda, lo siento-dijo ella casi gritando-No veo nada-río en lo bajo.

Encontré el botón y lo apreté al segundo y me encontré con una Isabelle sonrojada.

¿Podía ser más hermosa?

-Como sea-trate de sonar frío-No te sonrojes-dije sonando aburrido-Es de niñas-reí en lo bajo por lo estúpido y irónico que era eso, a ella le quedaba perfecto lo de niña.

-Lo siento-vi como su mirada bajo al piso y la verdad, quería cogerla por la barbilla y besarla, tener sexo en este mismo baño, me importaba un diablo.

Ella empezó a tratar de mover los cables, cosa que no funciono.

La ayude y empecé a quitar la bata que le ponen a todos los pacientes.

Me encontré con un sostén negro, y sus senos exactamente donde deben estar. Observe cada centímetro de su pequeño cuerpo, sus estomago estaba igual lleno de esos lunares que solo tiene ella. Baje hasta ver sus panties y me di cuenta que era un hotpant rosa y con unicornios en ellos. ¡Estaba excitado! Pude sentir mi miembro ponerse duro a causa de todos estos pensamientos.

Me di cuenta que llevaba tiempo observando cada parte de ella. Y llegue a sus ojos, que me miraban con intriga y igual de deseosos que yo. Pero a la vez, había miedo y confusión.

-¿Lo otro lo puedes hacer tu?-dije frío-Ya me aburrí-trague saliva y vi como ella volvía a ponerse roja por mis palabras.

-Gracias Evan-se viro de espaldas y me di cuenta de lo bonito que era su trasero. Ya que no me estaba viendo me deje ir, volví con mis ojos de perrito abandonado, sentía como se volvían a cristalizar.

Al segundo salí del baño y me tiré en su cama. Y me espeté a una de las almohadas y grité en ellas

¡Te odio Isabelle! ¡Te odio!

Lloré y llore todo lo que pude antes de que ella saliera del baño. Tenía que volver a ser el Evan que era, el que le importara una mierda los sentimientos.

Sentí como la puerta del baño se abría y pude observar la niña que me vuelve loco. Con una bata que parece de vieja, pero igual seguía siendo ella. El pensarlo me hizo sonreír, se veía angelical.

Se acerco poco a poco a mi y se acostó en la cama a mi lado.

-¿Por que lloras?-dijo ella mirando mis ojos profundamente.

-¿Que te importa?-le dije parándome de la cama rápidamente.

-¿Por que estas aquí si no te gusta el trabajo?-dijo suave y quito su mirada de mi.

-Mira niña, si no te gusta mi actitud tendrás que soportarlo porque si no tendrás problema-me acerca y tire de ella quedando a solo centímetros-Así que tienes que aguantarme y no quejarte de mi-dije sonando duro y puedo jurar que le di miedo ya que sus ojos se cristalizaron una vez más.

Solté de ella y me senté en la silla a su lado.

Me daba tanta tristeza hacerla sentir así, pero todo era por nuestro bien.

Cerré mis ojos para no dejar caer mis lágrimas que estaban a punto de salir.

Poco a poco me quede dormido...

***

I don't know you » Evan PetersDonde viven las historias. Descúbrelo ahora