Hola chicas :))))))
¡Me dejaron muchos comentarios en el capitulo pasado! *se muere*
Son unas tiernas :cccc
Voten y comenten asi mucho como la anterior me matan y las amo mas ok :ccc
Gracias por todo la verdad estamos en 14k leías (eso es demasiado para mi)
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Los segundos se tornaron lentos, yo solo miraba, asustada. Aunque por la sonrisa de Evan pensaba que "todo estaría bien". Lo cual no me tranquilizaba para nada. Mi padre no era persona de molestarse, pero estoy segura que si me ve besándome con mi chofer y guarda espaldas le herviría la sangre, sin olvidar que Evan tiene 24 años y yo diecisiete. Tampoco podemos olvidar que es el maldito novio de mi mejor amiga más yo tengo un novio, el cual no quiero ni un poco.
-Bájate Isabelle-dijo mi padre gritando y yo solo asentí y baje del auto acomodando mi falda e camisa.
-Me explicaras ahora mismo que acaba de suceder-mi padre me estaba sujetando del brazo muy fuerte, tanto como cuando Evan lo hacía.
Mire a Evan de reojo y su ceño estaba fruncido, ya no había sonrisa alguna allí. Sentí como mis ojos se aguaban, no era por que mi padre me estaba agarrando tan fuerte para dejarme marcada, era porque Evan ya no estaría conmigo.
Y sí, lo extrañaría. Ver su pelo alborotado y sus ojos oscuros. Desearía poder solo dar estos días atrás. ¿Pero por que?
Yo no lo conozco.
Solo es Evan y me acaba de conocer igual que yo a el. No hay nada entre medio, solo un beso. Un beso estupendo.
Mis lagrimas salieron y opté por observar los ojos de Evan, estaban oscuros muy oscuros y dilatados, habían ojeras y puedo decir que se le ven bien. ¿Como alguien puede ser tan adorable y malo al mismo tiempo?
-Isabelle estoy esperando-dijo mi padre apretando más.
-Yo fui la que besé a Evan-deje de mirar a Evan, no quería ver su sonrisa al saber que me tiré a matar yo en vez de decir la verdad-Como quiera quería que los despidieras, no me gusta, busca otro-levanté la mirada a mi padre y el solo asintió mientras miraba a Evan.
-Evan siento que Isabelle te haya besado de esa manera-se acercó a Evan que ya estaba bajado del carro.
-No-No se preocupe señor-tartamudeó mientras me miraba a mi, su mirada como siempre oscura pero esta vez volví a ver el brillo del primer día que lo vi en el hospital, pensaba que era mi angel y termino siento todo un patán adorable.
-Isabelle sube a tu habitación y sabes que para querer que una persona se vaya no tienes que besarla-mi padre suspiró-Pide disculpas a Evan ahora-ya mi padre me había soltado y yo solo jugué con mis dedos mientras pensaba en lo último que le diría a Evan, lo último.
-Lo lamento mucho, no volverá a pasar-me acerqué y le tendí mi mano, esperando que el me la sostuviera, agitara y así se fuera.
Tomo mi mano y solo asintió agitando nuestras manos.
Como hubiera deseado simplemente apretarlo a mi una vez más. Hubiera deseado volver a aquel día en el hospital cuando beso mis heridas, cuando sostuvo mi mano con la de el mientras dormíamos.
Caminé y corrí de allí, dejando a Evan y mi padre atrás. Subí las escaleras corriendo, como una nena pequeña feliz, aunque en mi caso yo estaba dolida, rota y sintiendo cosas estúpidas por una persona que no conozco. Por una persona que me ha hecho de todo en solo días... un idiota, eso es.
Llegue a mi cuarto y tiré la puerta tras de mi, viendo lo desordenado que estaba, todo tirado, lamparas, fotos, peluches, ropa, incluso veía sangre en mi piso.
Hubiera deseado no ver nada de esto, no quería saber nada, quería irme lejos de aquí.
Me tiré en la esquina de mi cuarto y abracé mis piernas, sintiendo como mis lagrimas salían ahora miedo alguno, sentía vacío en mi pecho, estaba vacía. Y en estos momentos solo extrañaba a alguien.
Mi madre.
¿Por qué se suicido? ¿Por que no pensó en mi primero?
Empecé a sollozar aún más y a mirar todo mi cuarto, todo estaba desordenado y habían fotos por doquier.
Observé una que no había visto jamás, aunque, recordando que olvidé todo un año.
Era Maxxi.
¿Por que salía con Maxxi?
Maxxi salía agarrando me por la cintura y yo dando un beso en su mejilla.
¿Quién es Maxxi?
El chico más popular de la escuela, el que se acuesta con todas, mi sueño, siempre lo fue.
Aunque por lo que veo nadie me contó que llegue a tomarme tal foto con el.
Escuché como la puerta de mi habitación se abría y cerraba rápidamente y alcé mi vista.
Me encontré con Evan allí mirándome. Sus ojos estaban cristalizados y oscuros como siempre.
Me levante rápido y me acerqué a el tomándolo por el cuello para acercarlo más a mi y apretarlo a mi en un abrazo.
¿Por que Evan era así?
No sé porque lo abrazaba pero en cuanto lo hice, Evan empezó a llorar en mi cabello, mojando lo por completo, pero no me molestaba en lo absoluto.
Pero de más esta decir...
El ha sufrido al igual que yo.
Después de unos minutos yo agarrándolo a el, como solía el agarrarme a mi esa noche en el hospital el solo se despego y se acerco a mi oreja, erizando mi piel por completo por su respiración chocando allí.
-Yo no me quiero ir-dijo finalmente.
Evan no quería dejarme. Detrás de aquella piedra había definitivamente un angel, y que angel más bipolar era aquel en serio.
Yo no quería que se fuera.
-Quédate-le dije observando su ojos, todavía oscuros y rojos de tanto llorar, me dolía verlo así, tanto como aquella vez que lo vi por primera vez, el siempre sería mi angel.
Evan en un suave movimiento se acerco a mis labios, casi tocándose por completo. Sabía que lo estaba pensando, al igual que yo. Los dos sabíamos lo mal que estaba esto.
No podíamos estar juntos.
Eso no nos importó, el ya estaba besándome.
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I don't know you » Evan Peters
Ficção Adolescente-Bésame, ahora-dije casi gritándole. No tenía razón de tal cosa. Deseaba con ansias que lo hiciera sin pedir explicaciones. -Y-Yo-No te conozco-dijo tartamuda y en su voz note que sentía miedo de mi. Y eso me encantaba. -Es una orden niña, no cu...