ʟᴇᴀᴠᴇ ᴀ sᴄᴀʀ [ғʀᴇʀᴀʀᴅ] terminada*

Capítulo 11

Como era de esperar, el teléfono comienza a sonar solo unos minutos después de que sonó la segunda campana para la segunda hora y fue para mí, tal como lo supuse. Sé por qué y no soy culpable en absoluto. No tengo miedo, el director aquí es estricto, pero lo intenta demasiado y es muy gracioso para mí. Me han llamado para maldecir a alguien antes y él me ha dado una conferencia sobre cómo maldecir lo cual es simplemente gracioso para mí.

Mientras camino hacia la oficina, la secretaria, la Sra. Layton, me dice que el Sr. Roth ya me está esperando. Le sonrío y me dirijo a la oficina del Sr. Roth, sonriendo ya por la conferencia que me dará.

"Encantado de volver a verte, Sr. Iero", me saluda desde detrás de su escritorio. "Veo que no puedes mantener esa boca cerrada otra vez". Suspira y me mira y me dice que me siente y se calle, pero no escucho la parte de "cállate".

"Por mucho que me gustaría alejarme de nuevo, tengo una razón perfectamente lógica, no es broma", le digo antes de intentar explicar.

"Nunca hay una razón lógica para maldecir a alguien, Frank", dice con un suspiro.

"Profe, no, no entiende. Jamia sigue meneando la nariz en mi vida. Siempre  cuenta cómo cree que la extraño y cómo cree que estoy tan obsesionada con ella, de una vez necesitaba darse cuenta de que tiene que cerrar la boca por una vez, así que fui yo quien se lo contó ".

"Bueno, amigo", responde, poniendo énfasis en "amigo", "por más que me molesta recibir quejas de estudiantes y profesores sobre ella, no había ninguna razón para maldecirla. Muy bien podrías haber herido sus sentimientos".

"¿Lastimar sus sentimientos? ¿Eso es lo que te preocupa? ¿Qué clase de mierda es esa? De acuerdo, ¿Cómo te gustaría si uno de tus exes nunca te deja en paz? ¿Siempre te rodea, metiendo la nariz en tu vida? Poniéndote de los nervios, ¡nunca termina!''. Dios, este tipo me pone de los nervios tan mal. Eso es todo lo que le importa cuando me envían aquí por maldecir; si lastimo sus sentimientos ¿A quién le importa si hiero sus sentimientos?

"No use ese lenguaje o tono de voz conmigo, Iero", dice, con un tono estricto en su voz.

"Lo siento, señor, pero en serio", le respondí, sonando un poco quejico, pero no me importa nada.

"De acuerdo, Frank, olvídate de eso. Por ahora. Realmente solo quiero encontrar algo que te ayude con tu maldición. Se me está saliendo un poco de las manos, lo pasé por alto la primera vez y te castigué el segundo y el tercero. Cuartas veces, ¿qué más voy a hacer? Él pregunta, la última parte más para él mismo que yo.

"Solo déjeme ir porque no puede cambiar la forma en que alguien habla", respondo con esperanza. Sus castigos son inútiles en mi mente; La primera vez que volvió al viejo método de escribir una oración mil millones de veces. Tuve que escribir "No voy a maldecir" en una pizarra hasta que me quedé sin espacio, se sentó y me miró y me hizo escribir lo más pequeño posible. ¡Mi mano estuvo abarrotada durante una semana consecutiva! La segunda vez que tuve que ayudar al conserje después de la escuela, ni siquiera creo que obligarme a hacerlo sea legal, pero tenía que hacerlo. Nunca pensé que la goma de mascar pudiera ser tan repugnante. La tercera vez que tuve que aplaudir los borradores de pizarra, ni siquiera empecé a pensar en eso. El polvo de tiza se adhirió a mí como si no hubiera pasado mañana, pensé que me iba a quedar ciego o algo así porque tantas pedazos de polvo  me volaron directamente a los ojos. Y la cuarta vez, no fue tan malo, simplemente me suspendieron. Todo ese castigo solo porque la gente no sabe cómo no enojarme. Literalmente, no puedo pasar una semana en este lugar sin que alguien me moleste intencionalmente. Estuve molestando  a este tipo llamado Richard la otra semana porque se burlaba de mi estatura. De acuerdo, lo siento, amigo, no soy un metro ochenta como tú.