Prisoner of your Love

CAPÍTULO 13

EMILY POV'S

Ha pasado una semana demasiado tranquila, no han atacado ningún enemigo y eso no era nada bueno, Sara y yo hemos estado entrenado a escondidas de Ethan, ya que este no quiere que utilice la magia porque según el ''no era necesario'' ya que él me protegería, pero eso me hacía sentir una completamente inútil.

La luna se posaba en el firmamento y en estos momentos me estaba escapando de los fuertes brazos de cierto lobo posesivo que me estaba acorralando cual anaconda, una vez que había logrado mi objetivo, me agache en para sacar la bolsa en la cual tenía ropa para cambiarme, después de cambiarme, camine en puntillas por la habitación hasta llegar a la ventana y dedicarle una mirada a un MUY dormido Ethan para salir por la ventana.

Salí del cuarto hasta llegar al jardín, en donde se encontraba sentada Sara en una de las bancas de ese lugar, ella levanto su mirada y me sonrió levemente.

-Si Ethan se entera de seguro me mata- La mirada que tenían sus ojos era puramente de diversión, la cual solo me robo una leve sonrisa, sabía que a Sara le valía un reverendo cacahuate lo que Ethan llegare hacerle.

-Como si te importara, además lo necesito, si no entreno me siento una inútil que solo trae problemas- le reclamaba para dejar la bolsa en el suelo.

-Bueno, la lección de hoy será la invocación de animas- Sara comenzó a explicarme los movimientos que debía de hacer para concentrar mi energía y las palabras necesarias para llevar a cabo el hechizo.

Unas dos horas después, habíamos terminado de entrenar y hablábamos animadamente mirando la bella luna que se encontraba en esos momentos, pero el sonido de una ramas quebrándose nos llamó la atención y pico mi curiosidad.

Intente acercarme lo más posible, pero Sara tomo mi muñeca deteniendo así mis pasos.

-Ni se te ocurra, regresemos a casa y avisaremos a los guardias lo que ha pasado- prácticamente me rogaba Sara, mientras el agarre de sus manos se hacía mucho más fuerte, la mire a los ojos con algo de enojo, yo no era una bella y delicada flor.

-Sara, si regresamos las dos el intruso se va a ir y eso solo va a traer más problemas- Sara me miraba con preocupación pero solo soltó un suspiro de resignación y asintió.

-No voy a dejar que vayas sola además si Ethan se entera que estabas en peligro y no te ayude, él personalmente me podra la soga al cuello- dijo Sara con su típico tono de sabiduría, simplemente rodé los ojos y comencé a caminar, sabiendo perfectamente que ella me seguiría.

Nos fuimos internando poco a poco en el bosque, que se encontraba enfrente de la gran mansión del Alpha, sentía como mi corazón retumbaba hasta mis oídos, cada parte de mi cuerpo vibraba de emoción porque sabía perfectamente que de este lugar no saldríamos sin pelear antes, no es que la batalla con Nathaniel no me hubiera bastado, pero hace años que no sentía estas emociones y me agradaba sentir el peligro sobre mi piel.

No tardamos mucho en encontrar a los Rouger que  invadieron el territorio, pasee la mirada por todos y cada uno de los lobos, hasta detenerme en uno en especifico y como no recordarlo si era la ''mano derecha'' del lamebotas de Nathael, Logan Rowling, un maldito hijo de perra, en todo el sentido de la palabra, cuando su fiel amo no podía torturarme porque se encontraba ''indispuesto'' el con mucho gusto lo hacía, quería acabar con el maldito desgraciado, pero sabía que Sara me lo impediría, así que trataré de razonar civilizadamente por el el momento.

-Si buscas a tu querido amo, no te lo daré, así que da media vuelta, aquí no vas a conseguir lo que buscabas- cada palabra que salía de mi boca llevaba consigo un millón de maldiciones para Logan

Por su parte aquel horrible animal, simplemente soltó un gutural gruñido como respuesta lo que provocó que una sonrisa se posara en mi rostro, él quería jugar y yo le daría un muy divertido juego. Convoque a Goliard el cual se colocó en nuestras espaldas gruñendo mucho más fuerte que los lobos, supongo que con eso le pudieron advertir al bello durmiente de Ethan y espero que llegue pronto, el entrenamiento me cansaba demasiado y la invocación de Goliard conlleva demasiada energía.

-¿Porque no mejor intentas hablar como HUMANOS civilizados y aclaramos nuestros inconvenientes?- preguntaba lo más respetuosamente Sara, practicamente suplicando por que esto no se fuera a mayores, simplemente la mire con un poco de rabia, yo a este animal no le rogaría ni por la hora.

-''Yo no tengo nada que aclarar con esta bruja, solo necesito recuperar a mi señor y eso es lo que haré''- dijo Logan mientras se lanzaba a atacar a Sara la cual lo detuvo con uno de sus escudos y es así mis queridos amigos como inicie una pelea sin abrir la boca.

Todos los lobos atacaban de diferentes dirección, algunos alcanzaban a herirme pero terminaban postrados en el sueño otros muertos ya que Goliard y Sara no dejaban que se me acercaran, la lucha duró unos 10 minutos, ya solo quedaban 3 lobos incluido entre ellos LOGAN, deseaba matarlo pero mi poder mágico era casi nulo, ellos no desaprovecharon la oportunidad de volver a atacar.

Los tres lobos se lanzaron hacia Goliard logrando que desapareciera, era algo lógico ya que estaba en mi límite y mis sentidos no estaban del todo claros, cuando mi guardián desapareció Logan decidido a atacarme comenzó  a correr a mi dirección, pense que lograra detenerlo, pero mis músculos no responden, pensé que en ese momento terminara todo, pero eso no fue lo que paso, solo podía observar como aquella bestia atascaba sus fauces en aquella blanca piel y como todo comenzaba a teñirse de rojo carmín.

-¡NOOOOO! SARA- grite con todas mis fuerzas, comencé a correr así el cuerpo de mi amada maestra cuando aquel bruto animal la soltó, su respiración era errática y su pulso comenzaba a acelerarse, la cantidad de sangre que salía de su pequeño y débil cuerpo era excesivo y no tenía forma de curarla

-Sara, no puedes hacerme esto, no te atrevas a dejarme, si apenas me acaba de encontrar- intentaba controlar el flujo de sangre que salía de su cuello pero era inútil 

-E....emily tu va...vas ha es...estar bien- dijo Sara en un pequeño susurro y las lágrimas comenzaron a salir de mis ojos.

-No Sara, tu vas a salvarte de esta, yo lo s con......confia en mi ¿si? solo no cierres los malditos ojos- comenzaba a desesperarme he Ethan no llegaba, para que quieres un Mate si no esta cuando lo necesitas

-Yo se que el te protegera- dijo Sara mientras comenzaba a cerrar sus ojos -Te amo mi pequeña fiera y nunca lo olvides- en ese momento todo terminó, ella había muerto en mis brazos y el tiempo se detuvo completamente, no supe en qué momento había llegado Ethan con algunos guardias y no me importaba, en esos momentos ya nada me importaba, la había perdido para siempre.

Sara estaba muerta.