Cuando Kyungsoo despertó, sus ojos captaron de inmediato unas cortinas de terciopelo rojo, gruesas y enormes, cubriendo un ventanal. La tarde anterior no llamaron tanto su atención como lo hacían ahora, y en la cama ya no estaba Kai a su lado, por lo que se aventuró a levantarse para abrirlas y descubrir lo que habría en el exterior.
Se decidió a cubrirse con la sábana, en caso de que estuvieran rodeados de otros hogares, pero desechó la idea por completo al recordar el enorme terreno amurallado, y lo confirmó cuando logró arrastrar apenas las cortinas, descubriendo un jardín extenso rodeado de bosque, con algo que parecía ser unos establos en el fondo y una enorme piscina apenas visible al extremo izquierdo del paisaje. Del lado derecho, Kyungsoo podía apenas distinguir una fila de árboles altísimos cubiertos por la primera nevada, guiando hacia lo que parecía la puerta principal. Supuso que no podía ver por delante y por detrás muy bien, puesto que la ventana daba hacia un costado del hogar.
-¿Te gusta lo que ves?
Kyungsoo se sobresaltó cuando sintió las manos de Kai estrecharse en su cintura. El moreno lo rodeó con sus brazos y depositó un beso en su mejilla izquierda.
-Es muy bonito.
-Es mi casa de campo -el menor le besó el cuello, dulcemente- nuestra casa de campo -dijo, resaltando que aquella ella propiedad de ambos ya. El mayor se giró, aún con los brazos del menor rodeándole.
-Kai...
-Es Jongin, amor, así me llamo.
Kyungsoo se sonrojó y acomodó su cabeza en el pecho desnudo de Kai, su Kim Jongin. Su cuerpo rebosaba de felicidad, y sus brazos correspondieron al abrazo del moreno.
-Mi Kim Jongin. Es un nombre muy varonil, ¿sabes? Me encanta -sonrió tiernamente y besó el pectoral firme del más alto antes de llevárselo de nuevo a la cama.
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Ya había pasado más de un mes desde la desaparición de Do Kyungsoo. La agencia de entretenimiento que los respaldaba no tuvo otra opción más que anunciar el hecho a la prensa, y tal como fue predicho, el mundo del espectáculo se volvió un caos. Miles de personas buscando desinteresadamente al chico, fans amenazando de muerte públicamente -aunque algunas veces bajo un seudónimo en las redes sociales- al culpable del delito, otras de ellas llorando por desconocer el paradero de su ídolo.
Los miembros de Natural Gene dejaron de salir del departamento. Vivían recluidos en él, apartándose del estrés de exterior, pero manteniéndose al tanto de lo que decían las noticias. Y justo ahí, buscando entre las pertenencias del desaparecido Kyungsoo, Junmyeon se encontraba en búsqueda de alguna señal, alguna pista que pueda servir para dar con su paradero. Yifan le había dado esperanzas esa mañana, diciéndole que lo más seguro, era que algún fan o hater podría estar detrás de todo esto, y súbitamente, Junmyeon había recordado el reloj que su novio había estado intentando ocultar.
Baekhyun le había comentado algo al respecto antes de que todo sucediera, quizá el chico no lo hizo con otra intención más que la de quejarse por la suerte de Kyungsoo, pero Junmyeon debió tomarlo como una señal para prestar más atención.
A pesar de su renuencia a mover las cosas de la habitación, Junmyeon se encontró rebuscando entre las pertenencias de su novio, y todo estaba en perfecto orden a excepción de los regalos. Nada parecía fuera de lo normal porque, después de todo, Kyungsoo era bastante popular y los regalos eran una constante para él; sin embargo, lejos de todo el desastre de paquetes con dedicatorias comunes, Kyungsoo tenía unas cuantas bolsas y cajas de regalo apartadas del resto, que estaban ordenadas estratégicamente en un rincón del armario, ocultas bajo una sábana doblada que aplastaba unos zapatos carísimos y un bolso de diseñador. Dentro de esas otras cajas, había ropa igual de carísima que no recuerda haberle regalado, pero que tampoco le había visto usar más de una vez. Y si bien, los fans lo amaban bastante, no había indicio alguno de que aquello fuese algún presente por parte de algún fanclub.
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Fanatismo | kaisoo
FanficRegalos lujosos, notas de amor y palabras dulces fueron lo que recibió el cantante Do Kyungsoo como preludio a su peor pesadilla. Cautivo por culpa del amor insano de un misterioso fanático, Kyungsoo pronto se ve a sí mismo envuelto en una pasión en...