Inolvidable [TERMINADA]

Capitulo 24

Capitulo 24

Henry

Se que algo no va bien cuando recibo una llamada de mi padre-quien se encuentra en una petrolera en el Pacifico-preguntándome algo preocupado, porque lleva toda el día llamándole a mamá vía telefónica y ella simplemente con contesta.

—No te preocupes papá, ahora mismo salgo a buscarla y te llamo—cuelgo y apago mi laptop, guardo los documentos esparcidos sobre mi escritorio dentro de una carpeta amarilla y después meterla al cajón de mi escritorio con llave. Me levanto y salgo de mi oficina.

—Leah—llamo a mi secretaria—saldré, cancela todo por hoy, mas tarde me comunico contigo.

—Claro señor Dixon, yo me encargare—asiento y camino a paso apresurado hacia el elevador.

Los minutos se me hacen eternos y mucho mas cuando por mala suerte el elevador se detiene en casi cada piso, ya sea para dejar o recoger personas.

Recargo mi espalda en el cristal del elevador mientras este deja a su ultima persona y me deja a mi en el parqueadero que se encuentra en el sótano del edificio. Corro hacia mi auto, desactivándolo y subiendo a este para arrancar y llegar a la casa de mis padres lo mas rápido posible.

Mamá no esta sola en casa, hay personas de limpieza y la cocinera todos los días, no hay explicación por la que ninguno conteste el teléfono, ya sea el de la casa o el de mi madre.

Me siento frustrado, solo espero que se encuentre bien, quizás están todos en el jardín y no escuchan el teléfono.

Al llegar a casa todo me parece normal, es una tarde algo fría por aun ser invierno pero el sol aun esta dándonos luz. Estaciono mi auto y salgo, mientras camino hacia la puerta principal me doy cuenta de que olvide las llaves. Cierro mis ojos brevemente antes de volver a abrirlos y decir tocar el timbre. Quizás no es algo para estar paranoico.

Toco el timbre tres veces antes de escuchar unos pasos acercarse a la puerta y siento tranquilizarme cuando mamá abre la puerta, pero rápidamente lo noto. Ella no abre la puerta totalmente, solo un poco para que pueda solo ver la mitad de su cuerpo.

—Cariño, vuelve al trabajo yo saldré en unos minutos al spa—frunzo el ceño al notarla nerviosa, me exige con la mirada que me vaya lo mas rápido posible. Pero no lo hago.

—Lo siento mamá pero no lo hare—empujo la puerta.

—¡Henry no! ¡Vuelve al trabajo! —la aparto y entro a la casa, y rápidamente me tenso.

—¡Déjala! —le digo a un tipo, alto de piel pálida mientras este toma a mi madre y antes de que intente quitársela alguien mas me toma por detrás, sosteniéndome fuertemente y apuntándome con su arma mi sien al igual que lo hacen con mamá.

Me paralizo rápidamente, mis nervios aumentan mientras veo a mi alrededor sin poderme creer lo que esta sucediendo. ¿Qué es todo esto?

—Tranquilo, solo has lo que te pidan y estarás bien—trata de tranquilizarme mamá mientras comienza a llorar.

Trato de liberarme pero el tipo sosteniéndome aprieta su agarre.

—Ni se te ocurra o soy capaz de dispararte delante de tu madre. —me mantengo en silencio, no se que quieren, pero seguro es solo un robo, solo quieren dinero.

—Pero no se diviertan allá, vengan—escucho una voz a lo lejos, seguro en la sala y mi mirada se abre cuando me llevan hacia donde proviene esa voz y veo a cinco hombres armados y uno sentado en el sofá individual, sonriendo ampliamente mientras sientan a mi madre en el sofá al lado de el. —Así que el es tu hijo—le dice a mi madre, quien solo se mantiene con la mirada en sus manos, esta temblando y quiero correr a sentarme a su lado a calmarla pero no puedo, me obligan a sentarme en el otro sofá, mi madre frente a mi y el hombre de cabellera negra oscura a mi lado mientras que un arma sigue apuntándome detrás de la cabeza.