Escondiéndolo [Khr]

Fin.

Tsuna miro la tasa de café humeante en sus manos, escucho la lluvia chocar contra la ventana, como el suspiro que soltó Giotto, los movimientos nerviosos de las manos de Lampo, sentir que Mukuro puede romper su tridente por lo fuerte que lo agarra, y los silencios de Hibari y Knuckle.

- ¿Hibari-san...? - Hablo Tsuna en casi un susurro, esta abrió sus ojos y le miro, las demás hicieron igual. - Tu ya avías decidido que hacer desde el principio ¿No?

- Hn. - Dijo de inmediato, sin dudarlo.- Mi decisión siempre fue la misma.

- Volverás hacer chico.- Dijo Gokudera ingresando a la cocina.

Toda la familia regreso a casa después del lanzamiento de la cura para su enfermedad, la tensión se sintió a flor de piel y nadie se atrevió a romperlo, Reborn solo bajo su sombrero sentándose en su lugar, en relativo silencio.

Todas las enfermas se juntaron en la casa Sawada, para hablar o simplemente pensar. Fueron una a una llegando, sin avisar, solo sabían que tenían que ir incluso sin palabras.

- Es una decisión que siempre recayó en nosotras, no podemos poner nuestra relación sentimental como excusa.- Dijo Knuckle pasando su mano por su cabello.

- Tengo miedo.- Confeso Lampo temerosa.- Todas nuestras relaciones iniciaron siendo nosotras chicas, ¿Y si...?

- Lampo.- Corto Giotto.- Necesitas hablar con Ryohei, si bien lo amas, estamos hablando de tu cuerpo, tu decisión, si tu genero es tan relevante para que no pueda amarte de la misma manera siendo chico o chica, entonces...Habla con él.

- Se que Ryohei no es de ese tipo de personas, me lo demostró muchas veces a su manera.- Dijo Lampo sonriendo suavemente.- Es mi miedo lo que me congela, y el nudo en la garganta me impide hablar.

- ¿Trataste de hacerlo? - Pregunto Tsuna tomando un sorbo de su café.- Se que Mukuro lo hizo, igual que Hibari-san, Giotto-san, Knuckle y Gokudera.

- Trate.- Gimio escondiendo su cara en sus manos.

- ¿Que hizo él? - Pregunto inesperadamente Mukuro.

- Solo sonrió.- Suspiro alejando sus manos de su cara.

Tsuna sonrió al escuchar eso, su guardián esta alentando silenciosamente a Lampo a hablar, hacer que ella se tome las cosas con calma. Ella miro la cara de las demás, supo que Hibari no cambiaría de decisión de volver a ser chico, las otras...bueno, tuvieron su momento de duda.

- ¿Mukuro? ¿Y tu? - Pregunto Tsuna mirando a los ojos de la índigo, esta sonrió con su típica sonrisa misteriosa.

- Igual que la Alondra, mi decisión fue siempre la misma.

- Tuve mis dudas.- Hablo Giotto tomando una galletas de la mesa.- Pero, volveré a ser un chico.

- No importa lo que diga bronco, nací como chico y quiero seguir siendo un chico.- Dijo determinada Gokudera.

- Aclare las cosas con Takeshi.- Hablo Knuckle sonriendo como el sol que es.- Volveré a ser chico.

- ¿Y tu Juudaime? - Pregunto preocupada Gokudera, miro directamente a sus ojos, Tsuna sonrió cálida por la preocupación.

- Yo...

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- ¿Tsuna? - Pregunto G sentándose correctamente en la cama, vio el remolino de emociones en los ojos de la castaña.

- Y-Yo...- Tartamudeo.

El pelirrojo se paro de la cama, camino a paso lento hasta quedar frente a su novia, viendo como esta baja la cabeza ocultando sus ojos. Levanto su cara suavemente tomando su mentón, sus ojos no se encontraron.

G sabe lo que esta pensando Tsuna, quiere ser un chico otra vez, así nació, así creció y volverse una chica nunca estuvo en sus planes. Pero tiene miedo, G solo lo a visto siendo una chica, comportándose como una ¡Convirtiéndose en una! Con un suspiro cariñoso le beso la nariz y mejillas.

Con eso logro que sus ojos por fin se encuentren.

- Esta bien.- Susurro. - Te amo Tsuna. Eso no tienes que dudarlo, ¿Bien? Siendo chica o chico es igual, porque me enamore de tu forma de ser, tus mañas, gustos, disgustos, todo. No quiero que nuestra relación se interponga en tu deseo de volver a ser quien eras físicamente, incluso si te comportaste como una chica en este tiempo, tu sabes que eres un chico y se que lo piensas constantemente.

- ¿Como...? - Pregunto asombrada.

- Lo veo en la forma que miras la ropa de mujer que compramos, cuando te miras al espejo o tu simple reflejo en cualquier parte, cuando tocas tu pelo viendo lo largo que es, sientes las constantes miradas de los chicos y te sientes incomodo por tu eres un chico. - Siguió con ojos cálidos.- Tener que referirte a tu mismo como chica y no chico, sentir el peso de tu delantera de algo que antes no estaba, que la gente te mire diferente, tener que preguntarte a ti mismo si tienes que cambiar.

Tsuna sintió el inconfundible nudo en su garganta, las lagrimas quemando en sus ojos y el comienzo del temblor en sus hombros. Diablos, él realmente ama a G.

- Te observo Tsunayoshi, te miro porque te amo, siendo chico o chica.- Dijo riendo suavemente mientras que acaricia la cara del Décimo, sacando las lagrimas traicioneras que caen.

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Tsuna levanto su mirada sonriendo a lo grande, todas sintieron el amor, determinación, calidez y...decisión. Lo vieron con ese simple gesto, se miraron entre ellas y suspiraron sonriendo.

- Voy a volver a ser un chico.

Continuara...