Capítulo 22

49 4 0
                                    

La base estaba en completo silencio, Angela y otro grupo de médicos estaban bastante ocupados con los heridos del atentado contra el teatro de la zona. Mercy se encargaba de la castaña, Caeli. Mientras terminaba de checar las heridas menores y monitorear su estado, llamaron a la puerta de forma suave.

—Adelante.

—¿Aun no despierta? —en silencio, entro Gerard Lacroix, un agente y espía de la organización, junto a Amelie, su esposa.

—Aun no, respiro bastante humo, pero está estable. —dijo la médica mientras la bailarina se acercaba a la camilla acariciando la cabellera de la mas joven. Sintió algo de culpa.

—Cielo, no te preocupes. Estará bien—dijo Gerard acercándose y abrazando a su esposa. 

Después de que los paramédicos y la gente rodeara el edificio colapsado, vieron como la más joven salía a tropezones y se desplomaba frente a ellos. Con ver a la francesa totalmente preocupada por su estado, le quedo claro que había sido ella quien habia salvado a su mujer. Estaría eternamente agradecido, arriesgo su vida por la de su esposa.

—¿Podrías informarnos cuando despierte? —pidió Gerard, mientras, Angela asentía con una sonrisa.

—Les informare tan pronto como despierte. Por ahora será mejor dejar que descansé. —finalizo la rubia, viendo como la pareja salía en silencio. 

Suspiro y se volvió a ver a la mas joven, tuvo que cortar su larga cabellera, que estaba ligeramente chamuscada, había quemaduras menores, cosas que se desvanecerían con el tiempo. No entendia como había salido relativamente ilesa. Para el tiempo que estuvo dentro, que fue mas que el de la bailarina. Se acerco y acaricio su cabeza con suavidad, a manera de apoyo.

—Vamos pequeña, si te quedas aquí harás que media base llore—silencio. Sintió su corazón encogerse ante la falta de respuesta, se habia acostumbrado a sus bromas despreocupadas ante su situación, como las de Lena. 

Nuevamente llamaron a la puerta, pero esta vez se encontró con McCree, habia pánico en su mirada, estaba agitado y temblando un poco. Inmediatamente se acerco a el, pero el vaquero trato de esquivarla, siendo en vano.

—Jesse debes calmarte. Esta bien

—Déjame a solas con ella

—Aun no despierta, espera un rato.

—¿Estas segura que esta bien?

—McCree, relájate y respira. Esta bien, solo necesita reaccionar. Aspiro mucho humo y el cansancio le jugó en contra. Deja que descanse. Cuando despierte te avisare. —la médica logro salir con el con mucha dificultad. Entendía su preocupación por la menor. No habia pasado mucho que la rescataron del tal Camil y ahora se metía a un incendio.

Unas dos horas bastaron para que la menor despertara. El cuerpo le dolía y lo sentía bastante caliente. Abrió los ojos con debilidad, la luz blanca le molestaba bastante. Se sentó un poco en la camilla mientras analizaba un poco el porque estaba en la enfermería.

—Caeli—La voz de Angela la trajo a la tierra, haciéndola mirar a su lado derecho. La rubia, le sonreía con ánimos y bastante calma. —Me alegra que despertarás.

—¿Cuanto llevo asi?

—Bueno, desde que saliste y colapsaste. Como unas 4 horas. 

—Genial —dijo con sarcasmo, haciendo reír un poco a la médica. —Cómo esta Amelie?

—Esta bien, quemaduras y heridas menores. De hecho, quiere hablar contigo. Los dejó solos. —la médica salio de la habitación y unos segundos después entro la francesa junto a Gerard.

En Su Mirar (OW)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora