Un ángel en el infierno #DylmasNewtmasAwards

Me entrego a ti en cuerpo, entrégate a mí en alma.

Debido a las prisas y a la urgencia de la situación, la ceremonia se lleva a cabo en la biblioteca porque es el sitio que más le gusta a Thomas de todo El Claro y también el más seguro con todas las defensas que protegen los milenarios manuscritos. Sus amigos tratan de adecentarlo lo más posible, así que guardan las mesas y colocan las sillas, para las pocas personas de confianza que van a presenciar el enlace, frente a un arco que Dylan no está seguro de donde han sacado, pero que han decorado con hiedra y flores doradas que alguien ha debido encantar porque ese color no es natural, pero es lo que dicta la tradición.

A Dylan le sudan las manos; nunca pensó que pudiera vivir algo así, nunca pensó que existiera alguien que deseara unirse eternamente a él, nunca pensó que pudiera acceder a ese tipo de felicidad así que es normal que esté nervioso y sabe que no debe sentirse avergonzado, pero la mirada que Lydia y Scott le dedican cuando van a buscarlo para acompañarlo a la biblioteca lo desarma por completo. La pelirroja lo abraza vertiendo en el contacto todo lo que es incapaz de transmitirle con palabras y Scott palmea su espalda, felicitándolo con el orgullo reflejado en su mirada. Ambos saben cuánto ha sufrido, ambos saben cómo ha deseado toda su vida ser amado. Motivo principal por el que se aferró a Britt, motivo principal por el que ella murió. Sacude la cabeza cuando Lydia entrelaza su brazo con el suyo, después de todo es ella quien lo acompañará hasta el altar donde sus hermanos mayores le esperan porque su enlace no podía ser oficiado por nadie más.

Allison toca en el violín una suave melodía mientras él recorre la alfombra color vino hasta llegar a la altura de Caleb y de Stiles del brazo de su mejor amiga que le da un beso en la mejilla antes de ir a sentarse junto a Scott y los demás. Intercambia una mirada con sus hermanos mayores antes de que las notas del violín cambien, anunciando que su pareja está a punto de recorrer el mismo camino que él. 

Thomas vestido de dorado le roba el aliento y está seguro de que no repira mientras, con las mejillas sonrojadas y no sabiendo dónde poner los ojos, recorre el pasillo del brazo de Will hasta que llegan a su altura y el rubio se lo entrega.

- Cuídalo, Dyl.

- Con mi vida, Will.

El otro demonio asiente y, dejando igual que Lydia un beso en la mejilla de Thomas, va a sentarse donde le corresponde: en la fila de los seres más queridos en la vida de ambos.

Kaya se limpia una lágrima que se desliza por su mejilla cuando los ve juntos, Lydia pasa el brazo por encima de los hombros del ángel para darle apoyo porque ella está igual de conmovida.

Dylan coge aire antes de que su cuerpo se gire totalmente hacia Thomas cuya palidez y sonrojo natural parece resaltado a partes iguales por el dorado que lleva en todas partes, incluso en su pelo, de forma tan natural que parece haber nacido para vestir esos colores, para estar el día de hoy ahí con él, a punto de convertirse oficialmente en su todo, en su vida.

- Hoy nos reunimos aquí, en nombre del Cielo y de la Tierra, que están ausentes, por cierto, para no variar - Stiles recibe un codazo de Caleb para que se centre y el líder del infierno carraspea.- Con la intención de honrar el enlace entre el demonio Nogitsune y el humano Thomas Brodie-Sangster.

- Nos complace ser testigos de esta unión - responden sus amigos.

- Un enlace como este no puede ser roto por nada más salvo por la muerte - continúa Thomas, tomando la mano de su hermano menor y de aquel que comparte su nombre humano para poner una encima de la otra.

- Que todas las fuerzas del mundo lo protejan - vuelven a responder sus amigos.

- Yo, Lucifer del Infierno - coge una cuerda y la ata en la muñeca de Thomas.

- Yo, Dios del Paraíso - coge otra cuerda y la ata en la muñeca de Dylan.

- Con la bendición de las dos fuerzas mas grandes de la naturaleza, os preguntamos: Thomas Brodie-Sangster, ¿deseas unirte al Nogitsune aceptando proteger y amar su verdadera naturaleza?

El aludido separó los ojos de sus manos juntas por primera vez y los subió hasta los de Dylan cuya profunda mirada consiguió estremecerlo de arriba abajo. Nunca nadie lo había mirado de esa manera. Jamás. Y si los ojos son la ventana del alma, el alma de Dylan le estaba gritando que para él Thomas significaba todo.

- Deseo unirme a ti, Nogitsune - la cuerda que está atada a su muñeca brilla.

Dylan tiene que recurrir a todo su autocontrol para no gemir de placer por sus palabras, por su convicción, por su seguridad.

- ¿Y tú, Nogitsune, deseas unirte a Thomas Brodie-Sangster aceptando proteger y amar su verdadera naturaleza? 

- Deseo unirme a ti, Thomas Brodie-Sangster - responde cuando encuentra su voz, la cuerda de su muñeca también responde a la sinceridad de su juramento.

- Os unimos en un enlace mucho más fuerte que el matrimonio terrenal, os unimos a través de vuestras almas - dicen a la vez, colocando la cuerda alrededor de las manos unidas de Thomas y de Dylan y haciendo un nudo con ellas. 

Sus amigos se ponen de pie para aplaudir cuando Dios y Lucifer se separan de la pareja para darles espacio justo en el momento en que empieza a llover sobre ellos algo que Thomas piensa que son pétalos, pero no puede comprobarlo porque Dylan rompe la distancia que hay entre ellos y lo besa. Coloca los brazos por encima de los hombros del demonio y los enlaza alrededor de su cuello, no muy dispuesto a dejarle ir.

- Oh, querido, creo que hemos llegado tarde.

La voz desconocida para la mayoría de los presentes consigue sobresaltarlos y ponerlos en guardia mientras que Dylan se separa con pereza de la boca de Thomas para observar a los recién llegados con cierto fastidio. Sus hermanos mayores, por otra parte, deslizan una mano por su cara incrédulos.

- Padre, madre, la puntualidad nunca ha sido vuestro fuerte - comenta Dylan.

Los ojos de su recién titulado marido se abren con mesura y alterna los ojos chocolates entre Dylan y las dos personas mayores que han aparecido de la nada: ¿ellos son Tierra y Cielo? ¿De verdad? Thomas cree que en cualquier momento puede desmayarse y no se siente avergonzado al respecto. Nadie le dijo que, además de sobrevivir a la cantidad de emociones que le provoca tener a Dylan a su lado, también tendría que conocer a sus ahora suegros. No, eso es demasiado para cualquier humano y todos saben que él no es cualquier, pero sí humano hasta la médula.