Honey

Conspiracion

Honey

La cabeza de Stan dolía mientras las náuseas hacían de las suyas, eran apenas las ocho de la mañana, estar bajo los primeros rayos del sol, sentado en una terraza mientras desayunaba y escuchaba a Kyle y Eric discutir como siempre, no ayudaba en nada a su resaca

-pueden por favor callarse –les dijo Marsh mientras apretaba ligeramente el puente de su nariz- todavía es muy temprano para escucharlos pelear-

-¿la resaca te está matando, no? –Le pregunto Eric maliciosamente mientras dejaba de lado sus diferencias con Broflovski- es lo malo de los alcohólicos, les quitas la bebida un rato y se ponen irritables-

-no soy ningún alcohólico, gordo-

-soy fuerte y robusto, no gordo...borracho-

-basta los dos –intento poner orden Kyle- Stan, deberías tomar algo para tu resaca y dormir un poco más para que te sientas mejor, esta noche será muy importante y te necesitamos lucido-

-¿ya lo arreglaron todo?- pregunto el pelinegro mientras tomaba un vaso de jugo

-Gregory Fields uso sus contactos, la policía corrupta ya no está más del lado del negro, así que esta noche mientras él y sus sicarios se encargan de recibir su droga, la policía llegara para detenerlos, algunos de los policías serán hombres de nosotros disfrazados, ellos abrirán el fuego, nosotros estaremos unos metros más alejados, solo para verificar que Black salga esposado o muerto, pero que salga-

-¿el topo estará ahí?-

-si, al parecer tiene un especial interés en hundir a Craig Tucker...no sabemos porque, pero quiere estar ahí- respondo Kyle pensativo

-¡y que nos importa! - exclamo Cartman –el punto es que esta noche el clan de Black va a ser borrado del mapa-

-solo espero que todo vaya como lo planeamos y no nos salga el tiro por la culata-

-deja de lado tu complejo de madre judía, kyle, no hay nada de qué preocuparse, esta noche estaremos brindado con la mejor champagne por nuestra victoria... ¿oíste Stan? Te vas a poder emborrachar otra vez-

-vete a la mierda, gordo culón-

Le respondió Stanley un poco malhumorado, no solo porque lo que Eric acababa de insinuarle que era un alcohólico, sino porque en parte –y muy difícilmente se admitía- era cierto, Stan empezaba a temblar cuando se sentía sobrio, el ruido le molestaba, la luz lo irritaba, necesitaba beber algo pronto pero sabía que no podía hacerlo, Kyle no se lo permitiría

-¿estás bien, Stan?- le pregunto el pelirrojo

-sí, estoy bien... ¿pero podrías darme esa pastillas para la resaca?-

-claro-

-quiero descansar, estaré todo el día en mi recamara, quiero las cortinas cerradas, las persianas abajo y no quiero escuchar ni un solo ruido, cuando sea la hora de salir avísame por favor, Kyle-

-por supuesto-

-wow, las esposas judías son tan abnegadas y serviciales–se burló Cartman

Stan prefiero no hacer caso de las palabras del más gordo y se levantó de la mesa en la terraza, caminando pesadamente hasta su habitación mientras detrás de él Kyle y Cartman volvían a discutir, nada nuevo, pero ese día definitivamente no quería escucharlos, mucho menos si tenía que permanecer sobrio