Honey

La puerta cerrada

Honey

Veinte hombres fuertemente armados esperaban en el muelle privado como cada determinado tiempo, el trabajo era simple, recibir la mercancía que venia dentro de los ferris, confirmar la transacción de los millones a la cuenta de los traficantes y llevarse la mercancía hasta la casa de seguridad donde después seria repartida en diversos burdeles o llevada a clientes específicos, era a decir verdad un trabajo simple y hasta repetitivo, razón por la cual los ánimos eran flojos, nada extraño o peligroso pasaba durante esos negocios, los hombres bromeaban, platicaban, fumaban e incluso bebían, nada de que preocuparse, según Patty Nelson les había informado (a nombre de Corey) que llegarían sesenta chicas y chicos aproximadamente en esa ocasión, que tendrían que esperar y hacer lo de siempre, así pues lo hombres esperaron hasta las tres de la madrugada cuando vieron acercarse un solitario ferri desde la orilla, se prepararon hasta que este llego y paro en el muelle, unos minutos mas tarde un hombre viejo de espesa barba gris y mirada recia desembarco y fue hasta el líder de la veintena de hombres

-¡buenos días capitán!- saludo el líder con una sonrisa burlesca

-déjate de pendejadas y dime ¿esta listo mi dinero?- respondió el hombre para después escupir al suelo

-no hay dinero hasta que no revisemos la mercancía, lo sabe-

-la mercancía esta dentro del ferri, revisa y cuenta, son cuarenta chicas, veinte chicos y diez niños, todos vivos y completos-

El hombre sonrió de medio lado y subió al ferri junto a una linterna, abrió la caja principal del trasbordador los ilumino y ahí vio los rostros sucios , llorosos y asustados de varias chicas y chicos en su mayoría menores de edad

- seis...dieciocho...veintisiete...cuarenta....cincuenta y seis...sesenta...setenta-

Conto rápidamente y con la mirada, después de eso apago la linterna, cerro la puerta y regreso hasta el llamado "capitan" que lo esperaba con un cigarrillo en la boca

-parece que todo esta en orden-

-¡por supuesto que si! ahora el dinero-

-ok, ok...no desespere, llamare para dar la autorización y...-

Las palabras del hombre fueron cortados cuando no muy lejos pudo escuchar como varios autos se acercaban, todos los presentes se miraron entre ellos y el sonido de las sirenas se hizo presente, así como las luces rojas y blancas

-¡es la policía!- grito uno de los hombres

-¿¡que!?-  grito el llamado capitán -¿de que demonios se trata esto?-

-¡no lo se! -respondió el líder - ¡todos, disparen!-

Los hombres sacaron sus armas y algunos escondidos entre los botes, el ferri y las paredes de las bodegas cercanas empezaron a disparar a las patrullas que se habían encargado de rodear un gran perímetro entre ellos, los policías escudándose con la puertas de sus vehículos adoptaron una pocision ofensiva 

-¡en nombre de la ley! - dijo el jefe de la policía  PC a través de un altavoz -¡entréguense de forma pacifica! suelten las armas y levanten las manos, los tenemos rodeados!-

En respuesta los traficantes y marinos del ferri empezaron a dispara en su dirección, la policía respondió de la misma forma y en cuestión de segundos toda calma en el muelle había desaparecido gracias al cruce de balas de ambos bandos, la balacera duro por lo que parecieron eternos minutos donde el olor a pólvora, casquillos en el suelo y sangre derramada lleno todo el ambiente, tras la puerta de su patrulla PC se encargaba de derribar a la mayor cantidad de hombres posibles, había contado ya mas de diez del bando enemigo y esperaba que lo que Strong le había dicho sea cierto, que no había mas de treinta, varios minutos después las balas de los enemigos fueron escaseando, PC volvió a tomar el megáfono