Demonio & Angel 2°Temporada [Eddsworld TomTord]

Cap. 19

Dato: Tord ya no trabaja en la Armada, puesto que, se la dio a alguien más, así que, ya no tiene ningún arma de la Armada Roja.

-¡Auch! -Gimió adolorido tal chico hijo de Tántalo- ¡Camilo, me duele! ¡Para! -Dicha la ultima palabra no tuvo mas opción que alejar la mano del chico recién mencionado de su herido en  el rostro.

-Taggart, por favor -Suplicó el chico con lentes- ¿Quién te manda a ponerte de agresivo con una banda de barriales? ¡Tus heridas ni siquiera han dejado de sangrar! Déjame cuidarte.

-Como quieras -Cedió a quitar su mano y dejar que aquel chico con lentes pusiera algodón y agua oxigenada en la herida para sanarla.

Aquel chico en su cara poseía distintos tipos de heridas, un ojo morado, hemorragia saliente de la boca, una que otra cortada en su cara y cuerpo, ¿Quién iba a decir que los chicos de esa banda tenían unas navajas y pistolas? Pues... Se podía decir que el chico en verdad estaba herido, después de recibir algunos disparos y navajazos en su vientre, aun no se rindió, ¿Cuando aprenderá?

-Dime -Dijo Camilo- ¿Cuál fue la raíz del problema para que te metieras con esos chicos?

-Simplemente estaba caminando normal, entonces ellos quisieron buscarse bronca conmigo.

-Y tú de obediente se la diste, ¿Verdad? Por lo menos no saliste mas herido de lo que estás.

-Pero por lo menos le gané.

-Estas herido, ¿Y solo te preocupas por eso? Por favor Taggart, tienes que pensar en como saldrán las cosas después de cada cosa.

'Tienes que pensar en como saldrán las cosas después de cada cosa' Por razones en particular esa frase le recordó a aquellos guardias que le servían en cuidarlo en prisión, solo escucho eso y no pudo evitar imaginar un mundo en el que la paz y la tranquilidad para él no existieran, solo se quedaba viendo un punto fijo imaginándolo, mientras que su rostro ponía una sentimental expresión.

-Vale, tengo que ir a hacer algunas cosas -Dijo Camilo, guardando algunas cosas médicas en su botiquín-. Procuraré no tardarme tanto.

-¿Con quién vas a ir? -Cuestiono con tristeza en su voz, sus ojos verdes se posaron en los celeste del chico con lentes, aquellos ojos llenos de tristeza y perdidos, impotentes y heridos, además de sentir una gran culpa por lo ocurrido con esa banda de chicos peligrosos.

-Tranquilo, tengo que ir a hacer cosas con mi Padre, te prometo que vendré lo más rápido posible, ¿Si?

-Bien.

Como se había dicho antes, aquel chico con lentes redondos arregló las cosas de dicho botiquín y se fue, dejando a aquel joven herido en la sala, solo. Una gran paz se sentía en ese lugar ¡Y ni pensar en salir afuera! Después de lo sucedido, ya no quería salir y encontrarse a esos chicos otra vez, así que decidió levantarse de su asiento e ir a la gran biblioteca de la Mansión de Cronos, adoloridamente daba cada paso, se apoyaba de la pared para ir a la Biblioteca, pues... Tenia una gran herida en la pierna que casi no le permitía bien dar el paso. Para cuando llegó a duras fuerzas se sentó y escogió un libro de muchos.

Una hermosa biblioteca, con los estantes en forma circular que acogían, un hermoso candelabro de diamante y oro colgando en el centro de toda la inmensa biblioteca con una preciosa esmeralda en el centro, era la mejor biblioteca que pudieras apreciar  en toda tu vida, tan tranquila, tan callada, tan pacífica.

Tranquilidad, soledad y un gran silencio habían en la gran biblioteca, aquel libro era una de los que mas le encantaban a Taggart, lo repetía una y otra y otra vez, sin cansarse nunca de leerlo, 'Bajo la Misma Estrella', no solo por el libro una pequeña lágrima cayó de sus cristalinos ojos, luego otra y luego otra, cerró el libro rápidamente y trató de serenarse y dejar de estar llorando. Sin embargo, no funcionó en absoluto, aunque cada lágrima le dolía por sus heridas, no pudo dejar de llorar.