Mi primer gran amor.

Capitulo 30

Si esto es un sueño, no quiero despertar aún. Pasé mucho tiempo imaginando algo parecido a esto, y justo en este momento esta ocurriendo.

Se ve nervioso, sus ojos aun me observan, su mano resfriega su cabello y ninguna palabra sale de sus labios. Tal vez, esto si es solo un sueño, y en cualquier momento mi madre entrara a la habitación para despertarme.

-Caítlin..—Habla al fin.

Solo lo observo, no puedo hacer mas.

-Dios...esto es.. tan complicado..—Desliza una mano por su cabello.

-Harry...-digo apenas, siento el corazón latiendo en mi garganta.

-Lo siento —pronuncia y pausa — siento todo, la fiesta, el día de la cita, todo. Solo se que no soporto el hecho de que me odies. Últimamente me han ocurrido cosas muy extrañas, que ni yo sé el porque me ocurren.. siento como si tuviera la necesidad de observarte, de estar cerca de ti, de abrazarte y no soltarte mas...Yo solo..—se silencia, quiero seguir escuchando sus palabras.

Cada letra, cada silaba, y cada palabra de lo que está diciendo, es lo que siempre quise escuchar, desde el momento en que comenzé a crecer con ese sentimiento dentro de mi.

-yo...—logro susurrar, mis palabras apenas suenan.

-Te..quiero —susurra apenas audible.

Al escuchar simplemente esas dos palabras, mi mundo se detiene, mis pensamientos viajan a aquel pequeño ruloso jugando fuera de su hogar, mientras su madre conversa con alguna vecina. lo observo desde mi habitación, solo quiero salir y jugar con él, pero sé que el no querrá verme cerca. El recuerdo viaja y se sitúa en el presente.

Harry me quiere. Él a dicho que me quiere.

-¿Es..encerio?— susurro con miedo a su respuesta.

Su mirada es lo mas hermoso que mis ojos han podido presenciar jamás.

-Si — murmura observándome directo a los ojos— no se que me pasa Caitlin, nose que ocurre, solo sé que,  te quiero.. joder, te quiero — él dice.

-Yo, hm...yo..—susurro con los ojos vidriosos. Caitlin este no es momento para soltar lágrimas.

Disminuye la distancia entre nosotros, y su brazo viaja a mi cintura, al sentir el agarre mi corazon envia una descarga emocional por todo mi cuerpo. Mis ojos están a punto de soltar esas gotas saladas. Se va acercando cada vez más a mi, nuestra mirada esta conectada, su nariz roza la mía tanto así, que puedo sentir su respiración. Estamos a solo escasos centímetros, el otro brazo recorre mi rostro delicadamente provocando un escalofrío que se encarga de recorrer mi espina dorsal.

-Eres tan distinta Caitlin..

Solo un movimiento mas y sus labios tocan los mios.

No te olvides de issabela, no te olvides de Issabela...Caitlin no te olvides de Issabela.

-Harry esto..— suelto una bocanada de aire, con el pulso acelerado— esto esta mal.

-No me detengas porfavor— observa mis labios y luego nuevamente mis ojos— esta vez no.

Él susurra y es ese el momento en que mis ojos se cierran y siento sus labios presionar los mios, encajando a la perfección. Al diablo con Issabela, el chico del cual me muero hace años, me esta besando, de forma delicada y lenta. Una lágrima recorre mi mejilla indicando lo feliz que me siento. Aferra sus manos acercándome mas a él y lentamente subo mis brazos por su cuello, para mayor comodidad. Su lengua hace contacto con la mía y danzan como una sola, mis ojos permanecen cerrados mientras mi cuerpo se comienza a relajar, esto es mucho mejor de lo que alguna vez imagine. Sus labios son suaves y delicados dignos de un buen besador.