Jeongsin. pjm BTS

23.- 새로운 이야기.

Kihyun posó la vista en Taehyung con una furia desmedida, su sangre hervía y las manos le hormigueaban, se relamió los labios sin dejar de ver al muchacho y ladeo el rostro reincorporándose para acercarse al desgraciado hijo de puta que lo había golpeado. Sonrió taimado y suspiró, relajando los brazos. Tae bajó la guardia por un segundo y ese fue su error.

Kihyun deposito un fuerte golpe en la barbilla del moreno, empleando todas sus fuerzas contenidas. El rostro de Tae giró y de inmediato volvió la vista a su contrincante. Kihyun tomó a EunJae del brazo con brusquedad y la llevo a su lado.

— Ella se queda conmigo, niño bonito — declaró.

Tae levantó una ceja y negó.

— Sabes que no lo permitiré, maldito loco de mierda — replicó tajante, mientras cerraba ambos puños y los colocaba a la altura de su barbilla listo para pelear.

Kihyun soltó una risa sardónica y formó un rictus fingido.

— Te aseguro que lo que menos quieres es pelear conmigo — le advirtió al menor.

Tae sonrió.

— ¿No crees que me estás subestimando?

EunJae deseaba detener el enfrentamiento, negó rápidamente pensando en una solución, miró su bolso y extrajo su teléfono celular para llamar a su hermano. En ese momento, Taehyung y Kihyun comenzaron a pelear de forma violenta soltando golpes a diestra y siniestra. Jae buscó el número de su hermano con las manos temblorosas, incluso pensó en llamar a la policía, pero desistió al creer que Tae también podría salir implicado. Sin embargo, no hizo falta ni una ni otra. En ese momento, Jungkook se abalanzó sobre Kihyun sorpresivamente. Desconcertado, Taehyung se detuvo al mirar a su hermano.

La pelea había tomado un rumbo totalmente distinto, por qué en esa ocasión eran JungKook y Kihyun los que se debatían a golpes. EunJae no sabía qué hacer, JungKook tenía a Kihyun acorralado contra el pavimento, mientras le molía el rostro a golpes; aterrorizada, Jae negó y sintió de pronto un par de brazos rodearla con ternura.

Se giró para averiguar de quien se trataba, obteniendo alivio inmediato cuándo descubrió a Sanae y a Jimin en la escena. Jimin atendía las heridas de Taehyung y miraba preocupado a su hermano menor pelear frenético con el otro muchacho. Sanae no soltó a EunJae y la retuvo entre sus brazos intentando tranquilizarla hasta que harto, Kook dejó a Kihyun tirado en el suelo, completamente inconsciente.

— Si vuelves a ponerle una mano encima a EunJae o a mi hermano, juro que te mato — lo amenazó, con la voz y la respiración aceleradas.

Jimin se acercó al chico y negó.

— Todo ha terminado — musitó.

JungKook asintió y posó la vista en EunJae, avergonzado, creyendo que tal vez, la chica estaría molesta con él por haber interferido. Tragó saliva. Miró a Taehyung para comprobar su estado y cuando el moreno asintió, se giró para acercarse a EunJae, despacito.

— Jae ¿Estás bien? — preguntó.

EunJae asintió.

— No comprendo lo que ha sucedido, jamás imaginé ver a Kihyun como el malo — declaró.

JungKook asintió.

— Lo siento, no pude contenerme — se disculpó.

Jae negó con la cabeza y se inclinó para agradecerle. Después miró a Taehyung e hizo lo mismo.

Tae sonrió.

— Será mejor que vayamos a casa y curemos nuestras heridas — dijo apacible —. También tú vendrás — sentenció mirando a EunJae.