Jeongsin. pjm BTS

38.- 부정과 상실.

Jimin tenía la mente en blanco, no necesitaba pensar y, sin embargo, era imposible olvidar lo que había visto. Su hermano besando a la mujer de su vida le había dolido demasiado, un poco más que eso. No quería saber nada, ni siquiera la razón. Al sentir a Sanae detrás suyo caminó más de prisa; su sangre hervía y de pronto, una sed de venganza incontenible lo domino por completo.

¿Qué era el amor? ¿Qué era lo que su madre quería que descubriera? ¿De verdad valía la pena averiguarlo? Podía jurar que no le interesaba, simplemente necesitaba apartarse, necesitaba encontrar un motivo más para volver a ser la misma persona de antes. Vuur no necesitaba de nadie, pues a final, siempre había estado solo ¿Qué más daba?

Sanae tocó su antebrazo para detenerlo, Jimin se giró para verla, completamente furioso.

— Jimin, espera. — Sanae se colocó enfrente luchando por detener su paso —. Creo que necesito darte una explicación.

Jimin sonrió.

— ¿Una explicación? Sanae, yo sé lo que vi. — El joven negó —. No soy imbécil.

Sanae asintió.

— Yo también sé lo que viste y Jimin, de verdad — suspiró. —, de verdad tiene una explicación. Deja que te la de.

El corazón de Jimin bombeaba sangre demasiado rápido. No necesitaba escuchar la excusa estúpida de Sanae.

— Olvídalo, de cualquier forma, ya habías hecho tu elección. — Sentenció y se zafó del agarre de la chica. Jimin esquivo a la chica para continuar con su camino.

Sabía que necesitaba vengarse de Taehyung, porque nunca nadie se había burlado de él, nunca nadie lo había si quiera pretendido.

Jimin lamentaba demasiado comprender que no estaba hecho para amar, que un sentimiento tan grande como ese no estaba hecho para él porque lo único que podía sentir era odio y un gran deseo de destrucción.

El fuego era destructivo, Jimin era destrucción.

Sanae lo miró alejarse sin saber qué hacer. Sentía que lo mejor de su vida se le escapaba de las manos y que de pronto, todo a su alrededor se desmoronaba. Jimin era el único hombre que había logrado amar de verdad. Estaba acorralada; el peso de su error caía sobre sus hombros, empujándola hasta el fondo de la tierra.

Y es que ¿Cómo podía pretender continuar sí ya no iba a estar Jimin a su lado? Sanae tenía que recuperarlo, tenía que encontrar la manera de demostrarle el infinito amor que sentía por él. Pero por el momento, más valía dejarlo partir para tranquilizar el fuego que había en su interior.

De pronto, Sanae ladeo el rostro desconcertada, las palabras de Taehyung llegaron a su mente ¿él había mencionado a Vuur? La chica recordó la primera vez que los vio y, por si fuera poco, Tae también había mencionado a los Jeongsin. Estaba segura de no haber escuchado mal. Podía incluso jurarlo.

(****)

JungKook había comenzado a preocuparse, EunJae por lo regular era demasiado impuntual, pero no tanto como en esa ocasión. Después de haberla esperado por una hora, supo que algo andaba mal, llamó al número de la chica y envió un millar de mensajes de texto, sin embargo, no había obtenido respuesta.

Como no tuvo otra opción, decidió llamar a SeokJin y preguntar.

— ¿Qué dices? Sí salió hace como una hora. — JungKook pudo notar la preocupación en el muchacho. Sintió su corazón retraerse al escuchar aquella noticia. Jin continuó — ¿Ya intentaste llamarla?