Enchanted To Meet You

Capítulo 9. Forcing Laughter, Faking Smiles

El Copyright y la Marca Registrada del nombre y del personaje Harry Potter, de todos los demás nombres propios y personajes, así como los símbolos y elementos relacionados son propiedad de Warner Bros., 2000.

Este fanfic ha sido basado en la canción Enchanted por Taylor Swift.

—¿Cómo te las estás pasando en —Nott señaló a los lejos su casa de playa como si se tratara de la séptima maravilla del mundo— mi mansión?

Rose hizo caso y siguió hacia donde William señalaba. La casa no era la gran cosa, tenía una vista sensacional hacia el mar pero estaba algo descuidada. El papel tapiz de las paredes estaba medio rasgado, los muebles de madera estaban algo despostillados por la termita, las escaleras crujían, estaba sucia cuando llegaron y no había señal como para hacer llamadas. A ella le hubiera parecido un comentario gracioso sino fuera por quien lo había dicho, además tener a William Nott borracho y confianzudo le era algo incómodo.

—Bien —respondió—. Fue muy amable de tu parte. — Rose le regaló una sonrisa más por amabilidad que por su comentario que pretendía ser gracioso.

—¡No es por nada! Cuando gusten mi casa siempre estará disponible. —Y le guiñó un ojo con coquetería, después le dio un sorbo a su cerveza—. Lily dice que no has bebido, ¿Por qué?

—¡Oh no! —Lo detuvo cuando el chico hizo un ademán de ir por una cerveza para ella—. En realidad no bebo, pero gracias.

—¿Segura? ¿Ni siquiera una? —Ella negó— ¿Ni para ambientarse? ¿Ni un sorbo? —Volvió a negar, esta vez con una sonrisa medio tímida que luchaba por esconder.

—Ni siquiera un sorbo.

William comenzó a reírse sujetando su cerveza casi vacía hacia su pecho, Rose agachó la mirada intentando esconder su sonrisa, sin embargo él se dio cuenta de lo que sucedía y dejó de reír, ¿Cómo podía hacerla sonreír? ¿Por qué aquella chica que tenía frente a él se negaba a felicidad?

Se acercó más hacia ella quedando a una distancia más íntima, con las puntas de sus dedos le metió un riso detrás de la oreja e hizo su camino hasta encontrar la barbilla de la chica. Rose se puso tiesa como una estatua, ni siquiera se atrevió a mirarlo, fue hasta que sus dedos la obligaron a hacerlo. Ella lo observó como si le tuviera miedo y Nott no podía dejar de preguntarse: ¿Por qué lo miraba así? Él no le haría daño, jamás le haría daño, ni siquiera pensaría en hacerle daño, entonces ¿Por qué?

—Tienes una sonrisa hermosa. —Con ambas manos acunó el rostro de la chica como si se tratara de una flor delicada o una piedra preciosa.

Rose sabía lo que estaba a punto de ocurrir y si no hacía algo pronto se arrepentiría por el resto de su vida. Era obvio que el chico tenía sentimientos por ella, lo estaba demostrando ahí mismo y ella ahora no estaba lista para dejar entrar a alguien nuevo en su vida, tampoco sabía si algún día lo estaría y no quería herir los sentimientos de William. A pesar de todo, lo único que había hecho él fue preocuparse y ser amable con ella, no obstante la forma en que se conocieron arruinaba las cosas, hacía a Rose recordar cosas que no quería, aparte de sentirse ligeramente avergonzada.

William pegó su frente con la de ella, después rozó su nariz con la suya, cerró los ojos e inhaló.

—Y a pesar de todo... nunca sonríes —dijo con tristeza Nott— ¿Por qué? Puedes decirme... puedo ser tu amigo Rose...

—Yo... —Rose abrió la boca buscando las palabras correctas, aquellas palabras que no buscan herir sino hacer comprender, mas no encontró nada, ¿Cómo podía pensar coherentemente cuando Nott le decías esas cosas? Debía hacer algo—. Lo siento... tu no me conoces.