El acuerdo.

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Las horas a su lado sin duda eran mejores que estando a solas, cuando la ciudad apareció ante sus ojos sabía que no había marcha atrás estaba ahí con esa mujer por qué quería jamás se sintió tan atado de buena manera a alguien y le gustaba la sensación de pertenencia.

Tomaron un taxi hasta su casa, Melissa quería que se instalarán primero antes de ir a gritar a Scott Gimple algunas verdades.

Todo estaba en su lugar hasta Lincoln quien se esforzaba moviendo la cola al verla llegar, Melissa se sintió culpable al verlo ni siquiera lo había tomado en cuenta pero estaba de vuelta y le acarició detrás de las orejas para compensar la ausencia.

Norman se encanto con aquella mascota y comenzó a juguetear con él, un paso más ganado pensó Melissa.

—Te aprueba —dijo a Norman —no sé qué hubiera hecho si Lincoln no te aceptaba supongo que todo esto entre nosotros terminaría.

—Oye míralo me ama —sonreía al canino sin dejar de acariciarlo.

—Norman tengo que ir a los estudios —lo miro cual niña ansiosa pidiendo permiso para salir.

—Pues vamos —dijo.

Melissa no esperaba aquella respuesta pero le pareció la mejor, si Norman estaría con ella tendrían que conocerlo y aceptarlo como su pareja, por otro lado una inquietud más grande se hacía presente, la de que no podía convencerlos de que no la echaran del show.

Condujo hasta los estudios, mostró su identificación, la rutina que solía presentar muy seguido y después a buscar a los productores.

Scott y Robert bebían de un vaso de plástico mientras conversaban, al rededor algunos miembros conocidos la saludaron de lejos y miraron al hombre a su lado.

La mano de Melissa no soltaba la de Norman a pesar de haber notado que sudaba probablemente por la incómoda situación por la que creía atravesaría, pero ambos trataban de parecer lo más tranquilo posible.

Gimple la miró primero, colocando en su rostro una mueca desagradable al momento en que sus ojos hicieron contacto con los de Norman, aún recordaba el golpe en la quijada.

—Así que nuestra reina por fin apareció —dijo Robert más tranquilo y sin hacer gestos.

—Vine de inmediato no estoy de acuerdo con lo que quieren hacer. —Dijo Melissa dirigiéndose principalmente a Robert sabía que era más fácil de persuadir.

—No queríamos nada de eso cariño pero tus acciones nos han obligado —intervino Scott— además tu vida personal comenzará a pesarte más y no lograrás un equilibrio.

—Pero te escuchas bien Scott estas diciéndome que no puedo tener una vida privada —se sobresaltó— que hay de los demás por qué jamás les has dicho nada que tienes en contra de mi.

Norman intentaba mantenerla en control colocando una mano sobre su hombro, pero Melissa realmente estaba exaltada, molesta con aquel par de hombres que le prohibían vivir su propia vida.

—Escucha Mel —intervino Rob— estuvimos meditando sobre tu personaje realmente es muy importante y Scott y yo tenemos una propuesta.

—Cuál es...

Robert miro a Norman el cual entendió que se trataría de él de alguna manera.

—Podría tu pareja esperar a fuera no tiene ninguna autorización de estar aquí —inquirió Scott.

Melissa estaba por oponerse cuando Norman acepto complaciente y dándole un beso en los labios a la mujer salió cerrando la puerta detrás de él completamente tranquilo.

Caribe (Mcreedus  AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora