Capitulo 3

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La alarma sonó e hizo que me despertara del susto, estaba enredada con mi cubre cama y mis almohadas; tuve un sueño muy raro... siento que es algo muy familiar. Me quité el cubre cama, me quedé sentada a un lado de la cama pensando en ese sueño, siento que ya lo he vivido hace tiempo, pero no recuerdo cuándo, mejor dejo de pensar en eso. Me terminé de levantar de mi cama, mi cuerpo me pesaba, caminé en dirección al baño, no vi la hora, me lavé la cara y mis dientes, luego de hacer eso me quité la ropa y quedé completamente desnuda, me metí al baño y me di una ducha con agua tibia.

Después de darme una ducha un poco más larga de lo normal, salí y sequé todo mi cuerpo con una toalla, luego de hacer eso salí del baño y caminé hasta mi armario, elegí una falda blanca que llegaba casi a las rodillas, con una camisa roja corta, y mis convers, acomodé un poco mi cabellera, guardé mis cosas en mi bolso, salí de la habitación y bajé a desayunar con mis tíos.

Hoy alguien morirá, pero no sé quién es esa persona para impedir que no muera, hoy les preguntaré a mis tíos sobre Annie, presiento que algo va a salir mal hoy, siento miedo las piernas, me tiemblan un poco en pesar que alguien va a morir hoy. Al llegar a la sala de estar pude ver que mis tíos estaban sentados ahí con la misma ropa del día anterior, mi tía tenía lágrimas corriendo por sus mejillas mientras que mi tío estaba al lado de ella consolándola. ¿Qué habrá pasado? Alguien murió, fue lo primero que se me vino a la mente al ver a mi tía así, al parecer no habían dormido toda la noche, tenían la cara destrozada, no sintieron mi presencia al llegar, a la sala de estar me paré al lado del mueble donde estaban sentados ellos .

— Buenos días —saludé en tono un poco alto para que escucharan fuerte y entendible, al terminar de hablar en seguida notaron mi presencia.

— Buenos días, mi niña —dijo mi tío con tono de voz muy bajo pero que pude llegar a escuchar.

— Buenos días, Kylie —dijo mi tía enseguida después de que mi tío terminara de hablar, se secó las lágrimas de sus mejillas y se levantó de su asiento, caminó en dirección a mí y me abrazó.

— ¿Qué pasó? —acepté el abrazo y empecé a mover mi mano sobre la cabellera de mi tía.

— Alexia no vino a dormir —reveló mi tío—. No sabemos dónde está, llamamos a sus amigas y nos dijeron que ella estaba en su casa, pero en la tarde se venía a nuestra casa pero de ahí no saben más nada de ella —terminó de hablar, se inclinó un poco hacia adelante, puso su codo en su rodilla, luego su mano sobre su frente.

— ¿Quién les avisó que alexia había desaparecido? —pregunto.

— Un número desconocido, no pude reconocer la voz —respondió, agarró el teléfono y empezó a revisarlo—. Dijo que alexia había desaparecido desde que salió de la casa de una de sus amigas por la tarde, la última vez que la vieron fue cuando salió de la casa de ella, debemos reportarlo a la policía, esto no se puede quedar así —no sé si apoyar en la idea de mi tío de reportarlo en la policía tienen, que pasar 24 horas para que quede como desaparecida, pero Alexia es una hermana para mí, no tengo otra opción que apoyar en eso.

— Cuenta conmigo, volveré a hablar bien con sus amigas —dije, mi tía se había quitado de mi camino en dirección a mi tío—. Encontraré a Alexia, lo prometo —al decir eso mi miedo empezó a apoderarse de mí, tengo miedo de no encontrar a alexia, tengo miedo de que ella esté muerta. Caminé en dirección a la cocina por un jugo y galletas, recibir esa noticia me quitó el apetito, no sé por dónde empezar a buscar a Alexia, solo puedo empezar preguntándole a sus amigas.

Me despedí de mis tíos y salí de mi casa, no sabía dónde vivían las amigas de Alexia, sé que viven al otro lado de la ciudad, solo podré saberlo si le pregunto a Manuel, sí, Manuel se ha cogido a casi toda la escuela, eso quiere decir que también a las amigas de Alexia, al parecer solo se las coge por diversión o por no sentirse solo por un momento, ya que a las que se ha cogido son de tercer año, pervertido tenía que ser. Dejé de pensar en eso, en ese caso ahora lo que quiero es ver a Fred, su rostro destruido ayer, sus ojos apagados... no estaba bien. Tengo que admitir que las notas fueron una sorpresa para nosotros, nunca llegué a pensar en recibir esas notas de amenaza.

¿Quién es Annie? #BlueStarAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora