He fallado otra ves

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Kylie 


Me quedé dormida en el mueble de la habitación del hospital, tuve un sueño muy raro... en mi sueño estaba la figura femenina, siento que ella me es familiar, pero no recuerdo quién es ella en mi vida, siento que es familiar. Cuando me abrazó en el baño sentí como los abrazos de mi madre, sentí el calor de mi madre, pero esto es una locura mi madre y mi padre están muertos, siento que la necesito, siento que me hace falta, no la he visto desde que desapareció de la habitación cuando Fred estaba en este hospital, me extraña que no haya vuelto a aparecer.

— ¿Kylie? —escuchaba esa voz— ¿Kylie? —cállate-¿Kylie? —estaba durmiendo y desperté

— ¿Qué? —dije.

— Nena... —era Fred, me miró y empezaron a salir lágrimas, me senté en el mueble, no sabía que era lo que estaba pasando.

— ¿Qué pasa? —pregunto, se queda callado y no responde— ¿Qué pasa? —vuelvo a decir, más lagrimas salieron de él— Dime maldita sea —dije poniendo mis manos en sus hombros.

— Te voy de decir dos cosas, pero necesito que estés tranquila —dijo sentándose al lado mío.

— Entiendo —dije.

— Robeth... —me miró directamente a los ojos, más lagrimas salían de él— Robeth acaba de fallecer—no aguantó más y empezó a llorar con todas sus fuerzas, el Sr Robeth acaba de fallecer, demonios, me sorprendí al escuchar eso.

— Lo siento mucho, Fred —dije abrazándolo— ¿Qué pasó?, ¿por qué se murió? —se secó las lágrimas, se calmó un poco y empezó a explicar.

— Ayer por la noche, cuando llegamos juntos, entré a mi casa, las luces estaban apagadas, al ver eso sabía que no había llegado, al día siguiente me desperté y lo vi acostado en el mueble de la casa, estaba pálido y no tenía pulso, su boca se abrió y su lengua estaba marcada con una serpiente —dejó salir un respiro y siguió— Él fue quien me adoptó cuando yo estaba en el orfanato, fue el único que me quiso, nadie me adoptaba hasta que un día, su sonrisa y la mía se unieron, me adoptó, me dio de todo sin yo pedirle nada— Las lágrimas empezaron a salir—. Pasaron los años y él no cambió, siguió siendo el mismo, pero no le di las gracias por todo, siempre era bueno conmigo, me quería como si fuera su hijo de sangre —lo abracé, no sabía qué decir, así que con un abrazo demostré mi apoyo.

— Lo siento —volví a decir. Puso sus manos en mis mejillas

— No es culpa nuestra lo que pasó —dijo despegándose de mi abrazo— Ahora te tengo a ti, tu eres la razón que me queda para seguir vivo, por favor no te vayas de mi vida, quiero que estés en ella a pesar de todo, no quiero quedarme solo, quédate conmigo—no tenía palabras para responder a eso, me sorprendí y mis nervios empezaron a apoderarse de mí, pero estaba segura en algo y sí quiero quedarme con el

— Me quedaré contigo —dije abrazándolo.

— ¿Lo prometes? —preguntó.

— Lo prometo, siempre estaré contigo —dije segura de mi misma, me quedaré con él, él siempre está para y mi yo quiero estar con el cuando más lo necesite.

— Gracias, eres mi pequeña —dijo dándome un beso en la frente, para luego poner su mano sobre mi cabeza.

— ¿Cuál es la segunda cosa que me tienes que decir? —pregunté, enseguida bajo la mirada— ¿Qué pasa? —volví a preguntar— ¿Murió alguien más? —pregunté asustada.

— Sí, Kylie —dijo con la mirada baja.

— ¿Alexia? —pregunté con todo los miedos del mundo, tenía miedo que me dijera que Alexia había muerto.

¿Quién es Annie? #BlueStarAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora