Chico Malo

22

Capítulo 22

El chico comenzó a caminar nuevamente acercándose a la cabaña, _________ lo siguió, no pensaba quedarse atrás.-

—¿Qué haces, Christopher? -Preguntó al ver que planeaba entrar en la cabaña--

—Ehm... ¿entrar? -dijo obvio--

—No puedes entrar así como así a una casa ajena, no es correcto.

Luego de decir eso se dio cuenta lo estúpido que sonaba. Christopher Velez y correcto no iban en la misma oración, no le importaba si la casa estaba ocupada o no y eso _________ lo sabía.

El viento se volvió a hacer presente pero esta vez más fuerte, ella apretó la campera que Christopher le había dado más a su cuerpo para mantenerse cálida. Pequeñas gotas de agua empezaron a caer sobre su pelo, poco a poco las pequeñas gotas se estaban convirtiendo en lluvia.

Christopher ya había logrado abrir la puerta de la cabaña, no había sido muy difícil ya que estaba acostumbrado a hacerlo. Cada vez que volvía del bar la puerta de su casa estaba cerrada y tenía que rebuscársela para abrirla, así fue como aprendió a hacerlo.-

—¿Te quedaras ahí o vas a entrar? -Le dijo al ver que no se movía de su lugar-

Un trueno interrumpió su respuesta haciéndola sobresaltar, casi se le para el corazón. Nunca le habían gustado las tormentas, cuando era chica siempre las pasaba en la cama junto a su madre hasta que los truenos y la lluvia cesaban, pensó que al crecer ese miedo iba a desaparecer pero no era así, todavía le tenía miedo a las tormentas.Sin decir nada se apresuró a entrar, una vez los dos adentro empezó a llover con más fuerza, dieron gracias por no estar afuera en esos momentos.

La cabaña no era muy grande, se notaba que era vieja, los tirantes del techo estaban deteriorados, las paredes estaban sin pintar y estaba amueblada a medias.-

—Intentare prender el hogar -señalo este, ella solo asintió-

Dejo a Christopher trabajar tranquilo con el fuego, decidió recorrer la casa, ya que no era muy grande, no le iba a tomar mucho tiempo.

Abrió una puerta, un inodoro, una bañera, artículos de limpieza y de más se alzaron ante sus ojos, dedujo que era el baño. Abrió otra puerta y se encontró con una cama matrimonial y un gran armario.

Definitivamente tenía que estar ocupada aquella cabaña. Ella solo esperaba que no volvieran hasta el día siguiente, no sabría que decirle a los dueños si estos llegaran a encontrarlos en su cabaña.

Escuchó a Christopher gritar y se volvió hacia él asustada.-

—¿Qué ocurre? -preguntó con la respiración agitada por su rapida corrida--

—He prendido el fuego -sonrío triunfante-

[...]

—No sé cómo vamos a hacer para dormir-dijo ella mientras contemplaba la cama matrimonial-

Él miró la cama, luego a ella y sonrió.-

—Oh claro que no-sabia por donde venia la mano, no iba a dormir en la misma cama que Christopher--

—De acuerdo, tú duerme en la cama, dormiré en el piso.

__________ se sintió culpable, Christopher le cedía toda la cama para ella y él tenía que dormir en el frio piso, pero no había nada que ella pudiese hacer.

El chico se sacó la remera en un abrir y cerrar de ojos, ella se sorprendió al ver esa acción y se cubrió los ojos.-

—¿Qué se supone que haces?-

—Dormir-dijo obvio-Agarró una de las tantas frazadas que tenía la cama y la tiró en el piso.-

—Me refiero a lo de la remera.-

—No duermo con ropa.

Ella abrió sus ojos más de lo normal, ¿Cómo que no dormía con ropa?
Él rio.-

—Que mente sucia tienes, __________. Solo duermo en bóxers -ella vió como se desprendía el primer botón del pantalón, era inevitable no hacerlo--

—Christopher-lo llamó antes de que se sacara los pantalones, él la miró-puedes dormir sin remera pero los pantalones se quedan-apuntó con el dedo lo ultimo--

—Como quieras-se abrochó los botones nuevamente-

La tormenta no había cesado, al contrario, había empeorado. Podía sentir como las ramas pegaban en el cristal de la ventana, los truenos la hacían sobresaltar cada tanto, todavía no había podido pegar un ojo. Se tapó más con las frazadas, por lo menos frio no pasaba, pensó en Christopher y el frio que estaría pasando acostado en el suelo, un estruendo hizo que esos pensamientos se esfumaran, ¿Cuándo iba a parar la tormenta? , simplemente no lo sabía.-

—Christopher -susurró-Al ver que no había respuestas lo volvió a llamar pero esta vez en un tono más alto.-

—¿Hmm? -murmuró todavía con los ojos cerrados-

No sabía cómo decirlo, la tormenta la estaba asustando demasiado pero no quería decírselo a él.-

—Si quieres puedes dormir en la cama -fue disminuyendo el tono de voz a medida que hablaba--

—No quiero incomodarte.-

—No lo harás.

Christopher se paro con pereza del suelo, recogió la frazada y la almohada que había tomado, y se acostó en el espacio que _____ había dejado para él.

Cada uno estaba en una punta de la cama de espaldas al otro, otro estruendo la hizo sobresaltar y se acerco un poco al chico.-

Christopher-susurró otra vez--

—¿Qué? -seguía con sus ojos cerrados--

—¿Puedo... puedo tomarte la mano? -se ruborizó al preguntar eso-

Él sonrió y murmuró un <<"si">>. Ella dudó al principio en tomarla pero luego se decidió por hacerlo. No sabía por qué pero estando cerca de él se sentía segura, protegida.

Christopher al sentir la cálida mano de _________ sobre la suya se estremeció al solo contacto con esta. Le había parecido dulce su pregunta, era obvio que estaba asustada por la fuerte tormenta que se desataba afuera pero estando con él no tenía nada de que temer, no iba a dejar que nada malo le pasara.-

—¿Mejor? -la miró-

Ella tenía sus ojos cerrados pero aun así murmuró un <<"si">>. -