Chico Malo

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Capítulo 57

—¿Desde cuándo estas enamorado? - Christopher se sobresaltó y quitó la mirada de _______. Por dentro se estaba regocijando de la felicidad al ver que ella no lo había besado.
Miró hacia su derecha encontrándose con Rockie, quien bebía tranquilamente de su vaso.-

—¿Disculpa?-

—Que desde cuándo estas enamorado de ella -volvió a repetir.- Si, eres muy obvio -Respondió a su pregunta mental.-

—Desde que me tiró jugo en su casa -Recordó mientras una sonrisa surcaba su rostro.-

—Tú deberías estar en el lugar del castaño, ¿Verdad? -Christopher asintió.- No sé porque se separaron pero... ve por ella -lo animó. Él la miró extrañado.

—¿Dónde estaba la Rockie que repartía piñas a quien se atrevía a mirarla?-

—No me mires así. Aunque no lo creas, estuve enamorada -La vida lo había sorprendido bastante, pero eso definitivamente se llevaba el premio a la cosa más sorpresiva. Rockie y enamorada no eran palabras que iban en una misma oración, desde su punto de vista. Pero al parecer las apariencias engañan- No la dejes ir, hazme caso -Le palmeó el hombro y luego desapareció entre la multitud, dejándolo más sorprendido que de costumbre.

Ese plan que había acordado con Erick seguía en marcha y ahora estaba más seguro que antes. Se arriesgaría a la humillación de que todos lo vieran con traje, por ella.-

—¡Bájate los pantalones! -Ordenó el bronceado.-

—Eso no queda muy masculino que digamos, Erick.-

—¿Quieres hacer esto o no?-

—No lo sé...-

—Shawn... --Dijo su nombre en un tono extraño. Estaba comenzando a dudar si era del planeta tierra.-

—Está bien, lo haré.-

—Ahora, quítate los pantalones.-

—No lo digas de esa forma, porque no me los quito nada.-

—¿Y cómo quieres que lo diga?-

—No lo sé. Suena extraño cuando tú lo dices, y más si estas así. -

—Apúrate, que me estoy congelando sin tus pantalones - Erick se encontraba solo en bóxers esperando por los pantalones del moreno.-

—Ruega para que no entre nadie y nos vea en estas circunstancias. No quiero que me expulsen por creer que tú y yo tenemos algo íntimo.-

—Por lo menos dirán que te elegiste a alguien guapo -Christopher lo fulminó con la mirada mientras el bronceado se encogía de hombros.- Solo digo...

Salieron del aula vacía cautelosamente. Christopher, ahora, portaba el traje de Erick y el aludido lo que Christopher se había puesto, es decir, su típica ropa de todos los días.-

—¿No pudiste venir un poco no se... más elegante? -acotó Erick abriendo una puerta.-

—No te quejes, estas portando mi ropa. Siéntete importante -Dijo arrogante.-

—Christopher, se trata de tu ropa. No me puedo sentir importante usándola.-

—Hoy te salvas porque estas ayudándome con esto. ¿Cuándo entro? -Miró a través del telón que daba al escenario. Podía ver cada movimiento que los estudiantes hacían desde allí. _____ se encontraba entre la multitud bailando con  Abby.-

—Cuando sepa como cortar esto -El moreno desvió su mirada hacia abajo, en donde se encontraba Erick inspeccionando unos cables como si fuera todo un experto.-

—¿Sabes cuál cortar, verdad?-

—Ehm... Eso creo.-

—Más vale que sepas si no quieres que tu cara sangre.-

—Puedes callarte... por favor -Se retractó al ver la cara que portaba Christopher- Estoy tratando de recordar lo que dijo la directora -Presionó sus dedos contra sus sienes, concentrándose. Alargó la mano, agarrando la tijera que reposaba en una mesa y cortó sin más. La música dejó de escucharse, reemplazándola por abucheos, por parte de los estudiantes.-

—Eres un genio.- Claro que lo soy.

Christopher tragó en seco sabiendo que era el momento de actuar. Sus manos temblaban contra su voluntad, nunca había sentido aquello. Nunca se había puesto nervioso por algo.-

—¿Tienes miedo verdad? -Él bufo tratando de no detonar nerviosismo, pero le salió todo lo contrario.-

—Claro que no.-

—Estas cagado hasta las huevos, admítelo -le puso la mano en el hombro.-

—Tal vez...-

—Tienes que entrar. No tardaran en darse cuenta que nosotros fuimos los que cortamos el cable.-

—En todo caso fuiste tú.-

—Hey -lo llamó antes de traspasar el telón-

—Gracias -le sonrió.-

—No me sonrías o creeré que te gusto -Elevó y bajo sus cejas una seguidillas de veces. Christopher sólo rodó los ojos y se adentró al escenario. Esperando que todo saliera como lo esperado..