La vida da muchas vuelta cuando menos te lo esperas. Y cuando esto sucede quieres que todo vuelva a su lugar.
A pesar de todo lo sucedido nada se puede hacer cuando vives solo por una persona.
Todos tenemos un motivo por el que vivimos y ninguno es...
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Catalina
No podía creer lo que acababa de escuchar, El Duque el había dicho que "Esa" ahora era su esposa.
De ninguna manera lo iba a permitir.
—Duque, podemos hablar— le digo — Ahora no puedo, tengo que irme, tal vez mañana— me responde secamente se gira para hablar con Bera—. Ahora quiero que la ayudes a recoger sus cosas, a partir de mañana se vendrá a vivir conmigo.
Diciendo eso se fue, me giro para verla con un poco más a detalle.
Ella sintió mi mirada en ella, Bera por su parte de dice que valla a recoger lo que tenga, sin pensarlo mucho la sigo, cuando llegamos a lo que supino que era su cuarto entró detrás de ella sin darle tiempo a nada, cerrado de un portazo la puerta.
Pov-Samantha
No lo vi venir, pero ella ya estaba encina de mi.
— Escuchame, con mucha atención, no se que le hiciste al El Duque, pero te aseguro que no va a durar mucho mientras yo esté cerca— me dijo tomándole del cuello haciendo un poco de precisión. — Pues, creeme haré que se olvide de tí —le digo muy segura aunque tuviera miedo. — Te vas a arepentir de haberte metido en mi camino, me las vas a pagar— me advierte para después soltarme hací provocando que empezara a toser por la falta de aire. — Acaso¿Me estas amenazando?— le preguntó con un poco de dificultad. — No, digamos que es una regalo de bienvenida, para que sepas cual es tu lugar.
Dicho esto salí de mi habitación echa una furia. Si la pinchan ahora no soltaria sangre.
Con ella presente sabía que la tenía un poco, sólo un poco difícil.
Llevaba sólo dos semanas en casa de él, todo era más extraño, en mi mente estaba ideando una plan para poder seducirlo y escaparme. Pero iba a ser difícil, ya que había seguridad en todo el lugar.
Él no a venido desde que me trajo, así que aproveché esto a ni favor para investigar algo más de su vida, estaba por entrar a su despacho, cuando alguien me abraza desde atrás asustandome.
— No te han dicho que eres muy curiosa— me dice en el oído haciendo que todo, mi cuerpo estremezca y se tensa. — Sólo quería saber si estabas ahí— le respondí algo asustada
Nos dirigimos hasta su cuarto, Realmente podía enamorarme de él o tal vez ya lo estaba, a pesar de que llevara poco tiempo con él.
Lo primero que me advirtió fue que no volviera al GinGer, y empezó a hablar de que si me portaba bien, podría salir, y hasta tener mi propio Departamento.
Cosa que me hacía ilusión, ya que vivir en el mismo lugar que la otra no era nada fácil.
Una y otra vez me ha amenazado con que debería alejarme de él, pero cada día que pasaba me iba enamorado de él, haciendo que me olvidé de todo lo que eh vivido.
Todo estaba de maravilla, pero que pasara cuando le de la noticia que le tengo que dar.
La Gata
Una otra vez, le he dicho que él es mío, ella no me hacía caso por eso cuando se presente mi oportunidad me asegurarse de que conmigo no se juega.
Juro que me las va a pagar, una a una las noches que pase sola, todos sus rechazos ya me encargaría de ella.
*** Aquí otro capitulo, que será lo que ella le dirá.
Si tienes curiosidad espera al próximo capítulo. Atención en el próximo capítulo habra algo de violencia. Besos
