La vida da muchas vuelta cuando menos te lo esperas. Y cuando esto sucede quieres que todo vuelva a su lugar.
A pesar de todo lo sucedido nada se puede hacer cuando vives solo por una persona.
Todos tenemos un motivo por el que vivimos y ninguno es...
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"El Duque"
Hasta ahora era lo mejor que había visto, sentía que estaba hechizado; le encantó como lo miraba y había algo de lo que estaba seguro. Y es que la quería en su cama.
No perdió el tiempo y le pidió a Bera que la quería, pero ella le dijo que había un pequeño problema.
—¿Que dijiste?— le preguntó asombrado —Lo que oistes, ella no está adiestrada.— le volvió a mentir ella sabía que la chica podía hacer que cualquier hombre cayera —Entonces, me quieres decir que mierda haces, con una chica sin entrenar— la reprendió por eso y un poco molesto
Ella respiro profundo para calmar sus nervios, por que cuando el se enojada era el mismo diablo. Y no sabía que explicación darle. —Lo que pasa es que,...— se quedó pensando en algo que decirle— es buen bailarina, y sabes que no dejo que nadie la toque sin mi permiso
El se quedo pensando un rato y después le dijo —Esta bien, pero que no se te ocurra dársela a otro sin mi permiso, esa chica...— se quedó pensativo—. Será mi mujer.
Dicho esto dejo pasmada a Bera, que no se esperaba eso.
Esta vez se la dejó pasar, pero sabía de ante mano que esa chica lograría lo que muchas desean.
Aisha
Me puse un vestido negro, pagado al cuerpo. En cada lado del vestido era trasparente, así que quería dejar saber que no llevaba nada puesto.
Mientras me daba los últimos retoques, Bera entra cerrando la puerta detrás de ella y se recuesta.
— Ya no necesitas arreglarte tanto, El Duque ya no te necesita — Pero, se supone que a él no se le niega nada— le digo con reproché
Bera estaba arruinado mis planes, sabía que lo hacía a propósito.
— Sabes que pasa, que cuando una chica está sin entrenar. No hay nadie que la toque sin mi permiso — me dijo cruzando los brazos sobre su pecho sabiendo que yo podía hacer lo que quiera. — ¡Pero tú ya me entrenaste! — Si lo hice..., y parece que lo hice bastante bien.
Sabía que se había dado cuenta sino no me haría esto.
Me lo pienso un poco, al parecer sabía lo que estaba tratando no lo que tenia en mente, no quería arriesgarse de todos modos yo era su ganancia.
En ese mismo momento, se me ocurre una idea muy loca
—Y..., ¿porque no me conviertes en una exclusiva?
Ella se queda muy pensativa, a lo mejor nunca había pensado en eso. —Eso no lo había pensado— me responde con si de verdad lo estuviera pasando —No lo pienses, demasiado sabes que El duque se pondrá impaciente— le dije para que dejara de pensarlo
Pero lo que ella no sabía era que si el Duque se enterara se tenía que dar por muerta, de todas maneras iba a correr el riesgo. —Tienes razón, a partir de mañana empiezas
Dicho esto se fue dejándome sola, tenia que pensar en algo o si no Bera la pondría a trabajar como las demás chicas.
