No Te Busque #1

CAPITULO 15

LÍA

Ya han pasado tres semanas desde que me gradué, hoy es mi primer día de trabajo y estoy nerviosa e inquieta, espero que todo salga bien, en cinco minutos entraran por esa puerta los enfermeros y enfermeras que recibirán indicaciones mías de ahora en adelante, espero poder guiarlos bien, daré todo de mí, miro mi celular buscando un mensaje o una llamada de Ian pero no veo nada, hace cuatro días que se fue de viaje a Seattle para un cierre de negocios y hace dos días que no hablamos, siento que me hace falta y le temo a ese sentimiento ya que no se a donde llegare con él, es cierto que me atrae mucho y el sexo es fenomenal pero no quiero tener nada serio, aunque siento que me estoy engañando respecto a eso, la verdad es que me gusta mucho y eso me asusta porque se que puedo salir lastimada

- Señorita Morel, aquí están los integrantes de su equipo, tienen diez minutos para hablar y conocerse, luego los espero en el cuarto piso en el ala este, allá estará el doctor Mckonill, él será su supervisor y le dará más información de que casos se hará responsable y esa será su ubicación hasta nuevas órdenes, espero les vaya muy bien, están en sus manos – dice una enfermera saliendo y haciendo pasar a los chicos y chicas quienes me miran como bicho raro, me han dicho que no aparento la edad que tengo, debe ser eso o eso quiero pensar

- Buenos días, me presento, soy la enfermera jefe Lía Morel O'Connor, los guiare en el tiempo que compartamos juntos y espero que tengamos una buena convivencia entre todos, de igual manera que los escuchare y espero ustedes me escuchen, por lo general soy tranquila y no me gustan las peleas y mucho menos los enfrentamientos agresivos así que espero que todos se controlen en situaciones estresantes y hablen, hablar es la mejor manera de solucionar problemas, creo que ya hable demasiado así que los escucho, quiero saber sus nombres – digo poniéndome en pie y haciéndolos reír, se ven agradables, a continuación todos se presentan

En mi grupo se encuentran seis mujeres y cuatro hombres, entre ellos creo reconocer que uno es gay y es muy apuesto, delgado, alto, cabello rubio y liso peinado hacia un lado, ojos verdes muy claros y varias perforaciones que deberá quitarse en horas de trabajo

Los nombres de las chicas son, Olivia, Emily, Madison, Charlotte, Lauren y Abigail la cual me agrada al instante, los chicos son Harry, Damián, Thomas y Daniel quien efectivamente es gay

- Vale chicos, un placer conocerlos, ahora debemos subir a ubicarnos, vamos – digo levantándome y dirigiéndome a la puerta

Abro y espero a que todos salgan para salir yo también, llamamos el ascensor y todos subimos en el, Daniel y Abigail están a mi lado, siento que seremos los mas unidos, por otra parte veo a la pelirroja mirándome mal, ya olvide su nombre, creo que es Charlotte, espero que no me de problemas, aunque esa mirada me dice todo lo contrario, no le prestare atención, debo concentrarme en cosas mas importantes que en caerle bien a todo el personal, salimos y nos dirigimos a una recepción al lado de unas puertas dobles completamente en vidrio color oscuro, no veo nada hacia adentro

- Buenos días señorita, soy la enfermera Morel, el doctor Mckonill me espera – le digo sonriéndole a la recepcionista,  es una chica linda

-Claro que sí, pueden entrar, al final a la derecha, puerta 406 – dice volviendo la mirada al computador y accionando las puertas para dejarnos ingresar

-Por aquí – les digo entrando, todos van tras de mi como niños obedientes, esto me gusta, creo que podre acostumbrarme a dar órdenes, los hare mis esclavos, bueno no, eso no pasara – esperen acá chicos, ya vuelvo – les digo señalando hacia lo que parece ser una sala de espera, llego frente a la puerta y toco

- Siga – dice el doctor Mckonill

- Buenos días doctor Mckonill, soy Lía Morel, un placer – le digo estirando la mano y presentándome

- El placer es todo mío enfermera Morel – dice dándome un apretón suave y llevando mi mano a sus labios, deposita en esta un beso y me da una mirada coqueta, ¡lo que me faltaba!, es un hombre de no mas de treinta años, rubio con ojos azules, es igual o mas alto que ojos grises, tiene la espalda ancha y brazos musculosos, debe hacer ejercicio, está en forma – siéntese, ¿quiere algo de beber? – dice señalando una silla y acercándose a una mesa donde hay una máquina de expresos

- Un café está bien – le digo sentándome

- ¿Azúcar? – pregunta mirándome

- Dos por favor – digo mirándolo, me sonríe y me guiña el ojo, esto será algo incomodo

- Aquí tiene su café – dice entregándome un vaso con platico de porcelana

- Gracias – digo recibiéndolo, me rosa la mano con los dedos y la retira lentamente, no tengo tiempo para coquetear y menos con mi supervisor, carajo

- Bueno enfermera Morel, usted es la encargada del ala este del cuarto piso, supongo que eso ya lo sabía, usted y su grupo se encargaran de recuperación, aquí tiene los expedientes con toda la información y números de cuarto, si tiene alguna duda o problema inmediatamente se comunica conmigo y le ayudare en lo que necesite – dice y siento que su comentario viene con doble intención

- Así será doctor Mckonill, me retiro – digo levantándome y dejando el vaso sobre la mesa vacío – muchas gracias por el café, con permiso – doy la vuelta sintiendo su mirada recorrer mi cuerpo y salgo de la habitación

- Bueno chicos, ya estoy aquí, somos los encargados de recuperación, estos son los expedientes, vamos a instalarnos al cuarto que nos asignaron e iniciaremos el trabajo – digo pasando frente a ellos y abriendo la puerta del  primer cuarto a la derecha, tiene un cartel con mi nombre escrito

Abro la puerta con las llaves que me dieron apenas entre y los dejo pasar, son dos cuartos unidos, separados por dos bigas en el centro, las paredes son color pastel, frente a la puerta de entrada hay varios casilleros con clave para dejar nuestras pertenencias y al lado izquierdo contra la pared se encuentra una camilla doble con colchonetas sobre esta, alguna vez dormiré aquí, en el otro cuarto las paredes son del mismo color, en esta se encuentra una mesa de veinte puestos en madera color negro, atrás hay una encimera con un horno microondas, una estufa empotrada de dos puestos, bajo esta se encuentra un cajón con platos, vasos y cubiertos, encima de la encimera se encuentran unos gabinetes vacíos donde podremos guardar comida y al lado de la encimera hay una nevera mediana y la misma maquina de expreso que tenia el doctor Mckonill en su consultorio, me encanta todo, también diviso una puerta al fondo que supongo debe ser un baño

- Listo chicos, empecemos – digo poniendo los expedientes sobre la mesa y guardando mis pertenecías en el casillero esquinero, es el mas grande de todos, cuelgo mi chaqueta y guardo mi bolso, saco mis instrumentos y cierro el casiller poniendo mi clave, cuelgo mi estetoscopio en el cuello como todos los demás, agarro las carpetas y salgo, todos salen detrás y cierro la puerta, nos vemos guapos uniformados, el pantalón y camisa color gris claro con los nombres de cada uno grabados en los bolsillos del pecho, mi uniforme es color agua marina y encima llevo una bata color blanca que me llega hasta la rodilla con mi pasaporte colgado en el bolsillo superior – aquí vamos – digo bajo para mi misma.
 

Un capitulo mas
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