Nuestra Pequeña Familia. ¨[kamitani x Ryuichi]¨

「8」Disastrous birthday :

El fin de semana había llegado en menos de lo esperado, un omega de cabellos castaños se levantaba como de costumbre siendo recibido por un expectante niño de cabellos verdes con un panqué en las manos junto a un mayordomo y la directora del instituto.

— Ryuichi —el pequeño extendió el postre hacia las manos del omega, — gracias, Kotaro —le regaló una cálida sonrisa. 

Al terminar de agradecer a la directora se arregló,  al ser su cumpleaños irían al acuario, el omega pidió invitar a Kamitani y Taka; a lo cual accedieron, tomó el teléfono en sus manos después de haber marcado el número.

« — ¿Bueno? —el omega se puso nervioso de no recibir respuesta por parte del alfa beisbolista. 

— Buenos días, habla Ryuichi, ¿podría comunicarme con Kamitani? — musito Ryuichi con nerviosismo, era muy raro hablar con la profesora Shinzuka.

— ¡Hola Ryuichi, un gusto oírte! Kamitani no se encuentra, salio desde hace un rato y no creo que regrese pronto, me dijo que iba a ver a alguien; ¿para que lo necesitabas?

— Bueno yo quería invitarlo a él y a Taka a el acuario, pero si no está, ¿podría dejar ir a Taka con nosotros? —pregunto desanimado, realmente quería pasar ese dia a lado del azabache, ¿con quien habrá salido?

— Claro, ¿pasas por él?

— Sí, bueno nos vemos —se despidió el omega para luego colgar. »

El castaño soltó un leve suspiro, era su cumpleaños y nada salía como él quería. Paso por el menor de los Kamitani el cual acaparó al instante la atención del pequeño Kotaro, arrastrándolo lo más rápido que podían moverse; los menores estaban muy emocionados por ir al acuario mientras el omega estaba decaído por no ir con quien él abría querido, quería sostener esa cálida mano otra vez, quizás sería muy importante esa persona con la que fue; se sentía dolido porque el alfa no se acordó de su cumpleaños un día importante para él, a lo mejor no le dio tiempo de felicitarlo.

La tarde en el acuario era tranquila, al ir a ver a los delfines los dos menores se alejaron sin previo aviso, Ryuichi al darse cuenta los fue a buscar sin darse cuenta de su alrededor. En eso los delfines hicieron un truco que salpicó mucha agua hacia las gradas, las cuales estaban protegidas mientras que el omega enfrente de ellas quedó empapado, aparte de que lo regañaron no encontraba a los niños hasta que anunciaron dos niños perdidos por la bocina, fue a traerlos donde recibió otra reprimenda por dejar a dos menores de edad solos.

Luego no encontraron nueva ropa por lo cual se quedó con esa ropa mojada durante su recorrido y  no terminaban sus tragedias puesto que no pudo ver un espectáculo de luces y proyecciones por estar mojado no lo dejaron entrar. Pasó una hora aburrido afuera de la cabina de proyecciones, al principio no querían dejarlo solo pero él insistió en que tenían que divertirse; a pesar de todo lo consolaba que su hermano se encontrara feliz.

El castaño empezó a estornudar producto del frío más la ropa que traía puesta, a pesar de eso siguió su recorrido con los demás no quería arruinar el día de su familia; era un dia desastroso y lo que más dolía, era su primer cumpleaños sin sus padres, necesitaba un abrazo de su madre.

Por otro lado un alfa de cabellos negros se encontraba con una beta, paseaban alegremente por el acuario, su madre le había avisado que Ryuichi lo busco; pero el alfa hizo caso omiso, tal vez era hora de olvidarse un poco de Ryuichi ese día disfrutaría con Inomata.

Se la estaba pasando bien de una sección a otra, la beta era divertida pero extrañaba la sonrisa de un castaño, tal vez si hubiera venido con Ryuichi seria mejor, a lo mejor llevaría un día a Ryuichi al acuario seguro que le gustaría, « ¿Cuál sería tu reacción tomatito? » seguramente le encantaría el lugar, una sonrisa surco sus labios ante tal pensamiento.

La tarde cada vez avanzaba un poco más, con el cielo cobrando un tono melocotón. Para Kamitani un tarde pacífica, para Ryuichi una noche melancólica con el firmamento iluminando su pobre corazón.