13 | Une petite situation.

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Deja aquí algo para la autora :3 y quien ponga "Han pasado 84 años" Le parto su madre >:v! ...  Besitos💋

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✩彡.。Ok no, antes que nada, pido una enorme disculpa a todos los lectores y seguidores de este fanfic, las razones por las cuales tardé tanto en actualizar ESTE fic son varias, comenzando por un estancamiento y crisis existencial personal con respecto a las ideas que tenía para este cap, finalmente decidiéndome por aquello que me va mejor y para lo cual soy buena (Ya lo sabrán en cuanto lo lean :'v ) Así como también, me he estado centrando más en otra de mis obras y bueno, a veces las ideas no llegan tan equitativamente para todos mis fics, sin embargo, prometo que desde ahora trataré de traerles actualizaciones semanales y así organizarme mejor con todo esto.

Sin más por el momento me despido, disculpandome de nuevo pero cumpliendo con mi palabra de NO ABANDONAR NINGUNO DE MIS FANFICS, tarde pero seguro :3

Los quiere con todo su cora:

๛ ConnieVkz.

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— Bien, tu distraes a tus padres y yo entro sigilosamente a buscar a Hugo para que nos preste a Tikki y Plagg ¿De acuerdo?

Conducir por la ciudad con el caos desatado debido a un inesperado y casi poco problable akuma era complicado, sin embargo, el hacerlo mientras intentas mantener la calma, a pesar de prácticamente haber abandonado a la ex novia de tu mejor amigo a su suerte y con tu esposa con los nervios a flor de piel, por no contar con nuestros kwamis en ese momento y saber que era nuestra responsabilidad salvar París era un asunto ya de muerte súbita.

— ¿Enserio ese es tu gran plan? — Preguntó Marinette mientras se cruzaba de brazos, yo asentí.

— Es eso o llegar con mis suegros diciendo "Cuiden a los niños mientras nosotros salvamos París"

Marinette suspiró.

— Los conozco, ellos no me permitirán salir de casa cuando me vean...  Ya sabes, por mi seguridad.

— ¿Entonces yo los distraigo y tu...?

— ¡Tenemos que encontrar otra manera!

Bufé y apreté con fuerza el volante mientras giraba hacia la derecha, internandome en la gran avenida que llevaba hacia la casa de los padres de mi mujer.

— Carajo, me siento nervioso. — Susurré con la vista fija en el camino, pude sentir la mano de mi esposa deslizandose por mi brazo, bajandola hasta posarla sobre la mano con la cual sujetaba la palanca de velocidades.

— Todo va a estar bien, gatito...

Sonreí a la vez que le dedicaba una rápida aunque tierna mirada, con Marinette a mi lado, nada malo podría pasarme y sin duda, yo no permitiría que algo le sucediera a ella.

— Bueno, nuestra misión en estos momentos es llegar a nuestros kwamis y después...

— Espera — Interrumpió mi esposa, quien sostenía su celular en su mano libre, mostrándome el contacto de la persona que en ese momento le llamaba. — Alya... — Susurró al momento de responder el teléfono— Si, todo indica que se trata de un aku... ¿Qué?  ¿Hugo está en tu casa?

¿Porqué eso no me extraña?

Bien, vamos para allá.

Colgó.

LA VIE EN ROSE | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora