La Tierra De Los Perdidos

Capítulo 17: La verdad de Diego.

"La verdad es que no hay verdad, todas las verdades del mundo son misterios huecos llenos de dudad, la verdad no es absoluta".

Diego entra la habitación temeroso, nervioso y casi llorando, se sienta al lado de mi cuerpo tomando mis manos, el parece triste.

Diego: Yo... Lo lamento... Prometí no decir nada pero abriré mi boca, no aguanto mas, te confesaré todo

¿De qué habla?

El se acerca a mi oídio casi llorando.

Diego: Escucha bien. No se si puedas oírme o estés aquí pero he venido todos estos 2 meses y me he sentado aquí tratando de conseguir el valor para hablarte y ahora no me callaré. Natán era tu mejor amigo, él sufrió mucho, de muy pequeño se culpa por la muerte de su madre y es porque su padre la mató, estoy seguro de eso, desde entonces su padre abusa de él y cuando llegó a sus vida Mía el se enamoró al igual que tú pero no interfirió, él quería que tu fueses feliz incluso por encima de él, Natán no se metió en esa relación de ustedes, fue su padre quien al ver lo feliz que era él contigo quiso hacerte daño, Natán no quería que sufrieras lo mismo que él y te alejo, demostraba que te odiaba insultándote y tratandote mal así que su padre perdió interés por ti pero no podía hacerle lo mismo a Mía, ella se acercó a él tratando de saber porque era tan malo contigo y simultáneamente ella terminó enamorada de él. No sé si lo creas pero así pasó.

Natán no pudo alejarla, no pudo aunque lo intentará, ella se involucró tanto con él que su padre tuvo interés con ella y la hizo venir a su casa. Abuso de ella junto con otros hombres y hasta un perro. Ella quedó tan devastada de que su primera vez fuese así, que incluso su novio estará allí y no pudo salvarla, fue amarrado, lo sentaron enfrente de ella mientras la violaban por horas... Fue horrible.

Diego tomó un poco de agua secando sus lágrimas.

Diego: Mía no sabía que hacer, no podía dejar a Natán sin padre si llamaba a la policía así que se quedo callada guardando dentro suyo todo ese dolor, Mía se convirtió en el juguete del padre de Natán, como ves, hemos sufrido... Luego de eso yo me acerque a ellos, no me parecía bien que te maltrataran, pero Mía tampoco quería que sufrieras, como ves ella se saco ese dolor convirtiéndose en una zorra, pero nunca ha dejado de amar a Natán. Yo los seguí y descubrí el gran horror, lo grabe todo y logré que dejará a Mía en paz, logre que Natán no fuese abusado al menos sexualmente pero aun lo es de otras formas. No tengo el valor de demandar y te maltrato para protegerte, ver lo que vi fue horrible, aun lo recuerdo y mi mente se rompe, lloré tanto, de cierta forma maltratarte ha sido una forma de desquitaron, eres el único que no ha sufrido por aquél hombre, tengo varios vídeos del horror de hombre que es, aunque no lo viví físicamente verlo fue algo que nunca olvidaré.
Despierta si? Tal vez tu seas el único que pueda salvarlos, sé que ese hombre no siempre temerá a mis amenazas y seré su próxima víctima.

Diego se levanta de la silla e intento abrazarlo agarrar su mano para detenerlo, mi mano la traspasa y el parece mirarla.

Diego:  Que frío...

El se ve rápidamente llorando. Diego... Natán... Mía, los salvaré del monstruo que los asecha, que los alejó de mi.

Custodia aparece detrás mio asustandome.

Custodia: Lo hiciste bien, ahora comprendes lo poco humano que eras.

Aquél espejo de la última vez aparece en frente mío, esta vez me veo mejor, me veo como si mi aura hubiese cambiado, como si fuera mejor persona.

Pero sé que hay un hueco en mí, me iré y dejaré esto que siento, es falso, pero parece real. Por mi mente pasan imágenes de una chica con cabellera negra, larga, mirada fría, mi corazón de acelera y quiero amarla, no poseerla.

Próximo capítulo: ¿El fin de nosotros?