Capítulo 16. No es una historia de amor

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"La llave cayó lentamente del cielo, aquella estaba manchada de sangre y parecía ser el centro de atención del mundo, sólo porque al mirarla caer quisieras evitar su caída, que no se dañase... O tal vez era la codicia de tener algo único, algo tan poderoso como los ojos de quien le pertenece.

Por alguna razón aquellas caras desconocidas y similares, y ni yo podíamos movernos, en el centro de aquél espectáculo montado por un ser superior, aquel que juega o ama, solo se que él planeo esta trama y en el centro de la actuación está la reina del show, Custodia, ella atrapa esa llave que cae y entra a la habitación donde se guarda lo único que queda de su humanidad, de aquella vida miserable y lo destruye. Rompe en mil pedazos aquél recuerdo, toda capacidad de sentir, de vivir.

Custodia: Yo no te amo.

Y me rompe mi corazón también."

Despierto agitado mirando a mi al rededor, me encuentro en aquél hospital al lado de mi cuerpo sobre saltandome al ver a la pequeña demonio mirarme con si mirada asesina.

Custodia: Es repugnante ver las porquerías con las que sueñas.

Ángel: ¿Yo? Yo no puedo soñar. Esto incluso es como un sueño... ¿Cómo puedes ver eso? Ni si quiera es algo que debería darte asco, fue horrible.

Custodia: Puedo ver muchas cosas, y si, esto puede ser un "Sueño" para ti pero se puede tener sueños dentro de otros sueños... Y aunque no recuerdes el comienzo de ellos, soñaste cosas obscenas conmigo, no te hagas ilusiones o te partiré el cráneo con torturas humanas.

Miro hacia la ventana algo asustado por su amenaza. El suelo queda algo lejos, se ve tan alto... La brisa es fresca y me hace sentir mas melancólico. Desde aquél suceso con Custodia donde ambos fuimos corrompidos por un momento emotivo todo volvió a la normalidad, como si eso no hubiese paso, y quiero que si pase, quiero ese corazón pero siento que si lo obtengo será para poseerlo como aquel "padre" que quería los ojos de Custodia... Yo no quiero eso pero sé que un lado oscuro de mi sí.

Ángel: Custodia... Hoy no tendré que enfrentar a Diego y que tomes una decisión de mi castigo?

Custodia: ¿Ya quieres irte?

Ángel: Si...

Agacho la cabeza suspirando, tengo muchas cosas que hacer vivo, debo hablar con las personas importantes que me rodean y mejorar lo basura de ser que soy pero Custodia... ¡No! Tengo que irme, ella no me necesita. Ella no quiere que la salve e incluso si intenso salvarla podría ocasionar un caos peor.

Custodia: Si quieres hacerlo ve a su casa o espera a que llegue, igual siempre te visita.

Custodia camina hacia la puerta con su mirada seca y fría como de costumbre, de verdad quisiera hacerla sentir viva, hacer que tenga una vida mejor que la que tuvo antes.

Ángel: ¿Dónde vas?

Custodia: Que te importa, iré donde quiera ir.

La sigo guardando la distancia observando como algunos enfermos me miran, ellos deben ser almas que quedaron atrapadas en este lugar, almas pérdidas, he estado en este hospital bastante tiempo y es otro detalle que perdí al prestarle tiempo a otras cosas, el mundo de los perdidos es un misterio, aquellas personas algún día... ¿Encontrarán su camino?

Custodia sube hasta el techo del hospital y la sigo, la vista es increíble, el suelo esta mucho mas lejos y se ve todo mas alto.

Custodia: El creador ama sus obras. Ama a este mundo tanto como a el de los vivos pero el de los vivos es mas hermoso, él te trajo hacia mi con la intención de que yo también ame a los vivos, con la intención de un perdón para poder avanzar, Diego pronto llegará a tu habitación y en cuanto resuelvas todo con él, todo acabará para bien o mal, pero antes, lo que sentiste no fue real, fue un sentimiento controlado por el creador, es una ilusión. Eres su juguete, así que superalo. 

Custodia se acerca a la orilla del techo estando muy cerca de poder caer, la brisa mueve su largo cabello dándole un toque bello.

Custodia no me ama, lo que sentí fue falso...

Ángel: Es falso... Pero tu puedes hacerlo real.

Me acervo a Custodia haciendo que se aleje de la orilla acercando su rostro al mío.

Ángel: ¿Por qué me dices esto? Yo quiero amarte, aunque fue algo que un ser superior quiso crear. Algo por lo que soy v usado quizás ahora, si tu quieres esto puede ser real.

Custodia me golpea fuertemente haciendo que de mi boca salga sangre.

Custodia: Esta vez el creador me trajo a uno fastidioso, no eres el único que llegó e intento apoderarse de mi corazón, esa es la "maldición" de aquellos que lo intentan. Siempre la tentación puede más, incluso has notado como te ciega...

¿Por que creí que podría salvarla? Ella no lo necesita, ella no está triste acá, yo se no hago difícil, me iré y no la molestaré más.

Corro de vuelta a donde está mi cuerpo, Diego ya llego, puedo sentirlo, oír lo que dice como si estuviera cerca de él. Ya quiero despertar.

Pero en el fondo sus palabras queman, en el fondo siento que si la amo, pero esto no es una historia de amor.

¿Ambición o amor?

Próximo capítulo: La verdad de Diego.

Mi primo, quien me traicionó.

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