Aprendiendo a Amar - Flozmin

Dolor

-¡Hola! Busco a Virginia Estrella - preguntó una chica de contextura delgada, pelo negro y lacio. Sus ojos eran profundos, muy oscuros. Y tenía un rostro Cálido. Por la voz dulce, parecía educada. A Flor le sonaba haberla visto en algún lado.

-Soy la Hermana, ¿Para qué la buscabas?

-Tengo una entrevista con ella, ahora a las 9. Soy Malena Vega.

-Ah sí, te esta esperando. Ya le aviso. Flor, un gusto.- Dijo presentándose tendiendo la mano

La chica extendió su mano dando un apretón a modo de saludo- Flor, que lindo nombre

-Gracias.

-Flor - Dijo Vir mientras se asomaba

-Estaba por ir buscarte. Ella es Malena, viene por la entrevista.

-Buenísimo, justo venía por eso. ¿Vamos?- le dijo Vir a Malena señalandole el camino a seguir.

Flor las dejó solas, la entrevista ya no era asunto suyo. Era una mañana muy tranquila, soleada y no tan fresca como los días pasados. Aunque el Otoño estaba en sus últimos días, Flor que sufría del frío, lo estaba disfrutando y no sufriendo como otras veces. Esa mañana sintió que le faltaba algo, algo en el pecho se lo decía, nunca le había pasado. Sin quererlo tanto imágenes de Jazmín se le venían a su mente, sobre todo la sonrisa de Jazmín se le venía a su mente y casi involuntariamente sonreía al instante. Quería ver a Jazmín, era evidente, no necesitaba más señales, pero ella no vendría al hotel hasta el mediodía. No aguantaría tanto sin verla. Se le cruzó una idea vaga de ir hasta su casa, caerle de sorpresa y abrazarla por todas las horas que pasó sin verla, quizás no era tan mala idea. No le había mandando ni un mensaje, tampoco Jazmín había dado señales de vida. No quería que pensará que se estaba escapando, no sabía muy bien que estaba haciendo, sólo sabía que nunca se había sentido tan bien en su vida. Estaba parada en la puerta del Hotel, con un pie más afuera que adentro, metida completamente en sus pensamientos. Alguien le habló.

-¡Flor! Buen día chiquichunis

-Ay porque gritas tan temprano Javo *ROMPE HUEVOS*

-Bueno bueno eh, uno no puede estar de buen humor

-¿Qué necesitas?

-¿Nos levantamos con el pie izquierdo? Necesito si podes ir a la casa de Jazmín a llevarle algo

-¿No viene en un rato?

-Si, pero viene más tarde, no se siente bien

-¿Por qué? ¿Qué le pasa?

-Me dijo que se siente mal nada más, ¿podes o no?

-Si, claro.

-Buenísimo. Llevale esto y ella te va a dar unas especias que necesito - y le dio una cajita que parecía de Remedios.- Si podes venir antes del mediodía con las especias te lo agradecería.

Flor asintió con la cabeza, busco su cartera, un abrigo y salió del Hotel.

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Tocaron el Timbre de su casa, pensó que podía ser el sodero, luego lo descartó porque se acordó que había pasado ayer. Dio vueltas en su cabeza de quién podría tratarse pero no imaginaba quién. Era muy temprano, y no tenía nadie que suela ir a visitarla, bueno Javo, pero estaba en el Hotel. El Timbre volvió a sonar. Jazmín estaba intentando levantarse de la cama, el dolor de cabeza la estaba matando, hace rato no le agarraba tan fuerte, pero sabía que era porque no había podido pegar un ojo en toda la noche, era de no dormir bien, tenía pesadillas constantemente, de hecho la noche que Flor durmió con ella fue la primera vez en mucho tiempo que dormía profundo y sin pesadillas. Pero volvió a estar sola y no paró de pensar en toda la noche, el miedo la invadía, miedo de perder a Flor, miedo de hacer las cosas mal. Pensó tanto que la cabeza le pasó factura. Logró pararse, y antes de que suene una tercera vez, abrió la puerta.

-Flor... Que sorpresa, no te esperaba- Dijo sorprendida, lo más expresiva que pudo- Pasa- y le dejó lugar para que entre

-Sí, perdón por venir sin avisar, Javo me pidió que te trajiera algo y cuando me dijo que estabas mal vine lo más rápido que pude

-Ay que exagerado que es ese Hombre

-¿Qué te pasa? ¿Qué te duele?

-Nada grave, me duele la cabeza, me agarra cada tanto, es de familia. No te preocupes.

-¿Cómo no me voy a preocupar? Estás a poca Luz y tardaste en abrir, eso debe ser porque te duele mucho

-Sí, me duele, pero no es para tanto. Sé que se me pasa. Estoy acostumbrada. Sólo que hoy me duele más que lo normal por eso le pedí a Javo si me cubría unas horas.

-¿Dormiste anoche?

-No, muy poco

-Eso es lo que te falta, una cura de Sueño. Vos déjame a mi.

-No puedo dormir tanto igual, tengo que trabajar. Voy a estar bien ahora que viniste.

-No te preocupes por el Hotel, hoy te quedas acá descansando

-Javo me mata si no voy

-Soy tu jefa, no te olvides- dijo con voz autoritaria

-Si jefa, lo que usted ordene- y se rió

Flor sacó su celular y le envió un mensaje a Javo diciendo que Jazmín no estaba en condiciones para ir a trabajar y que las especias se las llevaba más tarde, guardo su celular dejandolo en silencio para que nadie la moleste. Sacó de su cartera la cajita que Javo le dio y un aceite pequeño.

-Javo te manda esto- y le extendió la caja

-Gracias. Son las pastillas que tomo para cuando estoy así, me las habré olvidado en el hotel.- Abrió la caja, sacó una y fue a buscar un vaso de agua. La tomó y volvió a acercarse. - Te diste cuenta que con esto de la preocupación no me saludaste?

-Es verdad, entre toda así apurada y... bueno, Hola - y le dió un beso cariñoso en la mejilla

-Hola- le dijo Jazmín y la besó, porque no aguantaba un segundo más tenerla en su casa sin sentir sus labios. Flor respondió al beso, porque ella estaba en la misma situación que Jazmín, sólo que antes no se animó -Ahí está mejor - le dijo y le Sonrió

-Ahí está mejor.- Afirmó- Acostate que te voy a poner este Óleo que es muy bueno para los dolores de cabeza

Jazmín obedeció y se acostó, dejó que Flor haga y deshaga con ella a su gusto, estaba rendida a los encantos de aquella Estrella. Flor colocó un poco de Óleo a los costados de la sien, entre medio de las cejas y apenas un poco en la entrada de las fosas nasales para que pueda oler el aroma. Hizo todo tal cuál como Virginia hace con ella cuando se siente mal, a ella le hace muy bien, esperaba que con Jazmín pasará lo mismo.

-¿Por qué no pudiste dormir anoche?- le consultó Flor

-No lo sé, tuve insomnio- mintió a medias

-Bueno ahora vas a dormir, porque yo estoy acá para cuidarte ¿sí?

-Sí. Te extrañe- le dijo mirándola a los ojos, casi que las palabras se le escaparon

-Yo también, te extrañe- le dijo sonriendole- Ahora descansa.

Flor se recostó junto a ella y comenzó a hacerle caricias suaves por el brazo. Buscaba tranquilizar a Jazmín, sabía que no había pasado una buena noche y que no le había dicho la verdad del por qué, pero se la dejó pasar porque había mucho que le faltaba saber de ella, y éste no era el momento indicado para indagar. Realmente quería que descanse y no se iba a mover de su lado. Jazmín comenzó a caer en un sueño profundo, no necesito mucho más que el calor de Flor para encontrarse con Morfeo. Agradecía tanto que estuviera ahí, y deseaba tanto que al volver a abrir los ojos siga estando.

Tw: @MelanyRS